M. Priede
Será en Octubre
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Seguimos en manos de gente de la misma calaña. Nuestros héroes políticos acabaron vendiendo Filipinas a Estados Unidos por 20 millones de dólares, eso impidió negociar con los secesionistas filipinos, los cuales consideraron que los habían traicionado, así que se ensañaron con los soldados españoles. Aquí lo cuentan
Aquí lo explican con más detalle:
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Parecía que la situación podía mejorar tras la firma en París del tratado de paz el 10 de diciembre de 1898, según el cual España cedía la soberanía de Filipinas a Estados Unidos y los americanos se comprometían a organizar la liberación de los españoles. Pero comenzó la guerra entre estos últimos y los tagalos y todo se complicó de nuevo. El testimonio de uno de los prisioneros así lo refleja: «Era indudable que nuestra situación se había agravado mucho. Los indios más ilustrados así lo reconocían, diciendo que el tratado de París les había cerrado todas las puertas para darnos la libertad, y que si los americanos trataban de conseguirla por las armas, nos exponían a que fuésemos carne de cañón y sirviésemos de barricadas a las fuerzas insurrectas».
Un mes antes, el corresponsal del periódico londinense «The Star» ya había dejado testimonio de la barbarie causada por los tagalos. Tan indignado estaba, que fue a visitar al general estadounidense Elwell S. Otis, gobernador militar de Manila, en busca de un poco de humanidad para estos. La respuesta fue negativa, según el artículo reproducido por algunos medios de la península: «Los norteamericanos están dando pruebas de la mayor barbaridad al consentir los horrores que cometen los tagalos con los prisioneros españoles. No es posible narrar lo que he visto. La imaginación más calenturienta no podría imaginar toda la realidad. Lleno de indignación fui a visitar al general Otis y le pedí un poco de piedad. El general me escuchó impasible y, al terminar, me respondió: “Todo cuanto usted me dice se lo he comunicado a mi gobierno y tengo órdenes de no hacer nada”. Esta pasividad es infame».
(3) La lengua española en Filipinas y Puerto Rico. La destrucción de Manila y el genocidio filipino | Burbuja.info