Me parto con este yutuber italiano del norte (Atalanta cerca de Milán) que es el típico italiano en su forma de ser. Los del norte se creen muy europeos y superiores a los del sur pero son idénticos en todo, el mismo ****** quejica attention whore que van de listos y te estafan y roban en todo lo que pueden como sus descendientes argentinos.
Ya conocéis la mayoría del foro a Lambrenedetto que le encanta España y se dedica a recorrerla y decir que está a años luz de Italia en limpieza, tras*portes, infraestructuras, precios/salarios, seguridad, etc, y aconseja a los italianos que se vengan a España que está tirada la vivienda y la comida y las autovías son gratis y el médico es gratis y el sol es gratis y tal.
Me parto con él pero no trago a los italianos y como empiecen a venir masivamente son peores que la comunidad latina o la morería. Estos macho cabríoazos ladronazos estafadores de nacimiento te montan la mafia en dos días y se hacen con todo y te convierten España en Argentina en tres días.
¿Por qué tienen ese carácter de cosa quejica llorón amargado delincuente y cabrón los puñeteros italianos de cosa? Me dan casi tanto ardor de estomago como los argentinos, aunque los argentinos son imbatibles en asquerosidad y gentucismo.
Ya conocéis la mayoría del foro a Lambrenedetto que le encanta España y se dedica a recorrerla y decir que está a años luz de Italia en limpieza, tras*portes, infraestructuras, precios/salarios, seguridad, etc, y aconseja a los italianos que se vengan a España que está tirada la vivienda y la comida y las autovías son gratis y el médico es gratis y el sol es gratis y tal.
Me parto con él pero no trago a los italianos y como empiecen a venir masivamente son peores que la comunidad latina o la morería. Estos macho cabríoazos ladronazos estafadores de nacimiento te montan la mafia en dos días y se hacen con todo y te convierten España en Argentina en tres días.
¿Por qué tienen ese carácter de cosa quejica llorón amargado delincuente y cabrón los puñeteros italianos de cosa? Me dan casi tanto ardor de estomago como los argentinos, aunque los argentinos son imbatibles en asquerosidad y gentucismo.