Eso es algo muy interesante pero no lo entiendo. Aunque los precios se mantengan, habrá inversores y las empresas necesitarían financiarse etc. ¿Y lo importado? Eso es imposible que se mantenga en el mismo precio. Así como los sueldos.
Eso ya es más complicado de saber.
Por un lado, los japoneses (los ancianos que tienen pasta) no son muy de invertir en bolsa ni nada. Todavía hay mucho bancolchón. Los inversores particulares tampoco lo tienen fácil para invertir en bolsa. La digitalización es muy limitada, y muchos bancos hasta hace nada no tenían siquier servicio por internet, ni mucho menos plataformas de inversión sencillas y seguras ligadas a tu banco con las que inviertes en dos clicks.
Además, cuando el yen ha estado fuerte, era más rentable invertir en el extranjero, ya que te salía más barato y te protegía contra la depreciación del yen que las autoridades siempre han estado buscando.
Con todo, por alguna razón que no sabría decirte, la bolsa japonesa no parece muy atractiva, quizás porque hay mejores opciones en el mercado internacional o por lo que sea. De hecho, el Banco de Japón es una de las instituciones que más pasta a metido en bolsa japonesa. Un escándalo.
Las empresas japonesas no parecen muy necesitadas de inversión a través de bolsa. Las grandes empresas tienen muchísima pasta y activos en todo el mundo, que todavía acumulan desde la época de la burbuja. Muchísima pasta. Y, como digo, el BoJ se ha dedicado la última década a inyectarles pasta con fondos cotizados.
Los salarios en Japón son relativamente bajos y han subido poquísimo las últimas décadas, menos aún que la inflación. En algunos sectores todavía existe el mileurismo y submileurismo, por lo que las empresas importadoras de recursos pueden equilibrar las cuentas gracias a que pagan poco a los empleados. De todos modos, es cada vez más evidente que este modelo neochino tercermundista es frágil, sobre todo ahora que golpea la inflación y no es tan fácil sobrevivir con sueldos bajos.
Esto provoca también que los jóvenes con talento prefieran marcharse. Un ingeniero recién licenciado en Japón igual cobra mil y poco euros por jornadas maratonianas y absurdas, mientras en en EE.UU. pueden ganar cinco veces eso. Conozco casos, especialmente con estudiantes doctorados que, en cuanto han logado el título, han salido corriendo del país.
En definitiva, Japón, tras la explosión de la burbuja hace ya 30 años, entró en una etapa de estabilidad de precios (precios, salarios, etc.). Una época de sano equilibrio y saneamiento. Se habla mucho de las décadas perdidas de Japón. Creo que estamos en posición de decir que eso es un mito. Comparada con la de otros países, la economía y, más importante, la calidad de vida de Japón no tiene nada que envidiar a la de Europa o EE.UU. Todo lo contrario.
Por ejemplo, aunque los "indicadores" apunten que España va como un cohete, desde el año 2000 hasta hoy España se ha degradado a niveles tercermundistas, mientras que Japón sigue exactamente igual que hace 30 años, o sea, bien.
Si se ha vivido un deterioro en Japón en los últimos años, ha sido por culpa de comprar ese mito de la década perdido y los temores deflacionarios, que han impulsado el desastroso Abenomics y las políticas suicidas del BoJ, con tipos ultrabajos y el endeudamiento masivo, que por cierto no les ha servido para nada más que para jorobar a la población y destruir el valor del yen.