Piden seis años de guandoca para un empresario acusado de estafa: «Nunca llegó a mandarnos los vehículos que compramos»

ANDRÉ S. ZAPATALUGO / LA VOZ
LUGO CIUDAD

El proceso fue instruido por el juzgado de Vilalba. A. SISO
Dos lucenses querían abrir una franquicia de alquiler de patinetes y quads, pero les enviaron solo parte de la mercancía; la mayoría de ella, además, defectuosa
08 abr 2022. Actualizado a las 05:00 h.
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Dos vecinos de Lugo compraron en el año 2017 siete patinetes eléctricos y seis quads a una empresa valenciana. Su objetivo era convertirse en una franquicia y ofrecer un servicio de alquiler de estos vehículos. Un año después, ambos estaban ya inmersos en un complicado proceso judicial, tras no haber recibido nunca todos los vehículos que habían comprado. Los que sí, además, habían llegado deteriorados o, directamente, inservibles.
En la mañana de este jueves, un empresario natural de Mallorca se sentó frente al tribunal de la Audiencia Provincial de Lugo, acusado de un delito de estafa. Según el escrito de la Fiscalía, este sujeto, dueño de una franquicia de alquiler y compra de motos, quads y patinetes eléctricos que operaba en toda España, defraudó a estos dos lucenses, que pretendían abrir dos locales franquiciados en Santiago y en Lugo.
Se pide para él una pena de seis años de prisión y una indemnización de 94.188 euros, es decir, lo que perdieron los denunciantes. La acusación particular, además, solicita una multa de casi 500.000 euros, el quíntuple de lo estafado.

El acusado dice que los denunciantes conocían las condiciones
Durante el juicio, el acusado se defendió afirmando que «fueron los clientes quienes se interesaron por nuestro negocio en el año 2017, durante la feria de IFEMA en Madrid». El empresario balear, a partir de ahí, explicó que «en todo momento conocían las condiciones del contrato, la franquicia y el producto que iban a obtener», insistiendo en que «incluso vinieron a Valencia dos días a recibir un curso de formación, en donde probaron los vehículos ellos mismos».
Sin embargo, ante las preguntas de la acusación particular, el acusado empezó a dudar y a alegar el desconocimiento de varias de las reclamaciones de las supuestas víctimas. Por ejemplo, dijo no recordar cuánto dinero obtuvo de aquel negocio, si los clientes habían llegado a firmar el contrato o qué tipo de vehículos les habían enviado.

Fue él quien acusó a los clientes de «desaparecer de la faz de la tierra» en cuanto empezaron sus reclamaciones, y dijo que solamente volvieron a contactar con él a través de un abogado.


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«Todo eran buenas palabras, pero nunca tuvo intención de solucionar nada»

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La versión de la principal afectada fue radicalmente distinta. En sede judicial, afirmó sentirse «estafada» por dos motivos. El primero fueron «las mentiras del acusado», ya que «no nos entregó los vehículos que habíamos comprado, y cuando empezamos a quejarnos, solamente nos dedicó buenas palabras, pero nunca intentó arreglar nada». El segundo motivo fue que ella y su pareja, que pretendían montar dos franquicias de esta empresa, jamás llegaron a recibir todos los vehículos. Solamente les llegaron los siete patinetes, «todos defectuosos, por un motivo u otro», y uno de los seis quads, «que llegó rayado y muy estropeado».

Además, la pareja estuvo casi un año completo pagando el leasing de los vehículos que no tenían. Esa cantidad, sumada al gasto en el que incurrieron para adecuar el local de la ciudad de Lugo, alcanzó los 94.188 euros. Ahora, reclaman esta cifra.
Su abogado presentó una copia del contrato, sin firmar, y ella explicó que «no queríamos confirmar la compra hasta que nos llegasen todos los vehículos».

Denunciaron tras seis meses pagando el leasing
La mujer, además, afirmó que fue el acusado quien dejó de contestar a sus llamadas: «Hablamos con el por Whatsapp para comentarle que no habían llegado los vehículos. Él nos daba siempre largas, y decía que se ocuparía de arreglar los que venían defectuosos. Nos tuvo así más de seis meses, y nunca llegó a hacer nada. Después, dejó de contestar, así que denunciamos».
Uno de los episodios que motivó la denuncia fue el que le sucedió a la pareja cuando acudieron a la Jefatura Provincial de Tráfico. Allí, les explicaron que no podían matricular los vehículos, ya que «el número del chasis no concordaba con la identificación de serie que aparecía en las facturas». Según las supuestas víctimas, esto se debe a que les enviaron unos patinetes y un quad diferentes a los que ellos habían adquirido.

Ahora, el futuro del acusado —que ya cuenta con antecedentes por dos delitos similares en Madrid— lo decidirá el tribunal de la Audiencia Provincial de Lugo. Se piden para él seis años de prisión, una multa de casi medio millón de euros y una indemnización de más de 94.000.


La Audiencia de Lugo condena a un hostelero que presentó nóminas falsas de una empleada en un juicio
LA VOZ
La Audiencia Provincial de Lugo ha condenado a un año de guandoca a un empresario del sector de la hostelería que, tras ser demandado por una trabajadora que ejercía como encargada por no haberle pagado los meses de octubre y diciembre de 2018 -tras lo cual fue despedida-, presentó en el juicio dos nóminas falsas para simular que habían sido cobradas por su antigua empleada.
Ambas nóminas aparecían firmadas por ella, pero la firma que figuraba en los documentos, señala en tribunal en la sentencia, «no fue hecha por la demandante, sino que fue imitada por el acusado o por otra persona a demanda suya».
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