Baquinjam Palas
Madmaxista
- Desde
- 28 May 2010
- Mensajes
- 2.317
- Reputación
- 4.791
PRACTICAS ABUSIVAS CON LA CRISIS
La Asociación de Consumidores de Navarra Irache ha editado una guía para advertir a los ciudadanos sobre algunas prácticas abusivas que algunas empresas llevan a cabo y que se están detectando con más asiduidad en esta época de crisis, tal y como demuestran los numerosos casos que se han recibido en las oficinas de la Asociación:
- No pagan los seguros de desempleo. Muchos consumidores, en caso de quedarse en paro, cuentan con una póliza que les cubre el pago durante un cierto tiempo la hipoteca, la tarifa de la luz o las cuotas de un préstamo, con importes que pueden llegar a los novecientos euros. Sin embargo, quizá por la crisis y el aumento del desempleo, hay muchos seguros que están exigiendo multitud de documentación, en ocasiones innecesaria, y poniendo mil trabas antes de abonar la cobertura que le corresponde al cliente.
- Comisión por traspasos entre cuentas del mismo banco. Dentro de las subidas e imposición de nuevas comisiones por parte de los bancos, algunas entidades están llegando hasta el extremo de cargar al cliente un pago por traspasar dinero entre cuentas del propio banco. En este sentido, algunos bancos, al entregar el justificante de la operación, hacen firmar al cliente que está expresamente de acuerdo y acepta la comisión cobrada, de forma que se dificulta cualquier reclamación posterior.
- Tretas para retener al cliente en la compañía telefónica. Cuando un consumidor solicita la portabilidad para pasarse a otra compañía de teléfono, y antes de que ésta se efectúe, recibe numerosas llamadas -se han llegado a recibir veinte en un día- de la compañía que quiere abandonar. Por si esto fuera poca presión, recibe mensajes confusos que le dicen que tiene que llamar a la compañía para realizar el cambio cuando no es así o le llegan ofertas de ‘smartphones’ gratuitos que luego, realmente, hay que pagar a plazos.
- Penalización en la luz. Algunas compañías eléctricas están incluyendo en sus contratos cláusulas de permanencia por los que el consumidor tiene que pagar cantidades de hasta sesenta euros si quiere cambiar de empresa antes de cumplir el año contractual. Irache considera que esta penalización es abusiva ya que se trata de un contrato de tracto sucesivo, donde no se puede limitar el derecho del consumidor a poner fin al contrato y, menos aún si no hay un apoyo económico claro más allá de las ofertas que se comercializan.
- Subida del seguro sin avisar con antelación. Muchas personas han acudido a Irache cuando ven que la cuota del seguro les ha subido más de lo esperado, en ocasiones con incrementos de más de cien euros en el seguro del coche o más de cincuenta en el del hogar, por poner dos ejemplos. La compañía aseguradora sólo ha advertido de esta subida unos días antes de que se cumpliese la prórroga o ni siquiera lo ha hecho, sin cumplir con los dos meses de antelación estipulados y dejando sin margen de maniobra al consumidor.
- No dan el alta en la TUR. Algunas compañías de electricidad están poniendo dificultades para que las personas contraten la Tarifa de Último Recurso. No es ya sólo que por teléfono no les hagan la gestión, sino que incluso cuando el consumidor acude físicamente a una oficina de la empresa y comunica que quiere darse de alta en la esta tarifa pública, los dependientes no saben hacerlo o directamente les dicen que no se puede realizar el alta.
- No te dejan irte del banco. En los últimos meses, varias personas han acudido a la Asociación porque no pueden cambiar de banco. Al acudir a una entidad donde tienen abiertas cuentas y comunicar que quieren cerrarlas, le dicen que sólo puede efectuarse la operación en la sucursal en la que esta persona abrió sus cuentas o productos. Esta argumentación, sin ninguna lógica ni base legal, hace que muchos consumidores desistan de cambiar de banco.
- Cobran internet después de que se cambie a otra compañía. Las empresas de telefonía e internet suelen buscar nuevos clientes vía telefónica. Cuando un cliente acepta pasarse a su compañía, ésta asegura que se encarga del cambio de empresa sin que él tenga que preocuparse por nada. Sin embargo, muchas personas han descubierto que meses o incluso años después la compañía de la que creían haberse dado de baja le ha seguido cobrando las cuotas del servicio de internet, dado que la portabilidad se puede realizar sólo del servicio telefónico.
- Inclusión de seguros no solicitados. Muchas empresas de tras*porte o agencias de viaje incluyen en la adquisición del billete o la contratación del viaje un seguro añadido que el consumidor no había solicitado en ningún momento, lo que puede suponer un encarecimiento importante del precio a pagar. En ocasiones, este seguro cubre eventualidades que ya están cubiertas por el seguro de responsabilidad civil de la empresa o que la propia ley ya las ampara, como las cancelaciones por causa mayor. En internet, es frecuente que el consumidor tenga que desactivar la casilla de contratar la póliza, porque aparece activada por defecto.
- Dos servicios de mantenimiento de la caldera. Entre los problemas domésticos más habituales está el del mantenimiento de la caldera. Es habitual que al contratar el suministro de gas con una nueva compañía ésta incluya en el contrato el mantenimiento de la caldera. Sin embargo, este servicio suele tener una duración anual por lo que el consumidor, que no ha dado de baja el anterior, pagará durante un tiempo dos servicios de mantenimiento, hasta que comunique la baja y se cumpla el vencimiento anual de uno de ellos
{TITLE}
La Asociación de Consumidores de Navarra Irache ha editado una guía para advertir a los ciudadanos sobre algunas prácticas abusivas que algunas empresas llevan a cabo y que se están detectando con más asiduidad en esta época de crisis, tal y como demuestran los numerosos casos que se han recibido en las oficinas de la Asociación:
- No pagan los seguros de desempleo. Muchos consumidores, en caso de quedarse en paro, cuentan con una póliza que les cubre el pago durante un cierto tiempo la hipoteca, la tarifa de la luz o las cuotas de un préstamo, con importes que pueden llegar a los novecientos euros. Sin embargo, quizá por la crisis y el aumento del desempleo, hay muchos seguros que están exigiendo multitud de documentación, en ocasiones innecesaria, y poniendo mil trabas antes de abonar la cobertura que le corresponde al cliente.
- Comisión por traspasos entre cuentas del mismo banco. Dentro de las subidas e imposición de nuevas comisiones por parte de los bancos, algunas entidades están llegando hasta el extremo de cargar al cliente un pago por traspasar dinero entre cuentas del propio banco. En este sentido, algunos bancos, al entregar el justificante de la operación, hacen firmar al cliente que está expresamente de acuerdo y acepta la comisión cobrada, de forma que se dificulta cualquier reclamación posterior.
- Tretas para retener al cliente en la compañía telefónica. Cuando un consumidor solicita la portabilidad para pasarse a otra compañía de teléfono, y antes de que ésta se efectúe, recibe numerosas llamadas -se han llegado a recibir veinte en un día- de la compañía que quiere abandonar. Por si esto fuera poca presión, recibe mensajes confusos que le dicen que tiene que llamar a la compañía para realizar el cambio cuando no es así o le llegan ofertas de ‘smartphones’ gratuitos que luego, realmente, hay que pagar a plazos.
- Penalización en la luz. Algunas compañías eléctricas están incluyendo en sus contratos cláusulas de permanencia por los que el consumidor tiene que pagar cantidades de hasta sesenta euros si quiere cambiar de empresa antes de cumplir el año contractual. Irache considera que esta penalización es abusiva ya que se trata de un contrato de tracto sucesivo, donde no se puede limitar el derecho del consumidor a poner fin al contrato y, menos aún si no hay un apoyo económico claro más allá de las ofertas que se comercializan.
- Subida del seguro sin avisar con antelación. Muchas personas han acudido a Irache cuando ven que la cuota del seguro les ha subido más de lo esperado, en ocasiones con incrementos de más de cien euros en el seguro del coche o más de cincuenta en el del hogar, por poner dos ejemplos. La compañía aseguradora sólo ha advertido de esta subida unos días antes de que se cumpliese la prórroga o ni siquiera lo ha hecho, sin cumplir con los dos meses de antelación estipulados y dejando sin margen de maniobra al consumidor.
- No dan el alta en la TUR. Algunas compañías de electricidad están poniendo dificultades para que las personas contraten la Tarifa de Último Recurso. No es ya sólo que por teléfono no les hagan la gestión, sino que incluso cuando el consumidor acude físicamente a una oficina de la empresa y comunica que quiere darse de alta en la esta tarifa pública, los dependientes no saben hacerlo o directamente les dicen que no se puede realizar el alta.
- No te dejan irte del banco. En los últimos meses, varias personas han acudido a la Asociación porque no pueden cambiar de banco. Al acudir a una entidad donde tienen abiertas cuentas y comunicar que quieren cerrarlas, le dicen que sólo puede efectuarse la operación en la sucursal en la que esta persona abrió sus cuentas o productos. Esta argumentación, sin ninguna lógica ni base legal, hace que muchos consumidores desistan de cambiar de banco.
- Cobran internet después de que se cambie a otra compañía. Las empresas de telefonía e internet suelen buscar nuevos clientes vía telefónica. Cuando un cliente acepta pasarse a su compañía, ésta asegura que se encarga del cambio de empresa sin que él tenga que preocuparse por nada. Sin embargo, muchas personas han descubierto que meses o incluso años después la compañía de la que creían haberse dado de baja le ha seguido cobrando las cuotas del servicio de internet, dado que la portabilidad se puede realizar sólo del servicio telefónico.
- Inclusión de seguros no solicitados. Muchas empresas de tras*porte o agencias de viaje incluyen en la adquisición del billete o la contratación del viaje un seguro añadido que el consumidor no había solicitado en ningún momento, lo que puede suponer un encarecimiento importante del precio a pagar. En ocasiones, este seguro cubre eventualidades que ya están cubiertas por el seguro de responsabilidad civil de la empresa o que la propia ley ya las ampara, como las cancelaciones por causa mayor. En internet, es frecuente que el consumidor tenga que desactivar la casilla de contratar la póliza, porque aparece activada por defecto.
- Dos servicios de mantenimiento de la caldera. Entre los problemas domésticos más habituales está el del mantenimiento de la caldera. Es habitual que al contratar el suministro de gas con una nueva compañía ésta incluya en el contrato el mantenimiento de la caldera. Sin embargo, este servicio suele tener una duración anual por lo que el consumidor, que no ha dado de baja el anterior, pagará durante un tiempo dos servicios de mantenimiento, hasta que comunique la baja y se cumpla el vencimiento anual de uno de ellos
{TITLE}