El Pionero
Alcalde y presidente de Fútbol Paco premium
Era casi la una de la madrugada del sábado cuando varios vecinos de una calle de Madrid observaron una actitud extraña entre lo que parecía una pareja que caminaba por la calle. En un cierto punto, él la llegó a empujar contra un portal de la calle de Moncada, del distrito madrileño de Villaverde, en el sur de la capital. Empezó a besarla, tocarla y a bajarle los pantalones. Ese fue el momento en el que los viandantes lo separaron de la mujer y llamaron a la policía. En apenas unos minutos el presunto agresor estaba detenido y la víctima había sido trasladada al hospital para que se le tomaran muestras.
El detenido, de 27 años y nacionalidad hondureña, aseguró que habían estado tomando unos tragos en un bar cercano desde hacía varias horas y que la relación surgió de forma natural y consensuada. Eso no fue lo que les pareció a los testigos, que aseguraron que la mujer parecía semiinconsciente y sin la capacidad de decisión en ese momento. Cuando los separaron, varios de ellos se quedaron atendiendo a la chica y otro vigilando al presunto agresor, que permaneció en las inmediaciones hasta que llegó la Policía Municipal. En esos momentos, ella logró decir que el hombre la metió en un soportal y le tocó la parte de los senos y que intentó besarla e incluso mostró sus pantalones desabrochados. Señaló a los policías que no tuvo capacidad de defenderse en ningún momento. Su relato se entrecortaba por los sollozos.
Los agentes recabaron los testimonios de todos los presentes, incluidos el detenido y la mujer, y llegaron a acudir al bar en el que él les indicó que habían estado para conseguir más información, en el mismo barrio de San Cristóbal. El camarero del establecimiento les confirmó que habían estado en el local bebiendo cervezas y que se habían marchado juntos poco antes. El hombre aseguró que su intención simplemente era acompañarla a casa después de haber tomado algo juntos, pero la versión de los testigos fue determinante y quedó detenido por un delito de agresión sensual.
La mujer, cuya edad concreta no ha facilitado el cuerpo policial, pero que es mayor de 18 años, fue atendida en el lugar por los servicios de emergencias y posteriormente trasladada al Hospital 12 de Octubre, donde se le aplicó el protocolo específico para este tipo de casos y, además, se le tomaron muestras por un posible caso de sumisión química. La víctima refirió a los agentes que había bebido alcohol, pero no tanto para el grado de semiinconsciencia en el que se hallaba. En los centros hospitalarios existen unos procedimientos específicos para los casos en los que se sospecha que ha existido una agresión sensual y que esta ha podido estar acompañada del uso de sustancias químicas para doblegar la voluntad.
El detenido, de 27 años y nacionalidad hondureña, aseguró que habían estado tomando unos tragos en un bar cercano desde hacía varias horas y que la relación surgió de forma natural y consensuada. Eso no fue lo que les pareció a los testigos, que aseguraron que la mujer parecía semiinconsciente y sin la capacidad de decisión en ese momento. Cuando los separaron, varios de ellos se quedaron atendiendo a la chica y otro vigilando al presunto agresor, que permaneció en las inmediaciones hasta que llegó la Policía Municipal. En esos momentos, ella logró decir que el hombre la metió en un soportal y le tocó la parte de los senos y que intentó besarla e incluso mostró sus pantalones desabrochados. Señaló a los policías que no tuvo capacidad de defenderse en ningún momento. Su relato se entrecortaba por los sollozos.
Los agentes recabaron los testimonios de todos los presentes, incluidos el detenido y la mujer, y llegaron a acudir al bar en el que él les indicó que habían estado para conseguir más información, en el mismo barrio de San Cristóbal. El camarero del establecimiento les confirmó que habían estado en el local bebiendo cervezas y que se habían marchado juntos poco antes. El hombre aseguró que su intención simplemente era acompañarla a casa después de haber tomado algo juntos, pero la versión de los testigos fue determinante y quedó detenido por un delito de agresión sensual.
La mujer, cuya edad concreta no ha facilitado el cuerpo policial, pero que es mayor de 18 años, fue atendida en el lugar por los servicios de emergencias y posteriormente trasladada al Hospital 12 de Octubre, donde se le aplicó el protocolo específico para este tipo de casos y, además, se le tomaron muestras por un posible caso de sumisión química. La víctima refirió a los agentes que había bebido alcohol, pero no tanto para el grado de semiinconsciencia en el que se hallaba. En los centros hospitalarios existen unos procedimientos específicos para los casos en los que se sospecha que ha existido una agresión sensual y que esta ha podido estar acompañada del uso de sustancias químicas para doblegar la voluntad.
https://elpais.com/espana/madrid/20...-semiinconsciente-en-un-portal-de-madrid.html