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Madmaxista
Oclocracia, plutocracia y partitocracia española. eldiariomontanes.es
Es un artículo del 2007, pero me han resultado interesante algunos conceptos, en especial el tercer y cuarto párrafo, los que detallo a continuación.
¿Plutocracia? La inadecuada financiación de los políticos en sus campañas y formaciones, sus escándalos inmobiliarios y urbanísticos -en especial del PP y del PSOE- su obrar como una casta dirigente más centrada en perpetuar su situación y privilegios que en servir al bien común de la patria, que los programas electorales sean papel mojado según las circunstancias, o la mediocridad intelectual y relativismo ético de los políticos conduce a la ciudadanía a la abstención o la rebelión, inicio del fin de una democracia. ¿Partitocracia? La dictadura de los partidos políticos reprimiendo las corrientes de opinión internas de los mejores, las listas cerradas, la no reforma de la ley electoral disminuyendo el peso y la influencia estatal de los partidos nacionalistas, las dificultades para el nacimiento de nuevos partidos o el elevado número de afiliados favorecen la hegemonía sucesiva del PP y del PSOE (por mayoría absoluta o con pactos contra natura con los nacionalistas) repartiéndose alternativamente el gobierno de España como un cortijo al servicio de los intereses de partido y no a los de la patria. ¿Oclocracia? La ignorancia social, el opinionismo de la masa, los medios de comunicación como correa de tras*misión de la nesciencia y la vulgaridad, la nefasta política educativa de los sucesivos gobiernos del PP y del PSOE y sus concesiones a las autonomías de la gestión de la enseñanza, la degeneración cultural y estética en el arte, los usos sociales y la moda, y la destrucción del concepto latino "virtus" (amor a la familia, amor a la religión y amor a la patria, representado por Virgilio en el héroe Eneas de la épica "Eneida") abonan la tras*formación de la democracia española en una demagogia donde manda la plebe y los políticos son incapaces en su mediocridad de ser líderes de nada que no sea su propio beneficio económico y personal.
Como falle la economía es de desear que la pertenencia a la Unión europea, además del progreso técnico e institucional, mitigue la anarquía que se va a generar, puesto que en España sólo queda el bienestar financiero como nexo de los ciudadanos. Tocqueville afirmó en 'La Democracia en América' que «un estado democrático de la sociedad ( ) puede ofrecer singulares facilidades para establecer el despotismo» y, como se hunda la economía, en España la falta de ideales, unidad, cultura y ética provocará el metamorfoseo de nuestra democracia en una oclocracia polibiana si no despótica.
Es un artículo del 2007, pero me han resultado interesante algunos conceptos, en especial el tercer y cuarto párrafo, los que detallo a continuación.
¿Plutocracia? La inadecuada financiación de los políticos en sus campañas y formaciones, sus escándalos inmobiliarios y urbanísticos -en especial del PP y del PSOE- su obrar como una casta dirigente más centrada en perpetuar su situación y privilegios que en servir al bien común de la patria, que los programas electorales sean papel mojado según las circunstancias, o la mediocridad intelectual y relativismo ético de los políticos conduce a la ciudadanía a la abstención o la rebelión, inicio del fin de una democracia. ¿Partitocracia? La dictadura de los partidos políticos reprimiendo las corrientes de opinión internas de los mejores, las listas cerradas, la no reforma de la ley electoral disminuyendo el peso y la influencia estatal de los partidos nacionalistas, las dificultades para el nacimiento de nuevos partidos o el elevado número de afiliados favorecen la hegemonía sucesiva del PP y del PSOE (por mayoría absoluta o con pactos contra natura con los nacionalistas) repartiéndose alternativamente el gobierno de España como un cortijo al servicio de los intereses de partido y no a los de la patria. ¿Oclocracia? La ignorancia social, el opinionismo de la masa, los medios de comunicación como correa de tras*misión de la nesciencia y la vulgaridad, la nefasta política educativa de los sucesivos gobiernos del PP y del PSOE y sus concesiones a las autonomías de la gestión de la enseñanza, la degeneración cultural y estética en el arte, los usos sociales y la moda, y la destrucción del concepto latino "virtus" (amor a la familia, amor a la religión y amor a la patria, representado por Virgilio en el héroe Eneas de la épica "Eneida") abonan la tras*formación de la democracia española en una demagogia donde manda la plebe y los políticos son incapaces en su mediocridad de ser líderes de nada que no sea su propio beneficio económico y personal.
Como falle la economía es de desear que la pertenencia a la Unión europea, además del progreso técnico e institucional, mitigue la anarquía que se va a generar, puesto que en España sólo queda el bienestar financiero como nexo de los ciudadanos. Tocqueville afirmó en 'La Democracia en América' que «un estado democrático de la sociedad ( ) puede ofrecer singulares facilidades para establecer el despotismo» y, como se hunda la economía, en España la falta de ideales, unidad, cultura y ética provocará el metamorfoseo de nuestra democracia en una oclocracia polibiana si no despótica.