El ganador de “GH7” arremete contra Jorge Javier Vázquez: “Tapaste una violación, pedazo de cabrón”
Carlota Prado mantenía una relación sentimental con Jose María López cuando ambos concursaban en el reality del principal canal del grupo Mediaset. "Gran Hermano" lleva años repitiéndose en la programación de Telecinco, sin embargo, en el año 2017 y durante la edición "GH Revolution", ocurrió algo que tanto la opinión pública como profesionales del mundo televisivo, critican con firmeza.
Una novedad en el formato, para hacerlo más "interesante", permitió la entrada de alcohol a la casa de Guadalix. Sin ser excusa pero potenciando inevitablemente determinadas actitudes de los concursantes, la fiesta acabó dejando a Prado inconsciente. Su pareja entonces, quiso mantener y mantuvo supuestas relaciones sensuales ante la negativa de ella y lo que es peor, ante unas cámaras cuyos responsables se convirtieron en cómplices inequívocos de una actitud bochornosa y denigrante.
Las reacciones no tardaron en llegar y a día de hoy, siguen colmando titulares. Una supuesta violación, que deja de ser "supuesta" tras la conclusión de una jueza: " Hay desplazamientos por parte de Jose María que impulsaban a Carlota hacia arriba y abajo, sin que 'motu proprio' esta reaccionara ante tal estímulo; el cual pudiera consistir, de acuerdo con la posición de José María y su respiración más agitada, en penetraciones". Una declaración que debería haberse planteado previamente si las cosas se hubieran tratado a su debido tiempo y de la forma adecuada. Prado ya no volvió a ser la misma y el grupo de Mediaset, en concreto Telecinco y el equipo de "Gran Hermano", en particular, no estuvieron a la altura de lo que hoy, definitivamente, es el acto más bochornoso y vergonzoso emitido en un programa de televisión. Pero no queda ahí, no se trata de una "conducta intolerable", tal y como quisieron comunicar desde las redes del concurso. Se trata de un suceso que, desgraciadamente, se encuentra a la orden del día y que, por supuesto, suele pasarse por alto. La concursante rompió su silencio dos años después del suceso (El Confidencial) haciendo hincapié en el atronador silencio y las consecuencias inexistentes a día de hoy. Bueno sí, hay consecuencias y todas negativas, pero para ella.
Ni el programa ni la cadena han tomado medidas contundentes y esto ha sido el "blanco" incesante de denuncias públicas. La última, de Pepe Herrero, ganador de "GH7", el cual a través de un vídeo en su Instagram ha criticado la situación sin tapujos y sin filtros. Lo ha hecho a través de una conversación "trasatlántica" con Coto Matamoros, en el que ambos denuncian a la organización y a los colaboradores del reality, sobre todo, a Jorge Javier, el presentador de éste: "Jorge Javier, danos mañana otra clase de jovenlandesalidad. Por favor, asústate de lo que ha hecho Adara con su marido, échate las manos a la cabeza. Que tapaste una violación, pedazo de cabrón. Ahora si quieres nos das una clase de jovenlandesalidad. Doce meses, doce causas. Y por dinero te lo comiste entero. No se puede, empezando por ti, que eres el número uno, y terminando por todos los vendidos que estaban sentados en aquel entonces. No tenéis vergüenza, sois unas cucarachas", afirma con contundencia Herrero.
Sin dar más nombres que el del presentador pero haciendo alusión a todos los presentes, el ganador aumentaba de tono a medida que avanzaba la conversación: "Hay más de feminismo en mí, en un gramo de mí, que en todo vuestro puñetero cuerpo. Tanto que decís que si las mujeres y habéis callado con esto. No tenéis vergüenza, no tenéis dignidad. Sois meretrices de callejón", prosigue. A lo que Matamoros responde: "Es alucinante cómo una hipocresía... las dimensiones son estratosféricas, y pueden seguir teniendo el eco y la audiencia que tienen".
Tratando de cómplices a todos los implicados y como "vergonzosas" las consecuencias, ambos han comentado los detalles escabrosos de este suceso, sentenciando duramente al Grupo encargado de mantener este concurso de telerrealidad habiendo sido cómplices de un ocultamiento inaceptable.
