Renegato
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Nueva Caledonia vota "No" a independizarse de Francia
Es el segundo referéndum que el archipiélago celebra para separarse o no de su antigua metrópoli, a 20.000 kilómetros de distancia
Colegio electoral en Noumea, capital de Nueva Caledonia, durante el referéndum.
Los votantes del archipiélago del Pacífico Sur de Nueva Caledonia rechazaron este domingo la separación de Francia después de casi 170 años de dominio colonial en un referéndum. Con los votos de 249 de los 304 colegios electorales escrutados, los resultados parciales mostraron que el "No" iba a la cabeza con un 54,8% de apoyo y ampliando su ventaja a medida que los resultados llegaban desde la capital, Noumea, tradicionalmente un bastión de la lealtad pro-París.
Si se confirma el "No", sería el segundo intento fallido de los partidarios de la independencia de obtener la plena soberanía en los dos últimos años. Un sorprendente voto por el "Sí" privaría a París de un punto de apoyo en una región en la que China está ampliando su influencia y haría mella en el orgullo de un país cuyo antiguo imperio abarcó en su día el África subsahariana, el Asia suroriental, el Caribe y el Océano Pacífico. Desde hace mucho tiempo existen profundas tensiones entre los canacos indígenas proindependentistas y los descendientes de los colonos que siguen siendo leales a París.
Más de 180.000 residentes de larga data de Nueva Caledonia estaban inscritos para votar "Sí" o "No" en la cuestión: "¿Quiere que Nueva Caledonia obtenga su plena soberanía y se independice?". El referéndum del domingo fue el segundo de los tres permitidos en virtud del Acuerdo de Numea de 1998, un acuerdo consagrado en la Constitución de Francia y que estableció un camino de 20 años hacia la descolonización.
La participación fue alta -los resultados parciales mostraron que el 86% de los votantes elegibles habían votado- después de un voto de independencia más fuerte de lo esperado en el referéndum de 2018. Nueva Caledonia, un archipiélago situado a unos 1.200 kilómetros al este de Australia y a 20.000 kilómetros de París, goza de un alto grado de autonomía, pero depende en gran medida de Francia para cuestiones como la defensa y la educación.
Su economía se apoya en subvenciones francesas anuales de unos 1.300 millones de euros (1.500 millones de dólares) y en depósitos de níquel que se estima representan el 25% del total mundial, así como en el turismo.
Sin embargo, el territorio se ha aislado en gran medida del mundo exterior para protegerse del cobi19. Sólo se han registrado 27 casos de el bichito-19. Si gana el "No", se puede celebrar un tercer referéndum en dos años si un tercio de la asamblea local vota a favor.
Es el segundo referéndum que el archipiélago celebra para separarse o no de su antigua metrópoli, a 20.000 kilómetros de distancia
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- REUTERS | NOUMEA
Los votantes del archipiélago del Pacífico Sur de Nueva Caledonia rechazaron este domingo la separación de Francia después de casi 170 años de dominio colonial en un referéndum. Con los votos de 249 de los 304 colegios electorales escrutados, los resultados parciales mostraron que el "No" iba a la cabeza con un 54,8% de apoyo y ampliando su ventaja a medida que los resultados llegaban desde la capital, Noumea, tradicionalmente un bastión de la lealtad pro-París.
Si se confirma el "No", sería el segundo intento fallido de los partidarios de la independencia de obtener la plena soberanía en los dos últimos años. Un sorprendente voto por el "Sí" privaría a París de un punto de apoyo en una región en la que China está ampliando su influencia y haría mella en el orgullo de un país cuyo antiguo imperio abarcó en su día el África subsahariana, el Asia suroriental, el Caribe y el Océano Pacífico. Desde hace mucho tiempo existen profundas tensiones entre los canacos indígenas proindependentistas y los descendientes de los colonos que siguen siendo leales a París.
Más de 180.000 residentes de larga data de Nueva Caledonia estaban inscritos para votar "Sí" o "No" en la cuestión: "¿Quiere que Nueva Caledonia obtenga su plena soberanía y se independice?". El referéndum del domingo fue el segundo de los tres permitidos en virtud del Acuerdo de Numea de 1998, un acuerdo consagrado en la Constitución de Francia y que estableció un camino de 20 años hacia la descolonización.
La participación fue alta -los resultados parciales mostraron que el 86% de los votantes elegibles habían votado- después de un voto de independencia más fuerte de lo esperado en el referéndum de 2018. Nueva Caledonia, un archipiélago situado a unos 1.200 kilómetros al este de Australia y a 20.000 kilómetros de París, goza de un alto grado de autonomía, pero depende en gran medida de Francia para cuestiones como la defensa y la educación.
Su economía se apoya en subvenciones francesas anuales de unos 1.300 millones de euros (1.500 millones de dólares) y en depósitos de níquel que se estima representan el 25% del total mundial, así como en el turismo.
Sin embargo, el territorio se ha aislado en gran medida del mundo exterior para protegerse del cobi19. Sólo se han registrado 27 casos de el bichito-19. Si gana el "No", se puede celebrar un tercer referéndum en dos años si un tercio de la asamblea local vota a favor.