Fudivarri
EL ESTADO ES TU PEOR ENEMIGO.
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Saludos y Tempestades. 67 días $iN sol.
Asalto de madrugada
Lunes noche las grietas del cosmos se hicieron presentes desde las tierras de los habitantes sin sol, los cielos hablaron, los colores en plena noche nos situaron en el firme plano terrestre. Entregados a la inmensidad de lo inteligible en una noche de las grandes. Espirales, danza, verdes destellos de rosa pÚrpura y dorado, estrellas fugaces en la previa espera y un cosmos despampanante mostrándose imperioso y armonizador.
Me alimento de fuego y luces estelares. En el onírico del que me encuentra en lo virtual ya dancé sin previo permiso, no lo preciso como tampoco las entidades que con el mío confluyen, me asaltan en la antesala del clímax de melatonina que me hará caer en sueños, me auspician y me sacuden.
No hablo en nombre del señor ni del gran yo, los que me incitan y me cobijan son entes paralelos. Hablo en público por no callar los silencios que los necios no pueden entender, y no me refiero a ustedes compañer@s de guardia en el frente.
Ofrendamos la pausa del guerrero, escribo celebrando la dulce recaída lirica en el altavoz de ácratas, sabedores de pertenecer a la autenticidad de la especie. Son ustedes para mí el reflejo del templo del Ser y del pertenecer a uno mismo a través de nos. Nos a través de cada uno, y si pudiera ser de tod@s. ¡Ay, la estupidez del ser! ¡Ay, el desarrollo de la neurología aplicada al mecanismo social! ¡Ay, todo lo que no sabemos! ¡Ay, todo lo que no imaginamos!
De vuelta en la furgoneta, en las tierras donde genera riqueza el reflejo del plasma solar mediante auroras y, después de haber gozado en 4 paradas distintas de la mejor de las noches desde que estoy de cowboy del cosmos, la progenitora de la familia holandesa de cuatro elementos entabló conversación sobre el coronacontexto con el doctor italiano, bastante más joven que yo, viajando con su compañera, quién sabe si esposa, pareja de Roma, sana, humildemente educada y terrenal. Desafortunadamente abducidos hasta la médula, turistas en dictadura coronial global. Éramos siete en la furgoneta. Noche radiante, cambié la ruta antes de salir al ver las previsiones del cosmos en una app, tengo mis chivatos virtuales. Al ver un espectáculo en el cielo en la parada que improvise, me los gané. El cielo siempre hace el resto. Simplemente estuve en el lugar preciso en el momento adecuado. De vuelta ya de madrugada, la señora habló de que en Holanda hay lockdown general estricto, y al final de su información avaló tal decisión: It is for not exceeding capacity of the hospitals. If we need it, then it is ok. El doctor de Italia se atrevió a contestar con cifras de hospitales, según el (usease el relato oficial): el 90% en Italia de ingresados son no medicados.
En esos instantes uno se acuerda de cada uno de ustedes, y de la consigna de la batalla con los abducidos. Y se me cruza la recomendación profesional del sector de que un guía no habla de política ni religión para no herir sensibilidades. En mi silencio de segundos antes de intervenir, me acuerdo de ese tour en que guíe a una progenitora e hija de Usa pro-Trump junto con una progenitora e hija de Inglaterra anti-Brexit. Familias que se sabían adversarias geopoliticamente, me atreví, éramos cinco y fue un éxito, recibí propina e incluso se acabaron apreciando entre ellas. Ya decidido, intervengo en la charla de la furgoneta. Atpc, estamos en guerra y este es mi campo de batalla, y cobrando por sembrar dudas al relato oficial, esparcir semillas de cuestionamiento a un orden venerado, y por horas…asumo tal responsabilidad! Desenvaino la punzante razón, había dos adolescentes en la furgoneta, imaginaros cuanto responsabilidad la mía! Posibles inyectados desertores en el futuro próximo. (¿Se dará tal paradigma o pulsaran el mando a distancia antes?) Su guía, el héroe de la floresta ártica que los trajo entre cimas y ventiscas a gozar del objetivo de su viaje de fuga de una civilización sin fuga posible, el guía que parece domina el léxico, el contenido y el ritmo del siempre fácil discurso de turismo, mostrándose como un negacionista cuaternario? Todos inyectados en la furgoneta menos servidor, conduciendo sin mascara, off course, irrumpo para mostrarles sus vergüenzas. A la señora le digo que, then, what we would need is for sure more hospitals. But, if there is something we need it is love, creativity, courage, spirituality, ideas, patience…We need all of these things for sure. (aunque muy fácil de entender, sino existiera tras*later online no lo escribiría en inglés)
Me ruborizó y sentí vergüenza ajena minutos antes al saberme en una conversación donde se producía constantemente apología a la estupidez del género humano. Hablaban del refuerzo, del booster, como el que se sabe que está a la última, siguiendo la corriente de la terminología de nueva irrupción en contrapartida con las medidas represivas surgidas, vistas por ellos casi como lógicas y virtuosas. Supuestos enterados en la onda de lo que acontece, con pretendida seguridad repitiendo las mentiras del discurso oficial que me ponía los pelos de angustia, desolación humanitaria, no hay rescate posible. Yo, que tan lejos vivo mis silencios de los abducidos, ahora por cuestión laboral, por el momento y hasta que dure, me los encuentro de cara y sin mascara, y veo, companys tal como ustedes escriben a veces aquí, que estamos muy dolidos con el nivel que hay allí fuera. Aun así, decidí hablar.
Al doctor de vejigas y cirujano urinario con joystick y robots médicos, o como se especifique tal maestría docta, le reporto que las cifras es muy sencillo usarlas de una manera o de otra en una batalla de información, que no se considera medicado hasta 14 días después de la inyección, que en Israel todo el mundo lleva el 3er chute, que los que llevaban 2 eran considerados no medicados, y que, por cierto, el gobierno israelí había parado el plan para la 4ª inyección masiva.
Les comento que la máscara a nivel neurológico afecta al ser humano desde el día en que nace, que un recién nacido que, por primera vez, es acogido en el seno de una progenitora con máscara recibe el primer puñal en su psique por la falta de sonrisa y joya expresiva, le faltará tal seguridad que fácilmente será un adulto miedoso. Los bebitos que por la calle se encuentran adultos que les saludan con máscara no paran de recibir puñales en la psique. ¡Esto se sabe por la neurociencia! Y que, desafortunadamente, la repetividad de tal acto afecta inconscientemente, y a largo plazo, a los infantes.
(Si tuviera hijos y una adulto se parara a saludar a mi bebito, o niña, le pediría sin duda que a los infantes que yo crio se les dirija sin mascara, y si no accede, con risas y alegría, ATPC. Los infantes están en su derecho de aprender de todo, de manera didáctica, lúdica y divertida, incluso a rechazar al portador del secuestro de la sonrisa).
¡La propia falsa sonrisa es beneficiosa incluso para uno mismo! Los músculos de la cara están conectados con el cerebro y no sé mediante qué mecanismo, pero afecta positivamente, generando endorfinas, porque el cerebro recibe la señal de la sonrisa propia asociada al bienestar y felicidad. Y la sonrisa de los otros es vital para nos también. Y para un bebe más todavía como acto de comunicación y aceptación de los sujetos de la comunidad al nuevo miembro. El doctor asiente, me responde que atento me sigue, al igual que con el discurso anterior de la melatonina y la glándula pineal en el sol de medianoche, o de la vitamina D y la afectación del calcio en la noche polar, y efectivamente sigo un buen rumbo basado y no me alejo de la lógica doctoral. Nuestro cerebro es el del Pleistoceno, si les quitan la sonrisa del adulto a los niños, les quitan media relación con el entorno. Sólo les queda la mirada, que puede acompañar y ayuda a determinar, pero también fácilmente a imponer desde la frialdad. En fin, que les digo a los viajeros en busca de auroras que fueron por un corto tras*curso presos de mis palabras, que el uso de la máscara y las extremas medidas están generando un rápido cambio social mediante afectación primaria de los individuos, que tal vez mejor sería comer brócoli a diario y beber zumo natural de limón con agua caliente cada mañana en ayunas con tal de reforzar el sistema inmune, y vivir en paz. Y añado, para acabar, que me ha sorprendido hoy día leer en prensa que el oomm.icrom ha sido el bichito con record de propagación de toda la historia (que me gusta la fruta, los guionistas del relato oficial! Todos inyectados y el bichito resulta que es más rápido que Supermán. Manda bemoles!), no lo puedo entender cómo puede haber sido más rápido que el del 2020 si en esos tiempos el mundo funcionaba a full a nivel de comunicaciones globales, hoy en día habiendo de 5 a 10 veces menos vuelos que antaño. Si el mundo ya no está globalizado como en 2019, como ha sido éste más rápido? En fin, como ven trabajando moderado en las formas y el contenido del discurso, y aunque algo se me olvida de lo que sí les dije, evité el comentarles: ¡Vamos a morir todos, hijos del mal!
La noche en sí y el exitoso objetivo cumplido de inconmensurables recuerdos y fotografías del fenómeno naural, me pareció maravilloso escenario para sembrar cuestiones e intentar generar grietas por donde puedan surgir dudas, al menos, al relato oficial por parte de los abducidos. Nada que perder, un guía no habla de política en una situación neutral, pero en guerra, en plena dictadura y yo al volante hago lo que me sale de las narices. Siempre con amor, y ajustando mi lenguaje a la presencia del interlocutor su escucha siempre estará a mi favor, se dice que no hay buen orador que no sepa escribir.
2nda parte del asalto de madrugada
Amanda Vollmer: STOP SAYING THAT YOU HAD ‘IT’, STOP SAYING YOU KNOW SOMEONE WHO HAD ‘IT’ – ‘IT’ NEVER EXISTED!
Gracias a leer Acratas, junto con consultas paralelas, entendí la lógica de que no se está propagando un bichito ni nos estamos contagiando, sino que están enfermando cuerpos porque se están envenenando poblaciones, sea con radiofrecuencias y con tóxicos inyectados, o depositados mediante pcr, máscaras tóxicas, alcohol de manos devastador a largo plazo, etc… (Chaimtraills o como se escriba, agro tóxicos, flúor, nutrición industrial, bebidas con gas, carnes envenenadas y un sinfín de tóxinas que nos conforman como civilización de masas)
Pero, no podemos obviar que los cuerpos enferman.
Tenía pendiente comunicar-les tal noticia para contrarrestar el relato oficial.
Personalmente perdí el olfato por una semana aproximadamente donde lo fui recuperando progresivamente, y el 80% del gusto (que precisamente lo conforma 80% el olfato), junto con síntomas de fatiga, moderadas fiebres y mucho catarro. Fue la primera quincena de noviembre. Un mes y medio antes había estado también con prolongadas fiebres y agarré una infección de pulmón (por bajas defensas, veneno de pcr, trabajar con lana de roca de la obra, y cambios térmicos árticos). Agarré la del mil. 2 semanas. En ambas ocasiones, la de final de setiembre y la de principios de noviembre, rechacé la prueba pcr.
(Sigue aquí)
Asalto de madrugada
Lunes noche las grietas del cosmos se hicieron presentes desde las tierras de los habitantes sin sol, los cielos hablaron, los colores en plena noche nos situaron en el firme plano terrestre. Entregados a la inmensidad de lo inteligible en una noche de las grandes. Espirales, danza, verdes destellos de rosa pÚrpura y dorado, estrellas fugaces en la previa espera y un cosmos despampanante mostrándose imperioso y armonizador.
Me alimento de fuego y luces estelares. En el onírico del que me encuentra en lo virtual ya dancé sin previo permiso, no lo preciso como tampoco las entidades que con el mío confluyen, me asaltan en la antesala del clímax de melatonina que me hará caer en sueños, me auspician y me sacuden.
No hablo en nombre del señor ni del gran yo, los que me incitan y me cobijan son entes paralelos. Hablo en público por no callar los silencios que los necios no pueden entender, y no me refiero a ustedes compañer@s de guardia en el frente.
Ofrendamos la pausa del guerrero, escribo celebrando la dulce recaída lirica en el altavoz de ácratas, sabedores de pertenecer a la autenticidad de la especie. Son ustedes para mí el reflejo del templo del Ser y del pertenecer a uno mismo a través de nos. Nos a través de cada uno, y si pudiera ser de tod@s. ¡Ay, la estupidez del ser! ¡Ay, el desarrollo de la neurología aplicada al mecanismo social! ¡Ay, todo lo que no sabemos! ¡Ay, todo lo que no imaginamos!
De vuelta en la furgoneta, en las tierras donde genera riqueza el reflejo del plasma solar mediante auroras y, después de haber gozado en 4 paradas distintas de la mejor de las noches desde que estoy de cowboy del cosmos, la progenitora de la familia holandesa de cuatro elementos entabló conversación sobre el coronacontexto con el doctor italiano, bastante más joven que yo, viajando con su compañera, quién sabe si esposa, pareja de Roma, sana, humildemente educada y terrenal. Desafortunadamente abducidos hasta la médula, turistas en dictadura coronial global. Éramos siete en la furgoneta. Noche radiante, cambié la ruta antes de salir al ver las previsiones del cosmos en una app, tengo mis chivatos virtuales. Al ver un espectáculo en el cielo en la parada que improvise, me los gané. El cielo siempre hace el resto. Simplemente estuve en el lugar preciso en el momento adecuado. De vuelta ya de madrugada, la señora habló de que en Holanda hay lockdown general estricto, y al final de su información avaló tal decisión: It is for not exceeding capacity of the hospitals. If we need it, then it is ok. El doctor de Italia se atrevió a contestar con cifras de hospitales, según el (usease el relato oficial): el 90% en Italia de ingresados son no medicados.
En esos instantes uno se acuerda de cada uno de ustedes, y de la consigna de la batalla con los abducidos. Y se me cruza la recomendación profesional del sector de que un guía no habla de política ni religión para no herir sensibilidades. En mi silencio de segundos antes de intervenir, me acuerdo de ese tour en que guíe a una progenitora e hija de Usa pro-Trump junto con una progenitora e hija de Inglaterra anti-Brexit. Familias que se sabían adversarias geopoliticamente, me atreví, éramos cinco y fue un éxito, recibí propina e incluso se acabaron apreciando entre ellas. Ya decidido, intervengo en la charla de la furgoneta. Atpc, estamos en guerra y este es mi campo de batalla, y cobrando por sembrar dudas al relato oficial, esparcir semillas de cuestionamiento a un orden venerado, y por horas…asumo tal responsabilidad! Desenvaino la punzante razón, había dos adolescentes en la furgoneta, imaginaros cuanto responsabilidad la mía! Posibles inyectados desertores en el futuro próximo. (¿Se dará tal paradigma o pulsaran el mando a distancia antes?) Su guía, el héroe de la floresta ártica que los trajo entre cimas y ventiscas a gozar del objetivo de su viaje de fuga de una civilización sin fuga posible, el guía que parece domina el léxico, el contenido y el ritmo del siempre fácil discurso de turismo, mostrándose como un negacionista cuaternario? Todos inyectados en la furgoneta menos servidor, conduciendo sin mascara, off course, irrumpo para mostrarles sus vergüenzas. A la señora le digo que, then, what we would need is for sure more hospitals. But, if there is something we need it is love, creativity, courage, spirituality, ideas, patience…We need all of these things for sure. (aunque muy fácil de entender, sino existiera tras*later online no lo escribiría en inglés)
Me ruborizó y sentí vergüenza ajena minutos antes al saberme en una conversación donde se producía constantemente apología a la estupidez del género humano. Hablaban del refuerzo, del booster, como el que se sabe que está a la última, siguiendo la corriente de la terminología de nueva irrupción en contrapartida con las medidas represivas surgidas, vistas por ellos casi como lógicas y virtuosas. Supuestos enterados en la onda de lo que acontece, con pretendida seguridad repitiendo las mentiras del discurso oficial que me ponía los pelos de angustia, desolación humanitaria, no hay rescate posible. Yo, que tan lejos vivo mis silencios de los abducidos, ahora por cuestión laboral, por el momento y hasta que dure, me los encuentro de cara y sin mascara, y veo, companys tal como ustedes escriben a veces aquí, que estamos muy dolidos con el nivel que hay allí fuera. Aun así, decidí hablar.
Al doctor de vejigas y cirujano urinario con joystick y robots médicos, o como se especifique tal maestría docta, le reporto que las cifras es muy sencillo usarlas de una manera o de otra en una batalla de información, que no se considera medicado hasta 14 días después de la inyección, que en Israel todo el mundo lleva el 3er chute, que los que llevaban 2 eran considerados no medicados, y que, por cierto, el gobierno israelí había parado el plan para la 4ª inyección masiva.
Les comento que la máscara a nivel neurológico afecta al ser humano desde el día en que nace, que un recién nacido que, por primera vez, es acogido en el seno de una progenitora con máscara recibe el primer puñal en su psique por la falta de sonrisa y joya expresiva, le faltará tal seguridad que fácilmente será un adulto miedoso. Los bebitos que por la calle se encuentran adultos que les saludan con máscara no paran de recibir puñales en la psique. ¡Esto se sabe por la neurociencia! Y que, desafortunadamente, la repetividad de tal acto afecta inconscientemente, y a largo plazo, a los infantes.
(Si tuviera hijos y una adulto se parara a saludar a mi bebito, o niña, le pediría sin duda que a los infantes que yo crio se les dirija sin mascara, y si no accede, con risas y alegría, ATPC. Los infantes están en su derecho de aprender de todo, de manera didáctica, lúdica y divertida, incluso a rechazar al portador del secuestro de la sonrisa).
¡La propia falsa sonrisa es beneficiosa incluso para uno mismo! Los músculos de la cara están conectados con el cerebro y no sé mediante qué mecanismo, pero afecta positivamente, generando endorfinas, porque el cerebro recibe la señal de la sonrisa propia asociada al bienestar y felicidad. Y la sonrisa de los otros es vital para nos también. Y para un bebe más todavía como acto de comunicación y aceptación de los sujetos de la comunidad al nuevo miembro. El doctor asiente, me responde que atento me sigue, al igual que con el discurso anterior de la melatonina y la glándula pineal en el sol de medianoche, o de la vitamina D y la afectación del calcio en la noche polar, y efectivamente sigo un buen rumbo basado y no me alejo de la lógica doctoral. Nuestro cerebro es el del Pleistoceno, si les quitan la sonrisa del adulto a los niños, les quitan media relación con el entorno. Sólo les queda la mirada, que puede acompañar y ayuda a determinar, pero también fácilmente a imponer desde la frialdad. En fin, que les digo a los viajeros en busca de auroras que fueron por un corto tras*curso presos de mis palabras, que el uso de la máscara y las extremas medidas están generando un rápido cambio social mediante afectación primaria de los individuos, que tal vez mejor sería comer brócoli a diario y beber zumo natural de limón con agua caliente cada mañana en ayunas con tal de reforzar el sistema inmune, y vivir en paz. Y añado, para acabar, que me ha sorprendido hoy día leer en prensa que el oomm.icrom ha sido el bichito con record de propagación de toda la historia (que me gusta la fruta, los guionistas del relato oficial! Todos inyectados y el bichito resulta que es más rápido que Supermán. Manda bemoles!), no lo puedo entender cómo puede haber sido más rápido que el del 2020 si en esos tiempos el mundo funcionaba a full a nivel de comunicaciones globales, hoy en día habiendo de 5 a 10 veces menos vuelos que antaño. Si el mundo ya no está globalizado como en 2019, como ha sido éste más rápido? En fin, como ven trabajando moderado en las formas y el contenido del discurso, y aunque algo se me olvida de lo que sí les dije, evité el comentarles: ¡Vamos a morir todos, hijos del mal!
La noche en sí y el exitoso objetivo cumplido de inconmensurables recuerdos y fotografías del fenómeno naural, me pareció maravilloso escenario para sembrar cuestiones e intentar generar grietas por donde puedan surgir dudas, al menos, al relato oficial por parte de los abducidos. Nada que perder, un guía no habla de política en una situación neutral, pero en guerra, en plena dictadura y yo al volante hago lo que me sale de las narices. Siempre con amor, y ajustando mi lenguaje a la presencia del interlocutor su escucha siempre estará a mi favor, se dice que no hay buen orador que no sepa escribir.
2nda parte del asalto de madrugada
Amanda Vollmer: STOP SAYING THAT YOU HAD ‘IT’, STOP SAYING YOU KNOW SOMEONE WHO HAD ‘IT’ – ‘IT’ NEVER EXISTED!
Gracias a leer Acratas, junto con consultas paralelas, entendí la lógica de que no se está propagando un bichito ni nos estamos contagiando, sino que están enfermando cuerpos porque se están envenenando poblaciones, sea con radiofrecuencias y con tóxicos inyectados, o depositados mediante pcr, máscaras tóxicas, alcohol de manos devastador a largo plazo, etc… (Chaimtraills o como se escriba, agro tóxicos, flúor, nutrición industrial, bebidas con gas, carnes envenenadas y un sinfín de tóxinas que nos conforman como civilización de masas)
Pero, no podemos obviar que los cuerpos enferman.
Tenía pendiente comunicar-les tal noticia para contrarrestar el relato oficial.
Personalmente perdí el olfato por una semana aproximadamente donde lo fui recuperando progresivamente, y el 80% del gusto (que precisamente lo conforma 80% el olfato), junto con síntomas de fatiga, moderadas fiebres y mucho catarro. Fue la primera quincena de noviembre. Un mes y medio antes había estado también con prolongadas fiebres y agarré una infección de pulmón (por bajas defensas, veneno de pcr, trabajar con lana de roca de la obra, y cambios térmicos árticos). Agarré la del mil. 2 semanas. En ambas ocasiones, la de final de setiembre y la de principios de noviembre, rechacé la prueba pcr.
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