El Pionero
Alcalde y presidente de Fútbol Paco premium
Vuelve el ansia por viajar, en España o en extranjero. Los aviones, los trenes y las carreteras se llenan de gente dispuesta a pasar unas vacaciones con los precios disparados. Así que el coche nuevo tendrá que seguir esperando, porque la economía no da para más.
Y es que, tradicionalmente, julio era el escogido por muchos españoles para cambiar de coche, que podían ya rodar (y presumir) aprovechando las vacaciones. En 2019, por ejemplo, se matricularon casi 117.000 unidades en julio. En este 2022, fueron apenas 73.378 turismos y 4x4. Supone un nuevo retroceso, ahora del 12,5% y es el dato más bajo en este mes desde la crisis de 2012, cuando se contabilizaron 65.325 unidades. Con este resultado, el acumulado del año se coloca en 481.135 vehículos, un 11% menos.
MÁS USADOS DE 15 AÑOS QUE NUEVOS
Detrás de este resultado está, según las grandes asociaciones del sector -Anfac, Ganvam y Faconauto- esa tormenta perfecta en la que confluyen la falta de oferta por la crisis de los semiconductores y la mala situación económica, agravada por la inflación (también en los propios automóviles- y la subida de la energía y los carburantes. Factores que están retrasando la decisión de compra en unos casos y anulándola en otras, con clientes que se pasan al mercado de ocasión. "Desde enero, se han vendido casi las mismas unidades de turismos de más de 15 años que de vehículos nuevos" apuntan desde Anfac.
De hecho, el retroceso ha venido provocado por las ventas a particulares, cuyo canal pierde un 12,1% (caída que es de solo el 1% en el acumulado, con 208.462 coches). Las empresas compraron un 2,7% más (+2,3% en el año, 202.625 unidades) y los alquiladores siguen suspirando por esos coches que no les llegan, pues son el canal menos rentable para la distribución. Sus operaciones se desplomaron un 39% en el mes y pierden un 47% en el año (70.048 vehículos).
MATRICULACIONES POR TECNOLOGÍAS
Lejos de lo que quieren en Europa y el Gobierno que compremos ya (100% eléctricos, sobre todo), el cliente sigue optando por los modelos de combustión de gasolina, con un 43,4% de las ventas acumuladas en el año. Otro 17,5% llevaban motor diésel y el 39,1% restante eran modelos alternativos. Es decir, a pilas, híbridos de todo tipo y de gas. En julio, los porcentajes fueron parecidos y dejaron las emisiones medias de los vehículos vendidos en 122,4 gramos de CO2 por kilómetro recorrido, según el ciclo de homologación WLTP.
TOYOTA Y DACIA, LÍDERES DEL MES
Toyota (6.446 coches) y el Dacia Sandero (2.368 matriculaciones) encabezaron las cifras de ventas por marcas y modelos en julio. Si tomamos los datos desde enero,la firma japonesa amplia su ventaja sobre Volkswagen, la segunda clasificada (43.634 vs 36.738 unidades). Y otro tanto hace el Hyundai Tucson, que ya saca más de 900 unidades al Seat Arona.
Para el total del año, la última previsión que hizo el sector hablaba de matricular entre 800.000 y 830.000 turismos y 4x4. Es decir, sólo por encima de los registros de 2012 y 2013, pero por debajo de las matriculaciones de 2020, cuando el mercado estuvo cerrado a cal y canto durante varias semanas.
www.elmundo.es
Y es que, tradicionalmente, julio era el escogido por muchos españoles para cambiar de coche, que podían ya rodar (y presumir) aprovechando las vacaciones. En 2019, por ejemplo, se matricularon casi 117.000 unidades en julio. En este 2022, fueron apenas 73.378 turismos y 4x4. Supone un nuevo retroceso, ahora del 12,5% y es el dato más bajo en este mes desde la crisis de 2012, cuando se contabilizaron 65.325 unidades. Con este resultado, el acumulado del año se coloca en 481.135 vehículos, un 11% menos.
MÁS USADOS DE 15 AÑOS QUE NUEVOS
Detrás de este resultado está, según las grandes asociaciones del sector -Anfac, Ganvam y Faconauto- esa tormenta perfecta en la que confluyen la falta de oferta por la crisis de los semiconductores y la mala situación económica, agravada por la inflación (también en los propios automóviles- y la subida de la energía y los carburantes. Factores que están retrasando la decisión de compra en unos casos y anulándola en otras, con clientes que se pasan al mercado de ocasión. "Desde enero, se han vendido casi las mismas unidades de turismos de más de 15 años que de vehículos nuevos" apuntan desde Anfac.
De hecho, el retroceso ha venido provocado por las ventas a particulares, cuyo canal pierde un 12,1% (caída que es de solo el 1% en el acumulado, con 208.462 coches). Las empresas compraron un 2,7% más (+2,3% en el año, 202.625 unidades) y los alquiladores siguen suspirando por esos coches que no les llegan, pues son el canal menos rentable para la distribución. Sus operaciones se desplomaron un 39% en el mes y pierden un 47% en el año (70.048 vehículos).
MATRICULACIONES POR TECNOLOGÍAS
Lejos de lo que quieren en Europa y el Gobierno que compremos ya (100% eléctricos, sobre todo), el cliente sigue optando por los modelos de combustión de gasolina, con un 43,4% de las ventas acumuladas en el año. Otro 17,5% llevaban motor diésel y el 39,1% restante eran modelos alternativos. Es decir, a pilas, híbridos de todo tipo y de gas. En julio, los porcentajes fueron parecidos y dejaron las emisiones medias de los vehículos vendidos en 122,4 gramos de CO2 por kilómetro recorrido, según el ciclo de homologación WLTP.
TOYOTA Y DACIA, LÍDERES DEL MES
Toyota (6.446 coches) y el Dacia Sandero (2.368 matriculaciones) encabezaron las cifras de ventas por marcas y modelos en julio. Si tomamos los datos desde enero,la firma japonesa amplia su ventaja sobre Volkswagen, la segunda clasificada (43.634 vs 36.738 unidades). Y otro tanto hace el Hyundai Tucson, que ya saca más de 900 unidades al Seat Arona.
Para el total del año, la última previsión que hizo el sector hablaba de matricular entre 800.000 y 830.000 turismos y 4x4. Es decir, sólo por encima de los registros de 2012 y 2013, pero por debajo de las matriculaciones de 2020, cuando el mercado estuvo cerrado a cal y canto durante varias semanas.
Ni las ganas de presumir de coche en vacaciones hacen que las ventas remonten
Vuelve el ansia por viajar, en España o en extranjero. Los aviones, los trenes y las carreteras se llenan de gente dispuesta a pasar unas vacaciones con los precios disparados....
