Vlad_Empalador
Será en Octubre
Mascotas, los nuevos niños de la casa. Hay más hogares con mascotas que con menores de 14 años
Es una realidad constatada: en España hay más hogares con mascotas que con menores de 14 años. De este frío dato se desprenden muchas consecuencias sociales.
PREMIUM
Según el estudio elaborado por Anfaac, en 2001 se contaron más de 29 millones de animales de compañía, de los que 9.131.098 eran perros, 5.858.69 gatos y el resto peces, reptiles, pájaros y pequeños mamíferos como conejos o hurones. Son números que, combinados con dos crisis económicas en los últimos 15 años, gestan el escenario actual: en nuestro país hay 6.265.153 niños menores de 14 años según el Instituto Nacional de Estadística, que reporta que el año registró 338.532 nacimientos, una cifra que representa un 0,06% respecto a 2020 y marca un nuevo mínimo histórico en décadas. Los datos reflejan las consecuencias de un profundo cambio social, con una tras*formación del estilo de vida, una caída de los nacimientos y un incremento de personas que viven solas.
Debido a motivos tanto económicos como culturales, las relaciones emocionales entre especies están cambiando la configuración de la sociedad occidental. Los perros ya no son exclusivamente esos animales que se tienen para proteger un chalet ni los gatos los encargados de mantener las fincas libres de roedores. En las últimas décadas, los canes han pasado de tener funciones determinadas a convertirse en uno más de la familia o, directamente, en compañeros de vida, con los correspondientes gastos que implica. Las facturas de las necesidades básicas de los perros generan unos costes de mantenimiento que, dependiendo de la raza y tal como estima la web Red Canina, pueden superar los 1.500 euros al año, una cantidad que está todavía muy lejos de lo que cuesta mantener a un hijo que requiere el desembolso de 7.706 euros durante el primer año de vida, según la Organización de Consumidores y Usuarios.
Las estadísticas ponen de manifiesto que se ha incrementado el número de hogares con mascota y durante la convivencia en la casa se crean vínculos estrechos con un animal, pero también también exige una responsabilidad desde el punto de vista de la organización del tiempo. En lo relativo a los cuidados que demandan los compañeros de cuatro patas, el veterinario Jesús Godín, con clínica en Aravaca, explica que un perro necesita, "al menos, salir a la calle tres veces al día y paseos largos. Requiere también tiempo para educarlo y para llevarlo al veterinario dos veces al año como mínimo para sus revisiones y cumplir con el calendario de banderillación". Una atención necesaria que exige cierta solvencia económica. "Habitualmente los dueños hacen lo que sea para ayudar a sus animales y no reparan en gastos. Sin contar complicaciones de salud, los perros tienen unos gastos anuales de 150 euros en banderillas, 100 euros en desparasitación y unos 70 euros mensuales en alimentación", desglosa.
EDAD MEDIA
En sus cuatro décadas de experiencia cuidando de animales de compañía Jesús Godín ha observado que la edad media de vida de las mascotas se ha alargado. "Ha pasado de 10 a 15 años gracias a los cuidados y a la alimentación. Antiguamente a los animales se les alimentaba con comida preparada en casa que consistía en hervir en olla arroz cocido, zanahoria y caparazones de pollo, que generaban problemas como gastroenteritis. Hoy esas enfermedades gracias a los piensos compuestos de calidad se han reducido mucho", cuenta. Su visión corrobora una realidad: el año que estalló la esa época en el 2020 de la que yo le hablo muchos sectores fueron golpeados por la crisis, pero no fue así en el caso de la sanidad y nutrición animal, cuyas cifras de facturación en España, como apunta Veterindustria, alcanzaron los 1.700 millones de euros, los números más elevados de su historia. "La dieta como punto de partida para la salud de las mascotas es la misión de nuevas marcas que apuestan por una alimentación natural, sin ultraprocesados, con superingredientes funcionales, cocinada al vacío para evitar la proliferación de las bacterias y adaptada a las necesidades de la mascota", detallan Albane Sabatier y Marçal Icart, directores generales de la marca barcelonesa de comida natural para animales de compañía Food for Joe.
La de las mascotas es la historia de un negocio constante, que promete más jugadores y crecientes ganancias para las firmas, sin importar su tamaño. Para unas mascotas cada vez más humanizadas ha crecido la gama de servicios, que incluyen desde la medicina alternativa a alojamientos de lujo o servicios de adiestramiento y guardería. Además de la categoría de accesorios como camas, casetas, ropa, higiene o complementos para viaje, en el capítulo de gastos también tiene un fuerte protagonismo la higiene del animal. Eso se traduce en visitas a la peluquería para cortarle el pelo, las uñas, limpiarlo... "La demanda de servicios de peluquería va en alza. Antes los perros vivían en los terrenos o en las parcelas de la casa, pero ahora conviven con sus dueños, pasan más tiempo en las casas y son parte de la familia, por eso se busca que estén más aseados. Comparten vivienda y duermen en las alfombras, suben a los sofás y en algunos casos también en la cama con sus dueños, y por eso quieren tenerlos aseados y limpios", explica Mónica Gómez al frente de la escuela de peluquería canina homónima. Contar con sus servicios lista de espera que puede llegar a dos semanas y un precio que oscila entre 20 y 60 euros, "según el tamaño del perro y el servicio que se demande".
NUEVA LEY
"Cada vez más los propietarios miran a sus mascotas como un miembro más de la familia", remarcan los directores ejecutivos de Food for Joe. Y lo dicen no en sentido metafórico, sino estricto. Solo hay que fijarse en la nueva ley que reconoce a perros, gatos y otros animales de compañía como seres sintientes y no como objetos. El Consejo de Ministros dio luz verde este mes de febrero al anteproyecto de ley de derechos y bienestar animal, un texto que, entre otras medidas, contempla que las mascotas deben estar "integradas en el núcleo familiar, en buen estado de limpieza e higiene". La normativa es rotunda también al prohibir que los animales se mantengan encadenados. No se permite eso, ni que puedan pasear por su cuenta, sin la vigilancia de sus dueños. "Los animales de compañía no podrán permanecer atados ni deambular por espacios públicos sin la supervisión presencial por parte de la persona responsable de su cuidado", detalla la normativa, que cita otras "obligaciones generales", como facilitarles atención veterinaria, comunicar la pérdida en menos de 48 horas o, en el caso de los perros, contratar un seguro de responsabilidad civil. Y solo los criadores profesionales y autorizados podrán dedicarse a comercializar con animales, "una medida que me parece un acierto, sobre todo teniendo en cuenta que hay miles de perros en las protectoras", sentencia Mónica Gómez.
Es una realidad constatada: en España hay más hogares con mascotas que con menores de 14 años. De este frío dato se desprenden muchas consecuencias sociales.
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Según el estudio elaborado por Anfaac, en 2001 se contaron más de 29 millones de animales de compañía, de los que 9.131.098 eran perros, 5.858.69 gatos y el resto peces, reptiles, pájaros y pequeños mamíferos como conejos o hurones. Son números que, combinados con dos crisis económicas en los últimos 15 años, gestan el escenario actual: en nuestro país hay 6.265.153 niños menores de 14 años según el Instituto Nacional de Estadística, que reporta que el año registró 338.532 nacimientos, una cifra que representa un 0,06% respecto a 2020 y marca un nuevo mínimo histórico en décadas. Los datos reflejan las consecuencias de un profundo cambio social, con una tras*formación del estilo de vida, una caída de los nacimientos y un incremento de personas que viven solas.
Debido a motivos tanto económicos como culturales, las relaciones emocionales entre especies están cambiando la configuración de la sociedad occidental. Los perros ya no son exclusivamente esos animales que se tienen para proteger un chalet ni los gatos los encargados de mantener las fincas libres de roedores. En las últimas décadas, los canes han pasado de tener funciones determinadas a convertirse en uno más de la familia o, directamente, en compañeros de vida, con los correspondientes gastos que implica. Las facturas de las necesidades básicas de los perros generan unos costes de mantenimiento que, dependiendo de la raza y tal como estima la web Red Canina, pueden superar los 1.500 euros al año, una cantidad que está todavía muy lejos de lo que cuesta mantener a un hijo que requiere el desembolso de 7.706 euros durante el primer año de vida, según la Organización de Consumidores y Usuarios.
Las estadísticas ponen de manifiesto que se ha incrementado el número de hogares con mascota y durante la convivencia en la casa se crean vínculos estrechos con un animal, pero también también exige una responsabilidad desde el punto de vista de la organización del tiempo. En lo relativo a los cuidados que demandan los compañeros de cuatro patas, el veterinario Jesús Godín, con clínica en Aravaca, explica que un perro necesita, "al menos, salir a la calle tres veces al día y paseos largos. Requiere también tiempo para educarlo y para llevarlo al veterinario dos veces al año como mínimo para sus revisiones y cumplir con el calendario de banderillación". Una atención necesaria que exige cierta solvencia económica. "Habitualmente los dueños hacen lo que sea para ayudar a sus animales y no reparan en gastos. Sin contar complicaciones de salud, los perros tienen unos gastos anuales de 150 euros en banderillas, 100 euros en desparasitación y unos 70 euros mensuales en alimentación", desglosa.
EDAD MEDIA
En sus cuatro décadas de experiencia cuidando de animales de compañía Jesús Godín ha observado que la edad media de vida de las mascotas se ha alargado. "Ha pasado de 10 a 15 años gracias a los cuidados y a la alimentación. Antiguamente a los animales se les alimentaba con comida preparada en casa que consistía en hervir en olla arroz cocido, zanahoria y caparazones de pollo, que generaban problemas como gastroenteritis. Hoy esas enfermedades gracias a los piensos compuestos de calidad se han reducido mucho", cuenta. Su visión corrobora una realidad: el año que estalló la esa época en el 2020 de la que yo le hablo muchos sectores fueron golpeados por la crisis, pero no fue así en el caso de la sanidad y nutrición animal, cuyas cifras de facturación en España, como apunta Veterindustria, alcanzaron los 1.700 millones de euros, los números más elevados de su historia. "La dieta como punto de partida para la salud de las mascotas es la misión de nuevas marcas que apuestan por una alimentación natural, sin ultraprocesados, con superingredientes funcionales, cocinada al vacío para evitar la proliferación de las bacterias y adaptada a las necesidades de la mascota", detallan Albane Sabatier y Marçal Icart, directores generales de la marca barcelonesa de comida natural para animales de compañía Food for Joe.
La de las mascotas es la historia de un negocio constante, que promete más jugadores y crecientes ganancias para las firmas, sin importar su tamaño. Para unas mascotas cada vez más humanizadas ha crecido la gama de servicios, que incluyen desde la medicina alternativa a alojamientos de lujo o servicios de adiestramiento y guardería. Además de la categoría de accesorios como camas, casetas, ropa, higiene o complementos para viaje, en el capítulo de gastos también tiene un fuerte protagonismo la higiene del animal. Eso se traduce en visitas a la peluquería para cortarle el pelo, las uñas, limpiarlo... "La demanda de servicios de peluquería va en alza. Antes los perros vivían en los terrenos o en las parcelas de la casa, pero ahora conviven con sus dueños, pasan más tiempo en las casas y son parte de la familia, por eso se busca que estén más aseados. Comparten vivienda y duermen en las alfombras, suben a los sofás y en algunos casos también en la cama con sus dueños, y por eso quieren tenerlos aseados y limpios", explica Mónica Gómez al frente de la escuela de peluquería canina homónima. Contar con sus servicios lista de espera que puede llegar a dos semanas y un precio que oscila entre 20 y 60 euros, "según el tamaño del perro y el servicio que se demande".
NUEVA LEY
"Cada vez más los propietarios miran a sus mascotas como un miembro más de la familia", remarcan los directores ejecutivos de Food for Joe. Y lo dicen no en sentido metafórico, sino estricto. Solo hay que fijarse en la nueva ley que reconoce a perros, gatos y otros animales de compañía como seres sintientes y no como objetos. El Consejo de Ministros dio luz verde este mes de febrero al anteproyecto de ley de derechos y bienestar animal, un texto que, entre otras medidas, contempla que las mascotas deben estar "integradas en el núcleo familiar, en buen estado de limpieza e higiene". La normativa es rotunda también al prohibir que los animales se mantengan encadenados. No se permite eso, ni que puedan pasear por su cuenta, sin la vigilancia de sus dueños. "Los animales de compañía no podrán permanecer atados ni deambular por espacios públicos sin la supervisión presencial por parte de la persona responsable de su cuidado", detalla la normativa, que cita otras "obligaciones generales", como facilitarles atención veterinaria, comunicar la pérdida en menos de 48 horas o, en el caso de los perros, contratar un seguro de responsabilidad civil. Y solo los criadores profesionales y autorizados podrán dedicarse a comercializar con animales, "una medida que me parece un acierto, sobre todo teniendo en cuenta que hay miles de perros en las protectoras", sentencia Mónica Gómez.