Cuenta cuento
Madmaxista
- Desde
- 31 Jul 2015
- Mensajes
- 6.141
- Reputación
- 11.833
Pacientes tras*género revelan su arrepentimiento por las operaciones de cambio de sesso del NHS
Nueva ley tras*
La nueva ley tras* ahondará en el abuso de menores y eliminará más derechos a los padres y a expertos.
INICIOCIVILIZACIÓNNOTICIAS
Redacción | 14 octubre, 2022
Por Rory Tingle (*)
Dos pacientes han revelado hoy su arrepentimiento por haberse sometido a operaciones de cambio de sesso y han afirmado que fueron «apresurados» para someterse a estos procedimientos que cambian la vida.
En un impactante testimonio que suscita nuevos temores de que jóvenes vulnerables se vean empujados a someterse a una cirugía invasiva e inalterable por parte de celosos activistas tras*género, hablaron de las terribles repercusiones en su salud mental y física.
Tras describir con todo lujo de detalles la naturaleza de la intervención quirúrgica necesaria para eliminar su anatomía masculina, Ritchie, de 35 años, dijo: «Esto no es reversible, el experimento ha terminado para mí, realmente no hay vuelta atrás».
Por su parte, Amber -que se sometió a una mastectomía y tomó testosterona para la tras*ición de mujer a hombre- describió el dolor y las dificultades de salud que experimentó desde que se le «precipitó» a la cirugía, y dijo que deseaba haber recibido terapia en su lugar.
Su valiente testimonio en No Turning Back, una nueva película de Branded Film Studios que puede verse íntegramente en la plataforma de medios de comunicación , es un raro ejemplo de «detransición» que sale a la luz para revelar sus arrepentimientos.
Cuando Mermaids y Stonewall hablan siempre de las personas que no tienen la oportunidad de hacer la tras*ición, no hablan de las personas que se arrepienten del proceso de tras*ición», dijo la cineasta Charlotte Fantelli a MailOnline, refiriéndose a dos organizaciones benéficas que se han enfrentado al escrutinio por su postura sobre las cuestiones tras*género.
La «destransicionista» revela su «arrepentimiento» tras la operación de reasignación
Ritchie, funcionario del norte de Inglaterra, se destransicionó tras pasar casi una década como mujer tras*.
Después de sentirse «diferente» de joven, descubrió la disforia de género mientras navegaba por los foros de Internet a los 20 años. Cuando explicó sus sentimientos a otros usuarios del foro, le dijeron que era «100% tras* y que debía actuar en consecuencia».
En marzo de 2014, Ritchie se dirigió a una clínica privada en Escocia donde, tras tres citas en dos días, obtuvo un diagnóstico que le permitiría que le recetaran hormonas sensuales cruzadas en el NHS. A continuación, acudió a una clínica de género del NHS en Brighton.
La primera pregunta que me hicieron cuando vi al psiquiatra fue si quería una operación de reasignación de sesso», recuerda en la película. ‘Le dije: ‘No estoy segura, me gustaría tener un tiempo y he oído que se puede hacer terapia».
Pero sentí que me comunicaron que no eran un servicio de salud mental, que estaban ahí para ayudar a la gente en la tras*ición médica. Querían que me operara más de lo que yo quería operarme, era realmente extraño».
‘Lo rechacé en 2015, lo rechacé en 2016, luego en 2017 el psiquiatra me dijo »estás establecido en tus hormonas, si no quieres la cirugía te daremos de alta».
‘Pero estaba en medio de esa terapia crítica, que era el ancla que necesitaba en el mundo para mantenerme bien. Entonces me dijeron que me darían el alta si no entraba en esta lista’.
Ritchie describió la cirugía a la que se sometió para la tras*ición de hombre a mujer como «extremadamente brutal».
Lo primero que hacen es una orquidectomía para extirpar los testículos», explica. Una vez que han hecho eso, esencialmente afeitan la piel del miembro viril para quitarla, y luego empiezan a quitar el tejido eréctil.
Si te imaginas que pierdes el nudillo de tu dedo, todavía tienes el nudillo, todavía puedes retorcerlo, así que desafortunadamente todavía tienes esa sensación fantasma. Lo que también hacen es volver a enredar la uretra, lo que provoca una complicación muy común llamada constricción uretral.
Es cuando no puedes orinar correctamente. La orina sale lentamente, de forma dolorosa o, en algunos casos, no sale. Algunas personas tienen sondas para el resto de su vida. Algunos tienen complicaciones realmente terribles.
En mi caso, perdí mucha sangre durante la operación porque me perforaron la pelvis. Las infecciones que se producen después se tratan como algo normal. Decían: «Sólo tienes infecciones»».
Ritchie dijo que tuvo problemas mentales después de la operación: «Aunque estés contento, es duro. Pierdes energía, te vuelves extremadamente fatigado y vulnerable en cierto modo porque reconoces que no tienes ese poder en cierto sentido; es una sensación muy extraña.
Todavía estaba en terapia en la clínica de género y dije: «Creo que me he equivocado aquí, creo que he tomado una decisión realmente loca». Y su respuesta fue: «Acabas de tener una cirugía muy importante… esto es una rumiación, es sólo tu TOC».
Así que volvía cada mes y en cada sesión decía lo mismo, »Esto es f*****g mental, nunca debería haber hecho esto»
(*) Este artículo ha sido originalmente publicado en inglés y su autor es corresponsal de Asuntos Internos para Mailonline
Nueva ley tras*
La nueva ley tras* ahondará en el abuso de menores y eliminará más derechos a los padres y a expertos.
INICIOCIVILIZACIÓNNOTICIAS
Redacción | 14 octubre, 2022
Por Rory Tingle (*)
Dos pacientes han revelado hoy su arrepentimiento por haberse sometido a operaciones de cambio de sesso y han afirmado que fueron «apresurados» para someterse a estos procedimientos que cambian la vida.
En un impactante testimonio que suscita nuevos temores de que jóvenes vulnerables se vean empujados a someterse a una cirugía invasiva e inalterable por parte de celosos activistas tras*género, hablaron de las terribles repercusiones en su salud mental y física.
Tras describir con todo lujo de detalles la naturaleza de la intervención quirúrgica necesaria para eliminar su anatomía masculina, Ritchie, de 35 años, dijo: «Esto no es reversible, el experimento ha terminado para mí, realmente no hay vuelta atrás».
Por su parte, Amber -que se sometió a una mastectomía y tomó testosterona para la tras*ición de mujer a hombre- describió el dolor y las dificultades de salud que experimentó desde que se le «precipitó» a la cirugía, y dijo que deseaba haber recibido terapia en su lugar.
Su valiente testimonio en No Turning Back, una nueva película de Branded Film Studios que puede verse íntegramente en la plataforma de medios de comunicación , es un raro ejemplo de «detransición» que sale a la luz para revelar sus arrepentimientos.
Cuando Mermaids y Stonewall hablan siempre de las personas que no tienen la oportunidad de hacer la tras*ición, no hablan de las personas que se arrepienten del proceso de tras*ición», dijo la cineasta Charlotte Fantelli a MailOnline, refiriéndose a dos organizaciones benéficas que se han enfrentado al escrutinio por su postura sobre las cuestiones tras*género.
La «destransicionista» revela su «arrepentimiento» tras la operación de reasignación
Ritchie, funcionario del norte de Inglaterra, se destransicionó tras pasar casi una década como mujer tras*.
Después de sentirse «diferente» de joven, descubrió la disforia de género mientras navegaba por los foros de Internet a los 20 años. Cuando explicó sus sentimientos a otros usuarios del foro, le dijeron que era «100% tras* y que debía actuar en consecuencia».
En marzo de 2014, Ritchie se dirigió a una clínica privada en Escocia donde, tras tres citas en dos días, obtuvo un diagnóstico que le permitiría que le recetaran hormonas sensuales cruzadas en el NHS. A continuación, acudió a una clínica de género del NHS en Brighton.
La primera pregunta que me hicieron cuando vi al psiquiatra fue si quería una operación de reasignación de sesso», recuerda en la película. ‘Le dije: ‘No estoy segura, me gustaría tener un tiempo y he oído que se puede hacer terapia».
Pero sentí que me comunicaron que no eran un servicio de salud mental, que estaban ahí para ayudar a la gente en la tras*ición médica. Querían que me operara más de lo que yo quería operarme, era realmente extraño».
‘Lo rechacé en 2015, lo rechacé en 2016, luego en 2017 el psiquiatra me dijo »estás establecido en tus hormonas, si no quieres la cirugía te daremos de alta».
‘Pero estaba en medio de esa terapia crítica, que era el ancla que necesitaba en el mundo para mantenerme bien. Entonces me dijeron que me darían el alta si no entraba en esta lista’.
Ritchie describió la cirugía a la que se sometió para la tras*ición de hombre a mujer como «extremadamente brutal».
Lo primero que hacen es una orquidectomía para extirpar los testículos», explica. Una vez que han hecho eso, esencialmente afeitan la piel del miembro viril para quitarla, y luego empiezan a quitar el tejido eréctil.
Si te imaginas que pierdes el nudillo de tu dedo, todavía tienes el nudillo, todavía puedes retorcerlo, así que desafortunadamente todavía tienes esa sensación fantasma. Lo que también hacen es volver a enredar la uretra, lo que provoca una complicación muy común llamada constricción uretral.
Es cuando no puedes orinar correctamente. La orina sale lentamente, de forma dolorosa o, en algunos casos, no sale. Algunas personas tienen sondas para el resto de su vida. Algunos tienen complicaciones realmente terribles.
En mi caso, perdí mucha sangre durante la operación porque me perforaron la pelvis. Las infecciones que se producen después se tratan como algo normal. Decían: «Sólo tienes infecciones»».
Ritchie dijo que tuvo problemas mentales después de la operación: «Aunque estés contento, es duro. Pierdes energía, te vuelves extremadamente fatigado y vulnerable en cierto modo porque reconoces que no tienes ese poder en cierto sentido; es una sensación muy extraña.
Todavía estaba en terapia en la clínica de género y dije: «Creo que me he equivocado aquí, creo que he tomado una decisión realmente loca». Y su respuesta fue: «Acabas de tener una cirugía muy importante… esto es una rumiación, es sólo tu TOC».
Así que volvía cada mes y en cada sesión decía lo mismo, »Esto es f*****g mental, nunca debería haber hecho esto»
(*) Este artículo ha sido originalmente publicado en inglés y su autor es corresponsal de Asuntos Internos para Mailonline
https://rebelionenlagranja.com/noti...eraciones-de-cambio-de-sesso-del-nhs-20221014
