Fecal Coproboy
Madmaxista
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Hamijos, no sólo de escribir cosas vive el escatológico. Aquí va lo que opino de Guindos, Tsipras y las madres que los parieron.
Las "lecciones" de Grecia
De los periodistas-opinadores y los políticos profesionales al uso, no se puede esperar más que el doblepensar que diría Orwell: negar la realidad al tiempo que se conoce.
Cualquier análisis ha de buscarse fuera de tan ponzoñosos ámbitos.
También hay quien cree que no hay que buscar 3 pies al gato en forma de tenebrosos complots para manipular y ocultar realidades molestas, puesto que la mayoría de los actores de la escena politicomediática española carecen de un mínimo nivel intelectual para perpetrar las infamias de un Góering, por ejemplo.
Es decir, se cumpliría el apócrifo principio de Hanlon: " “Nunca le atribuyas a la maldad lo que puede ser explicado por la estupidez” (que viene a ser una
versión jocosa de la famosa navaja de Occam).
Personalmente, me inclino más por la segunda hipótesis, dada la abundancia de tontimalvados en nuestra sociedad.
Porque sintiéndolo mucho por los verdaderos creyentes en las Grandes Conspiraciones, buena parte de lo que ocurre hoy en día está relacionado con una mezcla de necedad y malicia.
Voy al grano. Nuestro ministro de Economía tiene un C.V. acojonante, en verdad. Empezando con que es economista y del PP,
es decir, practicante de la religión libegal, que con su gran poder es capaz de convertir a personas inteligentes en
"orates por exceso" de fanatismo. Se sacó la licenciatura en CUNEF, que es uno de esos centros privados cuyos títulos se convalidan como universitarios...hum, hablando en plata, donde los niños bien se compran una carrera sin grandes contratiempos (o mejor dicho, se los compran sus papás).
Va de soi, tales centros tienen un listón de exigencia intelectual acorde con las expectativas y el nivel del alumnado, o sea, bastante bajo.
El amigo Me Guindas ha trabajado en la afamada y célebre firma Lehman Brothers, qué tiempos aquellos de 2008 cuando la crisis subprime ¿eh?
Hoy me he encontrado en las noticias al genio de las finanzas que comparecía en el congreso, a propósito de la parte del rescate (alias "préstamo a fondo perdido") que le tocaba apoquinar al estado español. Entre sofismas de 3ª regionaly trivialidades de la neolengua libegal, me he encontrado con el anatema dirigido a los podemistas, resumiendo algo así como: "Miren lo que ocurre cuando se vota a partidos progres populistas".
Realmente, no tengo ganas de ejercer de paladín de la secta del Coletas, que neciamente se identificaban con sus héroes helénicos del Syriza. Con su pan se coman el patinazo.
A lo que quiero ir es a la insignificancia del comentario, más allá del consumo interno de los conmilitones peperos y libegales (véase la película que se han montado con la seudorecuperación económica [cielo] y el contraejemplo griego [infierno]). Si en lugar de progres hubiesen ganado los neocon griegos de turno, el resultado habría sido el mismo, a lo mejor con menos teatro, pero lo mismo: pasar por el aro de la UE y recibir el préstamo a cambio de más austeridad...a morir, al palo.
De todos modos, dentro del garrulismo ministerial encuentro algo aprovechable, dando por bueno el aforismo "incluso un reloj averiado da la hora exacta 2 veces al día". El reloj averiado por el sectarismo y la corrección política libegal acierta, según creo, en la idea de que Grecia nos da lecciones. Pero no en el sentido que le da el ministro, arrimando el ascua a su sardina electoralista.
Quien escribe se va por caminos más retorcidos y ajenos a los flashes y los telediarios.
A mi entender, las lecciones reales de la tragicomedia griega de este verano han sido estas:
1-No importa cuánto dinero debamos, siempre podremos "enjugar" la deuda pidiendo otro préstamo. Claro que para ello tenemos que ser un Estado, no un particular. Entonces, a los préstamos les llaman rescates...cuando nos hayamos fundido el préstamo pagando deudas anteriores (con algún desvío para scorts de lujo quizás) pedimos otro préstamo, digo rescate, y a seguir funcionado con "normalidad"...Así hasta que los acreedores se cansen y nos embarguen el país entero (se vende patria, razón...). Una práctica que responde a la "racionalidad económica" de la que tanto alardea la tecnocracia y burocracia bruselense.
Claro que la URSS también alardeaba de haber heredado la racionalidad ilustrada. Sus férreos planes quinquenales han quedado para la Historia (de las cabezas cuadriculadas).
2-Resulta enternecedora la unanimidad del parlamiento español a la hora de participar en la bufonada aportando la parte proporcional dentro de la UE. Como si el Estado español pudiese sacar pecho, con la enorme deuda que arrastra. Si no hemos seguido la cuesta abajo griega por ahora, es porque la banca extranjera y su testaferro (Bruselas, la Merkel) no se atreven con un país de tamaño mediano, difícil de "digerir", y cuyo naufragio causaría más problemas que ventajas. A ver, juntitos van el PP con el PSOE, los separatistas catalanes y el parto de los montes, me refiero a UPyD. Sólo queda fuera el "rojerío", más por razones de kitsch electoral que por propner alternativas reales al zancocho. Pensamiento único cuando se trata de dinero.
3-Una vez más, se cumple la idea chunga: "La izquierda es una versión perfeccionada de la derecha". No es una consigna para diletantes (sean neofascistas o anarcoides), qué va. Cada cieerto tiempo, al albañal político europeo la confirma. Analicemos lo sucedido en GRecia: había un gobierno conservador, que aplicaba sin remilgos las recetas libegales de Bruselas (es decir, de la Merkel, es decir de la banca alemana, 'Sig Heil IV Reich'). Ante tal gobierno títere, aparecen los salvadores, el partido Syriza con su retórica socialdemócrata (con barniz troskista quizás). Ganan las elecciones y mientras los griegos se las prometen muy felices, la prensa europea (la voz de su amo empresarial) y los curas libegales montan en histriónica cólera. Llega el verano y las "negociaciones" consisten en que Tsipras y el camarada Perroflaukis piden pasta a cambio de nada o muy poco, y la UE desde su olímpica "racionalidad económica", exige que se cumplan todos los puntos iniciales. La UE (testaferro de la banca alemana y compañía) cree en la democracia, siempre que se entienda lo democrático como "hacer lo que vds quieran siempre que sea lo que digamos nosotros".
Ante la cerrazón totalitaria de Bruselas, nuestros bravos héroes de Syriza, en indignada pose de marqueses ofendidos en su honor, amagan la espantada mediante contactos con pilinguin (que con su habitual astucia pasa totalmente de los pedigüeños), anuncian la continuación de la alegre cultura de la subvención a la griega (ciudadanos...tranquilos, paga el estado) un referéndum exprés para demostrar la voluntad popular (con resultado evidentemente contrario a las condiciones draconianas del acuerdo con la UE).
Tras unas muestras tan efusivas de progresismo (populismo para la prensa libegal española, o sea casi toda), la UE se cansa de la comedia, y corta el grifo de la financiación pública y provada de la Hélade. El bravo Tsipras se prepara para la batalla final que llevará a Grecia a la autarquía al estilo albanés (Enver Hoxha, te invocamos)...Pues no.
¡Con qué mansedumbre se deshincha el dignísimo y socialista Tsipras! Aceptación del plan de la UE, dimisión de Varoufakis, oportuno olvido del resultado del referéndum...Ya viene otro eslabón más de la cadena de la esclavitud financiera, en forma de préstamos para pagar deudas por préstamos anteriores, que cuando se agote necesitará otro préstamo en forma de 4º rescate, y así hasta que se hunda la UE definitivamente (Grecia incluida). Y la contrapartida, hora de bajarse los pantalones en metáfora homófoba sin duda, pero adecuada al caso. Ya viene la penitencia en forma de más austeridad, privatizaciones vergonzantes de patrimonio público y demás medidas exigidas por las garrapatas internacionales sobre el moribundo perro heleno.
Amigos griegos, disfruten de lo votado y luego traicionado por la izquierda en el poder.
Si en las últimas elecciones el pueblo griego hubiese votado un nuevo gobierno libegal-conservador, el resultado habría sido el mismo, nuevo rescate y más medidas draconianas. Por supuesto, las protestas habrían sido monumentales.
Con un gobierno progresista, los griegos se han hecho la ilusión (vana) de que podían salir de rositas en las negociaciones con la UE, pero las ilusiones al final siempre se acaban esfumando.
Y aquí entra la confirmación total del aforismo, Syriza ha traicionado la voluntad popular de sus ingenuos y/o desesperados votantes; no es algo por lo que rasgarse las vestiduras: la socialdemocracia y en general la izquierda europea lleva haciendo lo mismo desde hace décadas...incumplir las promesas de paraísos de leche y miel aceptando la realpolitik libegal en lo económico, completando lo que la derecha libegal no se atreve o no ha sido capaz de hacer y desactivando las protestas duras en tiempo electoral mediante el pastoreo hacia el voto "útil". En España tenemos el continuo ejemplo del PSOE, véase reforma laboral, reconversión industrial, tratado de Maastricht y demás ruedas de molino a tragar. Como premio de consolación, a los decontentos les queda votar a los comunistas de turno, en el caso griego serán los disidentes de Syriza con Perroflaukis, supongo, a la cabeza...aunque luego el partidillo a la izquierda de los social-traidores siempre hace piña electoral con ellos: "hay que para los pies ala derecha".
Se nos dirá que no toda la izquierda es así, se nos señalará a los patéticos restos del naufragio soviético y a los Pepitos Grillos anarquistas.
De los primeros, la ultraizquierda, a la hora de la verdad su relevancia política es cercana a cero, limitándose a quejarse en voz alta de los moderados cuando o es campaña electoral (ojo); de los libertarios, ¿qué decir? Su reloj se quedó parado en el recuerdo onanista de 1936 más o menos, aunque eso sí, aceptan la mayor parte del kitsch progre al tiempo que lo critican (incluso hay libertarios que se han tragado el sapo de la teoría queer, ah ja ja,
lamentable).
En resumen, que seguirá lloviendo mielda en los próximos años sobre Grecia.
Las "lecciones" de Grecia
De los periodistas-opinadores y los políticos profesionales al uso, no se puede esperar más que el doblepensar que diría Orwell: negar la realidad al tiempo que se conoce.
Cualquier análisis ha de buscarse fuera de tan ponzoñosos ámbitos.
También hay quien cree que no hay que buscar 3 pies al gato en forma de tenebrosos complots para manipular y ocultar realidades molestas, puesto que la mayoría de los actores de la escena politicomediática española carecen de un mínimo nivel intelectual para perpetrar las infamias de un Góering, por ejemplo.
Es decir, se cumpliría el apócrifo principio de Hanlon: " “Nunca le atribuyas a la maldad lo que puede ser explicado por la estupidez” (que viene a ser una
versión jocosa de la famosa navaja de Occam).
Personalmente, me inclino más por la segunda hipótesis, dada la abundancia de tontimalvados en nuestra sociedad.
Porque sintiéndolo mucho por los verdaderos creyentes en las Grandes Conspiraciones, buena parte de lo que ocurre hoy en día está relacionado con una mezcla de necedad y malicia.
Voy al grano. Nuestro ministro de Economía tiene un C.V. acojonante, en verdad. Empezando con que es economista y del PP,
es decir, practicante de la religión libegal, que con su gran poder es capaz de convertir a personas inteligentes en
"orates por exceso" de fanatismo. Se sacó la licenciatura en CUNEF, que es uno de esos centros privados cuyos títulos se convalidan como universitarios...hum, hablando en plata, donde los niños bien se compran una carrera sin grandes contratiempos (o mejor dicho, se los compran sus papás).
Va de soi, tales centros tienen un listón de exigencia intelectual acorde con las expectativas y el nivel del alumnado, o sea, bastante bajo.
El amigo Me Guindas ha trabajado en la afamada y célebre firma Lehman Brothers, qué tiempos aquellos de 2008 cuando la crisis subprime ¿eh?
Hoy me he encontrado en las noticias al genio de las finanzas que comparecía en el congreso, a propósito de la parte del rescate (alias "préstamo a fondo perdido") que le tocaba apoquinar al estado español. Entre sofismas de 3ª regionaly trivialidades de la neolengua libegal, me he encontrado con el anatema dirigido a los podemistas, resumiendo algo así como: "Miren lo que ocurre cuando se vota a partidos progres populistas".
Realmente, no tengo ganas de ejercer de paladín de la secta del Coletas, que neciamente se identificaban con sus héroes helénicos del Syriza. Con su pan se coman el patinazo.
A lo que quiero ir es a la insignificancia del comentario, más allá del consumo interno de los conmilitones peperos y libegales (véase la película que se han montado con la seudorecuperación económica [cielo] y el contraejemplo griego [infierno]). Si en lugar de progres hubiesen ganado los neocon griegos de turno, el resultado habría sido el mismo, a lo mejor con menos teatro, pero lo mismo: pasar por el aro de la UE y recibir el préstamo a cambio de más austeridad...a morir, al palo.
De todos modos, dentro del garrulismo ministerial encuentro algo aprovechable, dando por bueno el aforismo "incluso un reloj averiado da la hora exacta 2 veces al día". El reloj averiado por el sectarismo y la corrección política libegal acierta, según creo, en la idea de que Grecia nos da lecciones. Pero no en el sentido que le da el ministro, arrimando el ascua a su sardina electoralista.
Quien escribe se va por caminos más retorcidos y ajenos a los flashes y los telediarios.
A mi entender, las lecciones reales de la tragicomedia griega de este verano han sido estas:
1-No importa cuánto dinero debamos, siempre podremos "enjugar" la deuda pidiendo otro préstamo. Claro que para ello tenemos que ser un Estado, no un particular. Entonces, a los préstamos les llaman rescates...cuando nos hayamos fundido el préstamo pagando deudas anteriores (con algún desvío para scorts de lujo quizás) pedimos otro préstamo, digo rescate, y a seguir funcionado con "normalidad"...Así hasta que los acreedores se cansen y nos embarguen el país entero (se vende patria, razón...). Una práctica que responde a la "racionalidad económica" de la que tanto alardea la tecnocracia y burocracia bruselense.
Claro que la URSS también alardeaba de haber heredado la racionalidad ilustrada. Sus férreos planes quinquenales han quedado para la Historia (de las cabezas cuadriculadas).
2-Resulta enternecedora la unanimidad del parlamiento español a la hora de participar en la bufonada aportando la parte proporcional dentro de la UE. Como si el Estado español pudiese sacar pecho, con la enorme deuda que arrastra. Si no hemos seguido la cuesta abajo griega por ahora, es porque la banca extranjera y su testaferro (Bruselas, la Merkel) no se atreven con un país de tamaño mediano, difícil de "digerir", y cuyo naufragio causaría más problemas que ventajas. A ver, juntitos van el PP con el PSOE, los separatistas catalanes y el parto de los montes, me refiero a UPyD. Sólo queda fuera el "rojerío", más por razones de kitsch electoral que por propner alternativas reales al zancocho. Pensamiento único cuando se trata de dinero.
3-Una vez más, se cumple la idea chunga: "La izquierda es una versión perfeccionada de la derecha". No es una consigna para diletantes (sean neofascistas o anarcoides), qué va. Cada cieerto tiempo, al albañal político europeo la confirma. Analicemos lo sucedido en GRecia: había un gobierno conservador, que aplicaba sin remilgos las recetas libegales de Bruselas (es decir, de la Merkel, es decir de la banca alemana, 'Sig Heil IV Reich'). Ante tal gobierno títere, aparecen los salvadores, el partido Syriza con su retórica socialdemócrata (con barniz troskista quizás). Ganan las elecciones y mientras los griegos se las prometen muy felices, la prensa europea (la voz de su amo empresarial) y los curas libegales montan en histriónica cólera. Llega el verano y las "negociaciones" consisten en que Tsipras y el camarada Perroflaukis piden pasta a cambio de nada o muy poco, y la UE desde su olímpica "racionalidad económica", exige que se cumplan todos los puntos iniciales. La UE (testaferro de la banca alemana y compañía) cree en la democracia, siempre que se entienda lo democrático como "hacer lo que vds quieran siempre que sea lo que digamos nosotros".
Ante la cerrazón totalitaria de Bruselas, nuestros bravos héroes de Syriza, en indignada pose de marqueses ofendidos en su honor, amagan la espantada mediante contactos con pilinguin (que con su habitual astucia pasa totalmente de los pedigüeños), anuncian la continuación de la alegre cultura de la subvención a la griega (ciudadanos...tranquilos, paga el estado) un referéndum exprés para demostrar la voluntad popular (con resultado evidentemente contrario a las condiciones draconianas del acuerdo con la UE).
Tras unas muestras tan efusivas de progresismo (populismo para la prensa libegal española, o sea casi toda), la UE se cansa de la comedia, y corta el grifo de la financiación pública y provada de la Hélade. El bravo Tsipras se prepara para la batalla final que llevará a Grecia a la autarquía al estilo albanés (Enver Hoxha, te invocamos)...Pues no.
¡Con qué mansedumbre se deshincha el dignísimo y socialista Tsipras! Aceptación del plan de la UE, dimisión de Varoufakis, oportuno olvido del resultado del referéndum...Ya viene otro eslabón más de la cadena de la esclavitud financiera, en forma de préstamos para pagar deudas por préstamos anteriores, que cuando se agote necesitará otro préstamo en forma de 4º rescate, y así hasta que se hunda la UE definitivamente (Grecia incluida). Y la contrapartida, hora de bajarse los pantalones en metáfora homófoba sin duda, pero adecuada al caso. Ya viene la penitencia en forma de más austeridad, privatizaciones vergonzantes de patrimonio público y demás medidas exigidas por las garrapatas internacionales sobre el moribundo perro heleno.
Amigos griegos, disfruten de lo votado y luego traicionado por la izquierda en el poder.
Si en las últimas elecciones el pueblo griego hubiese votado un nuevo gobierno libegal-conservador, el resultado habría sido el mismo, nuevo rescate y más medidas draconianas. Por supuesto, las protestas habrían sido monumentales.
Con un gobierno progresista, los griegos se han hecho la ilusión (vana) de que podían salir de rositas en las negociaciones con la UE, pero las ilusiones al final siempre se acaban esfumando.
Y aquí entra la confirmación total del aforismo, Syriza ha traicionado la voluntad popular de sus ingenuos y/o desesperados votantes; no es algo por lo que rasgarse las vestiduras: la socialdemocracia y en general la izquierda europea lleva haciendo lo mismo desde hace décadas...incumplir las promesas de paraísos de leche y miel aceptando la realpolitik libegal en lo económico, completando lo que la derecha libegal no se atreve o no ha sido capaz de hacer y desactivando las protestas duras en tiempo electoral mediante el pastoreo hacia el voto "útil". En España tenemos el continuo ejemplo del PSOE, véase reforma laboral, reconversión industrial, tratado de Maastricht y demás ruedas de molino a tragar. Como premio de consolación, a los decontentos les queda votar a los comunistas de turno, en el caso griego serán los disidentes de Syriza con Perroflaukis, supongo, a la cabeza...aunque luego el partidillo a la izquierda de los social-traidores siempre hace piña electoral con ellos: "hay que para los pies ala derecha".
Se nos dirá que no toda la izquierda es así, se nos señalará a los patéticos restos del naufragio soviético y a los Pepitos Grillos anarquistas.
De los primeros, la ultraizquierda, a la hora de la verdad su relevancia política es cercana a cero, limitándose a quejarse en voz alta de los moderados cuando o es campaña electoral (ojo); de los libertarios, ¿qué decir? Su reloj se quedó parado en el recuerdo onanista de 1936 más o menos, aunque eso sí, aceptan la mayor parte del kitsch progre al tiempo que lo critican (incluso hay libertarios que se han tragado el sapo de la teoría queer, ah ja ja,
lamentable).
En resumen, que seguirá lloviendo mielda en los próximos años sobre Grecia.