Elpaisdelasmaravillas
Madmaxista
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Las televisiones autonómicas gastan demasiado. Pueden permitirse ese lujo porque parten con ventaja. Su dependencia de los gobiernos regionales les permite despreocuparse de los números gente de izquierdas. El Ejecutivo autonómico se hace cargo. De hecho, más de la mitad del presupuesto de 2008 de estas televisiones corre a cargo de las arcas públicas. Los 16 canales autonómicos gastarán 1.800 millones de euros cuando acabe el año, de los que algo más de 1.000 serán soportados por la administración; es decir, por los impuestos de los ciudadanos. El resto provendrá de la publicidad.
En general siempre es el Ejecutivo el que asume las pérdidas. En contados casos, como la valenciana Canal 9, estas televisiones acuden a la deuda —avalada por el Gobierno autonómico— para hacer frente a las pérdidas. La radiotelevisión de la Comunidad Valenciana arrastra una deuda de 1.100 millones de euros. El presidente autonómico, Francisco Camps, prometió implantar un contrato el próximo ejercicio, con objeto de que la administración asuma la deuda y destine una partida anual a los gastos de la televisión.
Es el mismo modelo puesto en marcha ya por la televisión regional catalana. La Consejería de Economía asumió en marzo la deuda de 1.046 millones de euros que arrastraba el ente público y la refinanciación. A partir de este ejercicio, la administración catalana destinará una partida anual, que este año se concreta en 279 millones, a cubrir los gastos de la televisión y amortizar la deuda.
Sea la fórmula que sea, el caso es que siempre paga el Gobierno, o sea, el contribuyente. Las privadas protestan cada año por este modelo porque las cadenas autonómicas compiten con ventaja. Así al menos argumentan desde Uteca, asociación que agrupa a Antena 3, Telecinco, Cuatro, La Sexta, Net TV y Veo TV. Comen de la cada vez más escasa tarta publicitaria pero, al mismo tiempo, compiten sin riesgos en el negocio de la audiencia, se quejan desde Uteca. Las privadas, sin embargo, tienen la publicidad como fuente exclusiva de ingresos.
Audiencia de campeones
Y la lucha por la audiencia —con las autonómicas en la citada posición de privilegio— llega hasta sus límites más extremos con la guerra del fútbol. El consejero delegado de Antena 3, Silvio González, lo explicaba del siguiente modo, el 10 de septiembre, en los cursos de verano de la Universidad Menéndez Pelayo. “Nosotros pagamos 26 millones de euros por la Champions League y perdíamos un millón por partido, pero somos una empresa privada y podemos tomar esa decisión si entendemos que en el conjunto hay una ganancia general”.
Silvio González calificó de “sorprendente” que la televisión pública haya adquirido esos derechos a un precio que “ha estado en torno a los 65 millones de euros”, en referencia a la compra de los derechos por parte de TVE y la Federación de Organismos de Radio y Televisión Autonómicos (Forta), que engloba a todas las cadenas regionales. Sin embargo, las autonómicas hacen caso omiso a estas protestas. No tanto TVE, que al menos ha dibujado una tendencia en el terreno de la publicidad. El ente público se ha comprometido a rebajar su volumen de anuncios. A cambio de dinero, por supuesto: 500 millones de euros por emitir un máximo de 11 minutos de publicidad por hora. Las privadas emiten 12 por hora.
El próximo año, Televisión Española bajará a 10 y en 2010 a nueve minutos por hora emitida. Se trata de una tendencia generalizada en las televisiones públicas europeas, que no están dispuestas a imitar la estrategia de las autonómicas.
http://www.negocios.com/negocios/21-09-2008+teles_no_miran_numeros_rojos,noticia_1img,28,28,32587
En general siempre es el Ejecutivo el que asume las pérdidas. En contados casos, como la valenciana Canal 9, estas televisiones acuden a la deuda —avalada por el Gobierno autonómico— para hacer frente a las pérdidas. La radiotelevisión de la Comunidad Valenciana arrastra una deuda de 1.100 millones de euros. El presidente autonómico, Francisco Camps, prometió implantar un contrato el próximo ejercicio, con objeto de que la administración asuma la deuda y destine una partida anual a los gastos de la televisión.
Es el mismo modelo puesto en marcha ya por la televisión regional catalana. La Consejería de Economía asumió en marzo la deuda de 1.046 millones de euros que arrastraba el ente público y la refinanciación. A partir de este ejercicio, la administración catalana destinará una partida anual, que este año se concreta en 279 millones, a cubrir los gastos de la televisión y amortizar la deuda.
Sea la fórmula que sea, el caso es que siempre paga el Gobierno, o sea, el contribuyente. Las privadas protestan cada año por este modelo porque las cadenas autonómicas compiten con ventaja. Así al menos argumentan desde Uteca, asociación que agrupa a Antena 3, Telecinco, Cuatro, La Sexta, Net TV y Veo TV. Comen de la cada vez más escasa tarta publicitaria pero, al mismo tiempo, compiten sin riesgos en el negocio de la audiencia, se quejan desde Uteca. Las privadas, sin embargo, tienen la publicidad como fuente exclusiva de ingresos.
Audiencia de campeones
Y la lucha por la audiencia —con las autonómicas en la citada posición de privilegio— llega hasta sus límites más extremos con la guerra del fútbol. El consejero delegado de Antena 3, Silvio González, lo explicaba del siguiente modo, el 10 de septiembre, en los cursos de verano de la Universidad Menéndez Pelayo. “Nosotros pagamos 26 millones de euros por la Champions League y perdíamos un millón por partido, pero somos una empresa privada y podemos tomar esa decisión si entendemos que en el conjunto hay una ganancia general”.
Silvio González calificó de “sorprendente” que la televisión pública haya adquirido esos derechos a un precio que “ha estado en torno a los 65 millones de euros”, en referencia a la compra de los derechos por parte de TVE y la Federación de Organismos de Radio y Televisión Autonómicos (Forta), que engloba a todas las cadenas regionales. Sin embargo, las autonómicas hacen caso omiso a estas protestas. No tanto TVE, que al menos ha dibujado una tendencia en el terreno de la publicidad. El ente público se ha comprometido a rebajar su volumen de anuncios. A cambio de dinero, por supuesto: 500 millones de euros por emitir un máximo de 11 minutos de publicidad por hora. Las privadas emiten 12 por hora.
El próximo año, Televisión Española bajará a 10 y en 2010 a nueve minutos por hora emitida. Se trata de una tendencia generalizada en las televisiones públicas europeas, que no están dispuestas a imitar la estrategia de las autonómicas.
http://www.negocios.com/negocios/21-09-2008+teles_no_miran_numeros_rojos,noticia_1img,28,28,32587
