Analisis Las protestas contra el turismo masivo no son otra cosa que sublimación (inconsciente) a gran escala

Durante el año 2023 y el actual 2024 las protestas contra el turismo masivo han "estallado" en toda España.
Lugares como Baleares o Canarias han contado con multitudinarias protestas contra los pisos turíusticos y la masificación.

No hay más que ver algunas de las noticias más leídas en los diarios últimamente:





Incluso medios internacionales se hacen eco de este fenómeno.



Podriamos analizar este fenómeno desde diversos aspectos: El económico, el sociológico, etc, etc...
Pero hay algo que llama la atención en cuanto uno empieza a analizar, aunque sea de forma somera, este activismo contra el turismo "de baja calidad" o masivo.

España ha sido SIEMPRE un destino turistico.
De hecho el turismo es una de las industrias principales de España, si no la más importante


Fuente: ¿Qué aporta el turismo al PIB en España?

Bien es cierto que hay fenómenos como el turismo de borrachera que se da en ciertas localidades de la costa mediterránea que aportan poco dinero en comparación con el turismo "normal" y que además es algo molesto, que cabrea a los vecinos, y que crea inseguridad.

Los modelos de negocio como los pisos turísticos también han creado problemas de gentrificación y un aumento considerable de los pisos de alquiler.
Evidentemente el turismo de baja calidad es un problema real y serio.

Ahora bien, hay dos aspectos de los que se habla poco:
El primero es que la oferta de "sol y playa" es cada vez más cara y más cutre, y mucho foráneo prefiere (ya desde hace años) gastarse 2000 pavos en pasar las vacaciones en Croacia, en Túnez o en Grecia (por citar algunos ejemplos) antes que gastarse 5000 eypos en España.

Es decir que el turismo "tranquilo" y que gasta cierta cantidad de dinero en ocio, hoteles, atracciones y restaurantes es cada vez menos habitual, y lo que está siendo más habitual (por desgracia) es el modelo de turistas de baja calidad, que gastan poco, y aportan menos aun: Podríamos definirlos como "turismorralla".

¿A dónde quiero ir a parar?
Muy sencillo.

Todas esas protestas (legítimas, por supuesto) en contra de la degradación de los barrios, las salvajes subidas de precio en los alquileres, y la conflictividad social son, en realidad, UN PROCESO DE SUBLIMACIÓN PSICOLÓGICA.



La gente que sale a la calle a protestar de forma vehemente y con gran cabreo en contra del "turismorralla" lo que hace (aunque no sea consciente) es protestar en contra de la degradación del país.

Y no precisamente por el turismo.

Más resumido:
- Si protestas contra los menas que te han metido en el barrio por huevones, contra la morralla delincuente que degrada los barrios entonces ERES UN RACISTA.
- Pero si protestas contra el turismo masivo, poco sostenible y los pisos turísticos ILEGALES, entonces ERES UN BUEN CIUDADANO.


Mi pronóstico (y no hace falta tener una bola de cristal para saberlo) es que las protestas contra "el turismo poco sostenible" van a ir derivando más y más hacia protestas contra menas, degradación, delincuentes foráneos, y esos aspectos que, ahora, no son socialmente aceptables por parte de medios y autoridades, porque al españolito de a pie sólo le queda protestar por cosas como esas.

No tiene otra alternativa. Si señala la degradación de sus barrios, si no acepta que le monten un centro de extranjeros al lado, o que le llenen el pueblo de jovenlandeses indocumentados desconocidos, va a ser señalado hasta por sus propios vecinos.

En cambio protestar contra la degradación del planeta, el macroturismo, o cosas así, si que está bien visto.







(Que conste que esto es un ejercicio literario de ficción... todo mentira)

O simplemente lo mismo que se hizo con Telefónica, espantar clientes, desmantelar los sectores productivos, darle mala imagen y venderla por dos duros. Empezó en capaluña por el borreguismo que inducen los nacionalismos. La gestión ridícula de Paradores nacionales y patrimonio es parte del asunto.