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Será en Octubre
Las familias monoparentales gallegas exigen permisos por nacimiento dobles retribuidos
LA VOZAGENCIAS
SOCIEDAD
AYUNTAMIENTO DE MARRATXÍ | EUROPAPRESS
Hasta el momento se han conseguido varias sentencias favorables, pero sin retribución de la seguridad social. El anteproyecto de la ley de familias no incluye la ampliación de este permiso.
25 dic 2022. Actualizado a las 12:39 h.
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Las familias monoparentales gallegas acumulan ya varias sentencias con fallo favorable para alargar las ampliaciones por permiso de nacimiento, de manera que la persona a cargo de los menores pueda disponer de 32 semanas como se hace en los hogares biparentales. No obstante, la comunidad gallega sigue sin ofrecer respaldo legal a estas familias que en el territorio están sostenidas por un 80 % de mujeres.
En Galicia existe una definición de lo que es una familia monoparental, tal y como determina la Consellería de Política Social de la Xunta de Galicia, que considera familia monoparental al núcleo formado por un único progenitor y con hijos a su cargo.
Para ello, se tienen en cuenta los siguientes supuestos: las personas que afronten la maternidad o paternidad en solitario, las familias formadas por un cónyuge viudo y sus hijos o aquellas en las que un progenitor queda a cargo de los hijos sin que haya custodia compartida.
Este marco legal permite obtener el certificado de familia monoparental que expide la Xunta, aunque a la hora de la verdad «solo sirve para el bono social de la luz y dar puntos para el acceso a las guarderías», aseguran fuentes de la asociación de familias monoparentales de Galicia, Fagamos.
A lo largo de los últimos años, se han promocionado otras medidas asociadas a este certificado como la reducción de la jornada laboral «compensada con subvenciones» o la universalización de la gratuidad en la educación de 0 a 3 años.
El problema, detalla a EFE María López, vicepresidenta de Fagamos, es que «la mayoría de esas medidas están pensadas para aquellas familias donde los niños aún no han cumplido los tres años», pero luego «poco se puede hacer». La última batalla de las familias monoparentales gira en torno a la ampliación de los permisos por nacimiento, que fue incluida en la propuesta de ley de familias monoparentales aprobada por mayoría en marzo en el Congreso.
Galicia es una de las pioneras, por detrás del País Vasco, en fallar sentencias a favor de la ampliación de los permisos por nacimiento a estas familias. Hasta tres juzgados de diferentes provincias como el número 1 de Vigo o el número 3 de Ourense en 2020 y el número 2 de A Coruña en este 2022 se han amparado en la Convención sobre los Derechos del Niño para dictar sentencia.
Una Convención en la que se antepone «la atención, cuidado y desarrollo del menor» y que los Estados deben garantizar, aunque la actual normativa española no lo cumpla en el modelo de familia monoparental. «Los jueces nos dan la razón, pero la Seguridad Social no paga» explica María López.
Una situación que, si bien no siempre es así, puede acontecer. Patricia Boente es una de las beneficiadas con sentencia favorable, pero explica que hubo momentos en los que se «arrepintió» de haber llevado su caso por vía judicial tras conocer la denegación inicial para recibir la prestación por parte de la Seguridad Social, con la que ocho meses después aún continua en trámites judiciales.
Este modus operandi que, en ocasiones, sigue la Seguridad Social no permite que la ampliación del permiso por nacimiento esté garantizada para todas las familias monoparentales, puesto que no todas pueden hacer frente a los gastos del hogar durante meses sin ningún tipo de prestación.
Las estadísticas reflejan que un 54,3 % de las familias monoparentales en España está en riesgo de pobreza. Un riesgo sobre el que el Parlamento Europeo ya advertía en resoluciones del año 1998.
Y que se ve, además, perpetuado por las desigualdades en los permisos laborales para el cuidado de menores, al corresponderles cinco días anuales en lugar de los diez que se establecen para familias biparentales, o en situaciones de desempleo al dejar de recibir, por ejemplo, la prestación si se mudan a una vivienda en la que residan con otras personas; dado que se tiene en cuenta el número de convivientes en los baremos de rentas.
De ahí, defienden la necesidad de una legislación estatal en la que se regule una normativa unitaria en todas las comunidades autónomas para estas familias, el número de semanas de la ampliación por permiso de nacimiento a las que tienen derecho, ya que no todos los juzgados emiten las 16, y la prestación económica a percibir de la Seguridad Social.
Con la aprobación esta semana del anteproyecto de la ley de familias, el Gobierno reconoce legalmente el modelo de familias monoparental y se implementan políticas de diversa índole, entre las que la ampliación por permiso de nacimiento no figura.
Un batacazo para la mayoría de afectadas, ya que el Anteproyecto ofrece «más protección para las familias monoparentales de dos hijos equiparándolas a familias numerosas y al resto (70 %) se les deja a expensas de las comunidades autónomas», explica Miriam Tormo, directora de la Asociación Madres por Elección.
En las próximas semanas, la propuesta de ley llegará al Tribunal Supremo. Fagamos y en consonancia con la FAMS, la Federación de Asociaciones de Madres Solteras, alberga «esperanza mucha, certeza muy poca» de que se convierta en ley antes de que acabe la legislatura. De no hacerlo, señala, «tendríamos que volver a empezar de cero».
LA VOZAGENCIAS
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AYUNTAMIENTO DE MARRATXÍ | EUROPAPRESS
Hasta el momento se han conseguido varias sentencias favorables, pero sin retribución de la seguridad social. El anteproyecto de la ley de familias no incluye la ampliación de este permiso.
25 dic 2022. Actualizado a las 12:39 h.
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Las familias monoparentales gallegas acumulan ya varias sentencias con fallo favorable para alargar las ampliaciones por permiso de nacimiento, de manera que la persona a cargo de los menores pueda disponer de 32 semanas como se hace en los hogares biparentales. No obstante, la comunidad gallega sigue sin ofrecer respaldo legal a estas familias que en el territorio están sostenidas por un 80 % de mujeres.
En Galicia existe una definición de lo que es una familia monoparental, tal y como determina la Consellería de Política Social de la Xunta de Galicia, que considera familia monoparental al núcleo formado por un único progenitor y con hijos a su cargo.
Para ello, se tienen en cuenta los siguientes supuestos: las personas que afronten la maternidad o paternidad en solitario, las familias formadas por un cónyuge viudo y sus hijos o aquellas en las que un progenitor queda a cargo de los hijos sin que haya custodia compartida.
Este marco legal permite obtener el certificado de familia monoparental que expide la Xunta, aunque a la hora de la verdad «solo sirve para el bono social de la luz y dar puntos para el acceso a las guarderías», aseguran fuentes de la asociación de familias monoparentales de Galicia, Fagamos.
A lo largo de los últimos años, se han promocionado otras medidas asociadas a este certificado como la reducción de la jornada laboral «compensada con subvenciones» o la universalización de la gratuidad en la educación de 0 a 3 años.
El problema, detalla a EFE María López, vicepresidenta de Fagamos, es que «la mayoría de esas medidas están pensadas para aquellas familias donde los niños aún no han cumplido los tres años», pero luego «poco se puede hacer». La última batalla de las familias monoparentales gira en torno a la ampliación de los permisos por nacimiento, que fue incluida en la propuesta de ley de familias monoparentales aprobada por mayoría en marzo en el Congreso.
Galicia es una de las pioneras, por detrás del País Vasco, en fallar sentencias a favor de la ampliación de los permisos por nacimiento a estas familias. Hasta tres juzgados de diferentes provincias como el número 1 de Vigo o el número 3 de Ourense en 2020 y el número 2 de A Coruña en este 2022 se han amparado en la Convención sobre los Derechos del Niño para dictar sentencia.
Una Convención en la que se antepone «la atención, cuidado y desarrollo del menor» y que los Estados deben garantizar, aunque la actual normativa española no lo cumpla en el modelo de familia monoparental. «Los jueces nos dan la razón, pero la Seguridad Social no paga» explica María López.
Una situación que, si bien no siempre es así, puede acontecer. Patricia Boente es una de las beneficiadas con sentencia favorable, pero explica que hubo momentos en los que se «arrepintió» de haber llevado su caso por vía judicial tras conocer la denegación inicial para recibir la prestación por parte de la Seguridad Social, con la que ocho meses después aún continua en trámites judiciales.
Este modus operandi que, en ocasiones, sigue la Seguridad Social no permite que la ampliación del permiso por nacimiento esté garantizada para todas las familias monoparentales, puesto que no todas pueden hacer frente a los gastos del hogar durante meses sin ningún tipo de prestación.
Las estadísticas reflejan que un 54,3 % de las familias monoparentales en España está en riesgo de pobreza. Un riesgo sobre el que el Parlamento Europeo ya advertía en resoluciones del año 1998.
Y que se ve, además, perpetuado por las desigualdades en los permisos laborales para el cuidado de menores, al corresponderles cinco días anuales en lugar de los diez que se establecen para familias biparentales, o en situaciones de desempleo al dejar de recibir, por ejemplo, la prestación si se mudan a una vivienda en la que residan con otras personas; dado que se tiene en cuenta el número de convivientes en los baremos de rentas.
De ahí, defienden la necesidad de una legislación estatal en la que se regule una normativa unitaria en todas las comunidades autónomas para estas familias, el número de semanas de la ampliación por permiso de nacimiento a las que tienen derecho, ya que no todos los juzgados emiten las 16, y la prestación económica a percibir de la Seguridad Social.
Con la aprobación esta semana del anteproyecto de la ley de familias, el Gobierno reconoce legalmente el modelo de familias monoparental y se implementan políticas de diversa índole, entre las que la ampliación por permiso de nacimiento no figura.
Un batacazo para la mayoría de afectadas, ya que el Anteproyecto ofrece «más protección para las familias monoparentales de dos hijos equiparándolas a familias numerosas y al resto (70 %) se les deja a expensas de las comunidades autónomas», explica Miriam Tormo, directora de la Asociación Madres por Elección.
En las próximas semanas, la propuesta de ley llegará al Tribunal Supremo. Fagamos y en consonancia con la FAMS, la Federación de Asociaciones de Madres Solteras, alberga «esperanza mucha, certeza muy poca» de que se convierta en ley antes de que acabe la legislatura. De no hacerlo, señala, «tendríamos que volver a empezar de cero».
