Vlad_Empalador
Será en Octubre
La Xunta se suma al Estado en su demanda por los bienes de Meirás
Sada se incorpora a la reclamación, que pide el paso a titularidad pública de 564 objetos
de derechasda principal del Pazo de Meirás MIGUEL MUÑIZ
JOSÉ LUIS JIMÉNEZ
Santiago
10/10/2022
Actualizado a las 20:56h.
La Xunta fue de la mano del Estado en la reclamación de la titularidad pública del Pazo de Meirás y lo hará también en la demanda interpuesta por la Abogacía para que los bienes muebles del icónico inmueble sigan idéntico destino. La Consellería de Cultura anunció esta mañana que, como era esperable, la administración autonómica se personará junto al Estado en la demanda para que 564 bienes muebles de Meirás dejen de ser propiedad de la familia Franco y pasen a manos de los poderes públicos.
En la demanda, presentada a finales de septiembre por la Abogacía en los juzgados de Madrid –por ser el lugar de residencia de los Franco–, se reclamaba la titularidad pública de algo más de quinientos enseres que permanecen en el interior de Meirás, desde elementos decorativos, obras de arte y documentos históricos de la etapa de Francisco Franco como jefe del Estado. La Xunta presentó su escrito de adhesión a la demanda el pasado viernes –apenas unos días después que el Concello de Sada, también personado–, y hoy lo ha comunicado oficialmente.
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En ella, los servicios jurídicos del gobierno gallego alegan el interés legítimo de la administración autonómica para comparecer en el pleito, como ya sucedió en la reclamación por la titularidad del Pazo. Ahora, subrayan que «la declaración de bien de interés cultural como sitio histórico no se limita al edificio de las Torres [de Meirás], sino que la declaración alcanza a todo el conjunto formado por la finca y los bienes contenidos en la misma que coadyuvan a su configuración, participando y enriqueciendo los valores que tras*mite«.
«Es evidente que el resultado de la creación del sitio por la acumulación e interrelación entre los distintos bienes que lo componen es el testimonio de la actividad realizada por las personalidades que de un modo u otro lo diseñaron, habitaron y usaron», exponen en la demanda a la que ha tenido acceso ABC, «justificando y personificando el carácter simbólico y de representación» del Pazo.
Para la Xunta, «parte de los bienes que son objeto de reclamación participan de modo intenso en el valor histórico del Pazo de Meirás, no sólo porque determinan el diseño y configuración interior del lugar, sino porque al igual que el propio inmueble, constituyen vestigios de etapas y personajes históricos que allí los colocaron y utilizaron«. Como ha defendido a la hora de establecer el relato que explique Meirás, la Consellería de Cultura sostiene que el inmueble solo se entiende en la combinación de las personalidades de Emilia Pardo Bazán y Francisco Franco, la creadora del Pazo y su ocupante durante el largo periodo de la dictadura, respectivamente.
Entender mejor Meirás
«La permanencia de estos bienes localizados en las estancias y para los usos para los que fueron dispuestos, colaboraría a hacer más tras*misibles y comprensibles los acontecimientos históricos que en el Pazo se produjeron, y a difundir de una manera más precisa y auténtica a la población en general«, afirman en la demanda. Además, los servicios jurídicos consideran que »todos los bienes reclamados por el Estado se encuentran en el Pazo desde fechas muy lejanas y han servido en el Pazo a los dos personajes históricos que lo habitaron y que, a la postre, son los que determinan el valor histórico del lugar«.
En la demanda del Estado se diferencian varios tipos de bienes. Están por un lado los que se consideran pertenecientes a las Colecciones Reales de Patrimonio Nacional, inicialmente identificados en el inventario que se realizó en noviembre de 2020, y ampliado hace unos meses; los documentos y publicaciones de la etapa franquista listados por técnicos de Patrimonio Nacional y los Archivos Estatales entre diciembre de 2021 y julio de este año; los bienes relacionados con la figura de Emilia Pardo Bazán, según informe pericial del catedrático de Historia del Arte Jesús Ángel Sánchez (USC); y los enseres incorporados a Meirás durante la dictadura, según sendos informes del grupo de expertos Hispona (USC) y el historiador Manuel Pérez Lorenzo.
En su argumentación, la Xunta recuerda cómo «fue el Parlamento gallego el que inició las actuaciones para recuperar el Pazo de Meirás para el patrimonio público«, proceso del que deriva la actual reclamación por los bienes, y el acompañamiento que se ha hecho del Estado en todo el procedimiento, también en el recurso de casación ante el Tribunal Supremo, último escalón en el pleito civil por la titularidad del inmueble.
El conselleiro de Cultura, Román Rodríguez, volvió a insistir en que se trata de un proceso «muy complejo» por el hecho de que una parte del pleito esté en un juzgado de La Coruña –la relativa a la ejecución de la sentencia de la propiedad del Pazo– y otra en el de Madrid. No obstante, incidió en que la Administración gallega apoya esa reclamación por ser «la única forma de que estos bienes pasen a ser propiedad pública». Por todo ello, apeló a la «unidad de acción». Mientras, reiteró que la declaración BIC lo que hace es «proteger culturalmente un bien, pero no interviene sobre la propiedad».
Sada se incorpora a la reclamación, que pide el paso a titularidad pública de 564 objetos
de derechasda principal del Pazo de Meirás MIGUEL MUÑIZ
JOSÉ LUIS JIMÉNEZ
Santiago
10/10/2022
Actualizado a las 20:56h.
La Xunta fue de la mano del Estado en la reclamación de la titularidad pública del Pazo de Meirás y lo hará también en la demanda interpuesta por la Abogacía para que los bienes muebles del icónico inmueble sigan idéntico destino. La Consellería de Cultura anunció esta mañana que, como era esperable, la administración autonómica se personará junto al Estado en la demanda para que 564 bienes muebles de Meirás dejen de ser propiedad de la familia Franco y pasen a manos de los poderes públicos.
En la demanda, presentada a finales de septiembre por la Abogacía en los juzgados de Madrid –por ser el lugar de residencia de los Franco–, se reclamaba la titularidad pública de algo más de quinientos enseres que permanecen en el interior de Meirás, desde elementos decorativos, obras de arte y documentos históricos de la etapa de Francisco Franco como jefe del Estado. La Xunta presentó su escrito de adhesión a la demanda el pasado viernes –apenas unos días después que el Concello de Sada, también personado–, y hoy lo ha comunicado oficialmente.
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En ella, los servicios jurídicos del gobierno gallego alegan el interés legítimo de la administración autonómica para comparecer en el pleito, como ya sucedió en la reclamación por la titularidad del Pazo. Ahora, subrayan que «la declaración de bien de interés cultural como sitio histórico no se limita al edificio de las Torres [de Meirás], sino que la declaración alcanza a todo el conjunto formado por la finca y los bienes contenidos en la misma que coadyuvan a su configuración, participando y enriqueciendo los valores que tras*mite«.
«Es evidente que el resultado de la creación del sitio por la acumulación e interrelación entre los distintos bienes que lo componen es el testimonio de la actividad realizada por las personalidades que de un modo u otro lo diseñaron, habitaron y usaron», exponen en la demanda a la que ha tenido acceso ABC, «justificando y personificando el carácter simbólico y de representación» del Pazo.
Para la Xunta, «parte de los bienes que son objeto de reclamación participan de modo intenso en el valor histórico del Pazo de Meirás, no sólo porque determinan el diseño y configuración interior del lugar, sino porque al igual que el propio inmueble, constituyen vestigios de etapas y personajes históricos que allí los colocaron y utilizaron«. Como ha defendido a la hora de establecer el relato que explique Meirás, la Consellería de Cultura sostiene que el inmueble solo se entiende en la combinación de las personalidades de Emilia Pardo Bazán y Francisco Franco, la creadora del Pazo y su ocupante durante el largo periodo de la dictadura, respectivamente.
Entender mejor Meirás
«La permanencia de estos bienes localizados en las estancias y para los usos para los que fueron dispuestos, colaboraría a hacer más tras*misibles y comprensibles los acontecimientos históricos que en el Pazo se produjeron, y a difundir de una manera más precisa y auténtica a la población en general«, afirman en la demanda. Además, los servicios jurídicos consideran que »todos los bienes reclamados por el Estado se encuentran en el Pazo desde fechas muy lejanas y han servido en el Pazo a los dos personajes históricos que lo habitaron y que, a la postre, son los que determinan el valor histórico del lugar«.
En la demanda del Estado se diferencian varios tipos de bienes. Están por un lado los que se consideran pertenecientes a las Colecciones Reales de Patrimonio Nacional, inicialmente identificados en el inventario que se realizó en noviembre de 2020, y ampliado hace unos meses; los documentos y publicaciones de la etapa franquista listados por técnicos de Patrimonio Nacional y los Archivos Estatales entre diciembre de 2021 y julio de este año; los bienes relacionados con la figura de Emilia Pardo Bazán, según informe pericial del catedrático de Historia del Arte Jesús Ángel Sánchez (USC); y los enseres incorporados a Meirás durante la dictadura, según sendos informes del grupo de expertos Hispona (USC) y el historiador Manuel Pérez Lorenzo.
En su argumentación, la Xunta recuerda cómo «fue el Parlamento gallego el que inició las actuaciones para recuperar el Pazo de Meirás para el patrimonio público«, proceso del que deriva la actual reclamación por los bienes, y el acompañamiento que se ha hecho del Estado en todo el procedimiento, también en el recurso de casación ante el Tribunal Supremo, último escalón en el pleito civil por la titularidad del inmueble.
El conselleiro de Cultura, Román Rodríguez, volvió a insistir en que se trata de un proceso «muy complejo» por el hecho de que una parte del pleito esté en un juzgado de La Coruña –la relativa a la ejecución de la sentencia de la propiedad del Pazo– y otra en el de Madrid. No obstante, incidió en que la Administración gallega apoya esa reclamación por ser «la única forma de que estos bienes pasen a ser propiedad pública». Por todo ello, apeló a la «unidad de acción». Mientras, reiteró que la declaración BIC lo que hace es «proteger culturalmente un bien, pero no interviene sobre la propiedad».
