Vlad_Empalador
Será en Octubre
Ángela Rodríguez 'Pam', una secretaria de Igualdad con poco filtro
QUIÉN
Las palabras de la Secretaria de Estado de Igualdad, bisexual y tras*feminista, acostumbran a desatar tormentas
‘Pam’ se ha acabado disculpando por ironizar sobre las rebajas de condenas a agresores sensuales
La secretaria de Estado de Igualdad y contra la Violencia de Género, Ángela Rodríguez 'Pam', en el ojo del huracán por una nueva polémica
Ricardo Rubio/Europa Press
LORENA FERRO
BARCELONA
14/01/2023 06:00
30
Ángela Rodríguez (Pontevedra, 1989) habla sin pelos en la lengua y con la frescura propia de una mujer de su edad, aunque para algunos a veces esa verborrea descarada sea un tanto barriobajera, más aún teniendo en cuenta el cargo que ostenta: es Secretaria de Estado de Igualdad y contra la Violencia de Género. No parece importarle ni eso ni el indiscutible escrutinio al que sabe que son sometidas muchas de sus palabras o las de algunas compañeras de formación.
Está claro que a esta filósofa pontevedresa, bisexual y “tras*feminista” declarada no le importa el qué dirán, aún menos cuando el micro que le da altavoz es de tonalidad jovenlandesado. Entonces Pam, como es conocida entre sus colegas, dispara dónde considera y apuesta por despojarse totalmente del filtro que muchos le reclaman por ser la número dos del ministerio de Igualdad. Y cuando se deja ir, acostumbra a provocar incendios políticos de más o menos envergadura, especialmente porque muchos ven intolerables sus formas teniendo en cuenta su categoría profesional.
Su última polémica ha tenido lugar esta misma semana, cuando en un fragmento de un podcast quiso aludir a las críticas que la extrema derecha hace de la ley del solo sí es sí espetando en tono irónico un “de los creadores de ‘las personas van a ir al registro a cambiarse de sesso todas las mañanas’ llega... ‘¡los forzadores a la calle!’ (...) Miles, oleadas”. Unas palabras que han provocado que partidos como el PP o Ciudadanos exijan su cese. No ha sido la primera vez que su espontaneidad y sus palabras han recibido críticas de la oposición y tampoco han gustado a su socio de gobierno.
Sus últimas palabras la convirtieron en el centro de la polémica y no fue hasta ayer cuando se disculpó: “Evidentemente, la lucha contra la violencia machista no es causa de ninguna risa, ni es causa de diversión”
Perfil
Se define como bisexual y sufre desde hace años un trastorno de conducta alimentaria
Se licenció en filosofía por la Universidad de Santiago de Compostela, está formada en violencia de género por la UNED y es activista LGTBI. No esconde que padece aún hoy un trastorno de la conducta alimentaria (TCA) y quizás por eso es una gran defensora del movimiento body positive.
Pam participado de manera muy activa en dos de las normas que más discusión y enfrentamientos suscitan en los últimos meses en España: la ley tras* y la de Garantía de la libertad sensual, la conocida como ley del solo sí es sí. Su nombramiento en 2021 como Secretaria de Estado no gustó al sector feminista contrario a la Ley tras* porque ha sido una de las mayores impulsoras. Y no pierde ocasión para dejar clara su postura con mensajes sin cortapisas.
Como el texto que publicó en la red social Twitter poco antes de ser nombrada en su actual cargo: “Terfas, no me escribáis para intentar convencerme de que las personas LGTBI estamos equivocadas o somos culpables. No voy a dejar de ser bisexual ni de defender mis derechos. No son argumentos racionales los vuestros, son narrativas que validan los discursos de repruebo. BLOCK”.
Una de sus impulsoras
Hace unas semanas aseguró "despreciar" a los hombres de izquierdas que no entienden la ley del solo sí es sí
Pontevedresa de 33 años y sin experiencia laboral más allá de la política, Ángela Rodríguez está en el cargo de Secretaria de Estado de Igualdad y Contra la Violencia de Género hace un año y tres meses tras relevar a Noelia Vera. Activista del movimiento 15-M en su Galicia natal, hace apenas seis años optó a ser la Secretaria General de Podemos en la comunidad atlántica de la mano de Iñigo Errejón. Esa alianza no le ha impedido escalar posiciones en el Ministerio de Igualdad dirigido por Irene Montero, donde hoy es un peso pesado. Ni Irene Montero ni Ione Belarra dudan en sacar la espada y el escudo cuando es necesario.
En 2016, cuando aún su nombre era únicamente conocido en el ámbito local, denunció haber sufrido un trato vejatorio por su juventud –entonces contaba 27 años- cuando se disponía a recoger su acreditación en el Congreso de los Diputados. También fue sonada la expresión que le dedicó en un grupo de WhatsApp a una compañera de formación de Podemos Galicia con una discapacidad física a la que tildó de “fruta coja”.
Su defensa sobre la ley del sí es sí provocó otra polémica hace unas semanas cuando aseguró “despreciar” a los “hombres de izquierdas” que no “entienden” la norma estrella del ministerio dirigido por Montero. Estas palabras y su ironía de esta semana, aunque sacada de contexto como ella misma ha defendido, llegan en un momento especialmente sensible tras un final de 2022 e inicio de 2023 preocupante en lo que a cifras de violencia machista se refieren, con rebajas de condenas o con casos como el de La Manada de Castelldefels. Algunos le critican –a ella y a otras dirigentes jovenlandesadas- que no mida sus palabras y que nunca rectifique ni asuma que se ha pasado de frenada.
QUIÉN
Las palabras de la Secretaria de Estado de Igualdad, bisexual y tras*feminista, acostumbran a desatar tormentas
‘Pam’ se ha acabado disculpando por ironizar sobre las rebajas de condenas a agresores sensuales
La secretaria de Estado de Igualdad y contra la Violencia de Género, Ángela Rodríguez 'Pam', en el ojo del huracán por una nueva polémica
Ricardo Rubio/Europa Press
LORENA FERRO
BARCELONA
14/01/2023 06:00
30
Ángela Rodríguez (Pontevedra, 1989) habla sin pelos en la lengua y con la frescura propia de una mujer de su edad, aunque para algunos a veces esa verborrea descarada sea un tanto barriobajera, más aún teniendo en cuenta el cargo que ostenta: es Secretaria de Estado de Igualdad y contra la Violencia de Género. No parece importarle ni eso ni el indiscutible escrutinio al que sabe que son sometidas muchas de sus palabras o las de algunas compañeras de formación.
Está claro que a esta filósofa pontevedresa, bisexual y “tras*feminista” declarada no le importa el qué dirán, aún menos cuando el micro que le da altavoz es de tonalidad jovenlandesado. Entonces Pam, como es conocida entre sus colegas, dispara dónde considera y apuesta por despojarse totalmente del filtro que muchos le reclaman por ser la número dos del ministerio de Igualdad. Y cuando se deja ir, acostumbra a provocar incendios políticos de más o menos envergadura, especialmente porque muchos ven intolerables sus formas teniendo en cuenta su categoría profesional.
Su última polémica ha tenido lugar esta misma semana, cuando en un fragmento de un podcast quiso aludir a las críticas que la extrema derecha hace de la ley del solo sí es sí espetando en tono irónico un “de los creadores de ‘las personas van a ir al registro a cambiarse de sesso todas las mañanas’ llega... ‘¡los forzadores a la calle!’ (...) Miles, oleadas”. Unas palabras que han provocado que partidos como el PP o Ciudadanos exijan su cese. No ha sido la primera vez que su espontaneidad y sus palabras han recibido críticas de la oposición y tampoco han gustado a su socio de gobierno.
Sus últimas palabras la convirtieron en el centro de la polémica y no fue hasta ayer cuando se disculpó: “Evidentemente, la lucha contra la violencia machista no es causa de ninguna risa, ni es causa de diversión”
Perfil
Se define como bisexual y sufre desde hace años un trastorno de conducta alimentaria
Se licenció en filosofía por la Universidad de Santiago de Compostela, está formada en violencia de género por la UNED y es activista LGTBI. No esconde que padece aún hoy un trastorno de la conducta alimentaria (TCA) y quizás por eso es una gran defensora del movimiento body positive.
Pam participado de manera muy activa en dos de las normas que más discusión y enfrentamientos suscitan en los últimos meses en España: la ley tras* y la de Garantía de la libertad sensual, la conocida como ley del solo sí es sí. Su nombramiento en 2021 como Secretaria de Estado no gustó al sector feminista contrario a la Ley tras* porque ha sido una de las mayores impulsoras. Y no pierde ocasión para dejar clara su postura con mensajes sin cortapisas.
Como el texto que publicó en la red social Twitter poco antes de ser nombrada en su actual cargo: “Terfas, no me escribáis para intentar convencerme de que las personas LGTBI estamos equivocadas o somos culpables. No voy a dejar de ser bisexual ni de defender mis derechos. No son argumentos racionales los vuestros, son narrativas que validan los discursos de repruebo. BLOCK”.
Una de sus impulsoras
Hace unas semanas aseguró "despreciar" a los hombres de izquierdas que no entienden la ley del solo sí es sí
Pontevedresa de 33 años y sin experiencia laboral más allá de la política, Ángela Rodríguez está en el cargo de Secretaria de Estado de Igualdad y Contra la Violencia de Género hace un año y tres meses tras relevar a Noelia Vera. Activista del movimiento 15-M en su Galicia natal, hace apenas seis años optó a ser la Secretaria General de Podemos en la comunidad atlántica de la mano de Iñigo Errejón. Esa alianza no le ha impedido escalar posiciones en el Ministerio de Igualdad dirigido por Irene Montero, donde hoy es un peso pesado. Ni Irene Montero ni Ione Belarra dudan en sacar la espada y el escudo cuando es necesario.
En 2016, cuando aún su nombre era únicamente conocido en el ámbito local, denunció haber sufrido un trato vejatorio por su juventud –entonces contaba 27 años- cuando se disponía a recoger su acreditación en el Congreso de los Diputados. También fue sonada la expresión que le dedicó en un grupo de WhatsApp a una compañera de formación de Podemos Galicia con una discapacidad física a la que tildó de “fruta coja”.
Su defensa sobre la ley del sí es sí provocó otra polémica hace unas semanas cuando aseguró “despreciar” a los “hombres de izquierdas” que no “entienden” la norma estrella del ministerio dirigido por Montero. Estas palabras y su ironía de esta semana, aunque sacada de contexto como ella misma ha defendido, llegan en un momento especialmente sensible tras un final de 2022 e inicio de 2023 preocupante en lo que a cifras de violencia machista se refieren, con rebajas de condenas o con casos como el de La Manada de Castelldefels. Algunos le critican –a ella y a otras dirigentes jovenlandesadas- que no mida sus palabras y que nunca rectifique ni asuma que se ha pasado de frenada.