El Pionero
Alcalde y presidente de Fútbol Paco premium
La producción almeriense de almendra se sitúa habitualmente en un volumen superior a las 30.000 toneladas, pero este año sufrirá una reducción que desde la Coordinadora de Organizaciones de Agricultores y Ganaderos estiman en torno al 50 por ciento.
Las causas son, como ya va siendo habitual en los últimos años, tanto la escasez de precipitaciones como el intenso calor de estos meses de verano, que han afectado a los árboles y han reducido tanto la cantidad de frutos como el tamaño de los mismos.
Campaña rota
El caso es que las previsiones iniciales señalaban que este año el volumen de almendra recolectada en las explotaciones de la provincia estaría incluso por encima de las medias históricas, hasta un 49 por ciento más que en los últimos años, según recoge COAG en su análisis.
Andrés Góngora, secretario provincial de la organización agraria, explica que si bien las perspectivas mejoraron con las lluvias del pasado mes de mayo, la escasez de precipitaciones que llegaron en los primeros compases del verano ha supuesto un serio deterioro de esas expectativas.
Así, frente a la media de más de 30.000 toneladas y tras los primeros días de recolección, la realidad es que el volumen final no superará las 17.000 toneladas, en torno a un cincuenta por ciento menos. Según Góngora, a la escasez de precipitaciones se ha unido el fuerte calor que se ha vivido en la provincia en los dos últimos meses, “que ha hecho que los almendros, que se cargaron de frutos con las lluvias de mayo, no hayan podido resistir un desarrollo normal de las almendras, que finalmente no han alcanzado el tamaño adecuado, reduciéndose de forma notable la productividad de los cultivos de la provincia.
Sin remedio
Para Coag, a estas alturas el problema ya no tiene solución porque la recolección se ha iniciado y ya es imposible que la almendra gane peso. Advierte su secretario general que incluso hay numerosos agricultores que han decidido ya no recolectar ante el escaso peso de frutos y unos precios que “de momento no cubren ni los gastos”.
Desde la organización de agricultores se ha reclamado a la Junta de Andalucía que pongan en marcha medidas de ayuda a los productores que complementen las que sí ha activado en los últimos días el Ministerio de Agricultura.
De las 55.000 hectáreas de almendros que existen en Almería (es una de las principales productoras de almendra del país), más del 97 por ciento se explotan en régimen de secano, lo que supone una alta dependencia del régimen de lluvias. Para COAG esa fuerte dependencia, derivada de la crisis climática, es la que justificaría el reparto de ayudas públicas.
Las causas son, como ya va siendo habitual en los últimos años, tanto la escasez de precipitaciones como el intenso calor de estos meses de verano, que han afectado a los árboles y han reducido tanto la cantidad de frutos como el tamaño de los mismos.
Campaña rota
El caso es que las previsiones iniciales señalaban que este año el volumen de almendra recolectada en las explotaciones de la provincia estaría incluso por encima de las medias históricas, hasta un 49 por ciento más que en los últimos años, según recoge COAG en su análisis.
Andrés Góngora, secretario provincial de la organización agraria, explica que si bien las perspectivas mejoraron con las lluvias del pasado mes de mayo, la escasez de precipitaciones que llegaron en los primeros compases del verano ha supuesto un serio deterioro de esas expectativas.
Así, frente a la media de más de 30.000 toneladas y tras los primeros días de recolección, la realidad es que el volumen final no superará las 17.000 toneladas, en torno a un cincuenta por ciento menos. Según Góngora, a la escasez de precipitaciones se ha unido el fuerte calor que se ha vivido en la provincia en los dos últimos meses, “que ha hecho que los almendros, que se cargaron de frutos con las lluvias de mayo, no hayan podido resistir un desarrollo normal de las almendras, que finalmente no han alcanzado el tamaño adecuado, reduciéndose de forma notable la productividad de los cultivos de la provincia.
Sin remedio
Para Coag, a estas alturas el problema ya no tiene solución porque la recolección se ha iniciado y ya es imposible que la almendra gane peso. Advierte su secretario general que incluso hay numerosos agricultores que han decidido ya no recolectar ante el escaso peso de frutos y unos precios que “de momento no cubren ni los gastos”.
Desde la organización de agricultores se ha reclamado a la Junta de Andalucía que pongan en marcha medidas de ayuda a los productores que complementen las que sí ha activado en los últimos días el Ministerio de Agricultura.
De las 55.000 hectáreas de almendros que existen en Almería (es una de las principales productoras de almendra del país), más del 97 por ciento se explotan en régimen de secano, lo que supone una alta dependencia del régimen de lluvias. Para COAG esa fuerte dependencia, derivada de la crisis climática, es la que justificaría el reparto de ayudas públicas.
La sequía se lleva por delante más de la mitad de la cosecha de almendras
Se esperan apenas 17.000 toneladas, frente a las más de 30.000 que son habituales cada año
www.lavozdealmeria.com