La cita en Praga entre los presidentes de ambos ejecutivos estaba prevista a las cuatro menos diez, ya que Obama iba a dedicarse durante la hora anterior a entrevistarse con medios de comunicación checos, antes que con Zapatero. Inmediatamente después, a las 16:30 horas, el presidente de EEUU tenía previsto entrevistarse con el presidente polaco.
Pero la presión de Moncloa dio su fruto, según El Mundo. La cita, de unos 25 minutos, se ha fijado finalmente para las 14:55 horas. Justo a tiempo para los informativos de mediodía de las televisiones españolas. Ambos presidentes tratarán las relaciones bilaterales entre ambos países, así como cuestiones de Oriente Próximo, América Latina y África.
Al término de dicha reunión, Zapatero pondrá rumbo a Estambul para celebrar su primera Reunión (cumbre bilateral) con Turquía e inaugurar el lunes el II Foro de la Alianza de las Civilizaciones.
Zapatero tan sólo cruzó algunos saludos y mantuvo alguna conversación telefónica con el anterior inquilino de la Casa Blanca, George W. Bush, cuya relación bilateral marcó desde el principio la decisión del socialista de retirar las tropas de Irak. Meses después Zapatero llegó incluso a animar a otros países a que siguieran su ejemplo y retiraran sus tropas por el bien del país árabe, durante una visita que efectuó a Túnez con motivo de la Reunión de Alto Nivel (cumbre bilateral) entre España y el país joven.
El presidente español se convirtió así en uno de los pocos dirigentes mundiales que no llegaron a pisar la Casa Blanca para visitar a Bush. No obstante, Zapatero pudo entrar finalmente en la residencia del presidente de los Estados Unidos con motivo de su participación en la cumbre del G-20 en Washington el pasado 15 de noviembre, donde Bush le recibió, como al resto de líderes, en el vestíbulo de la Casa Blanca.
Zapatero y Obama tuvieron oportunidad de charlar personalmente por primera vez en la cena que ofreció en Londres la reina Isabel II a los asistentes a la cumbre del G-20. Según relataron fuentes gubernamentales españolas, fue una conversación amplia en la que hablaron de la crisis financiera internacional y otras cuestiones relacionadas con la OTAN y las relaciones internacionales. Ahora tendrá por fin su ocasión de reunirse con el presidente en un encuentro oficial.
