El Pionero
Alcalde y presidente de Fútbol Paco premium
La caja que en 2023 contenía 44 bombones, ahora contiene 42. Pero, además, en lugar de costar unos 11 euros, ahora cuesta 12. Este ejemplo concreto es el de la conocida Caja Roja de bombones de Nestlé con los precios de venta en Hipercor para los respectivos meses de octubre, pero se da en otros conocidos formatos tanto de bombones como de turrones, como Lindt o Suchard.
Así lo corrobora la organización Facua-Consumidores en Acción, quien ha detectado ejemplos de reduflación en nueve turrones y bombones a las puertas de la Navidad. En concreto, ha identificado esta práctica tanto en marcas propias como en algunas marcas blancas.
El caso más llamativo es el de la Caja Roja de Nestlé, que a través de sus distintos formatos (en el de 42 bombones —antes 44—, en el de 21 bombones —antes 21— y en el de 11 bombones) ha reducido el número de dulces y ha aumentado los precios.
De la misma compañía, Facua también destaca el caso de los bombones Dark Sublime, que aunque han aumentado el peso de sus formatos de 145 gramos —antes 143— y 87 gramos —antes 85—, ha subido su precio de venta de manera desproporcionada, entre un 17% y un 20% de acuerdo a los ejemplos recogidos en diferentes superficies —en este caso, en Alcampo y DIA—.
En DIA, el turrón crujiente neցro de su marca blanca pesa 50 gramos menos de un año a otro. Pero, además, se ha encarecido 14 céntimos, lo cual supone una subida del 7,5% (o del 43,45% por kilo). Algo similar ocurre con su surtido de pralinés, que pesa 130 gramos menos pero cuesta 35 céntimos más.
La caja Dulces Deseos de Lindt costaba el año pasado 12,99 euros en su formato de 345 gramos. Este año no se comercializa en ese formato, pero sí en otro de 337 gramos a un precio es 13,99 euros.
Por último, el turrón de Suchard es, para Facua, "uno de los ejemplos más claros de reduflación detectados". Tanto el año pasado como este, la tableta de chocolate clásica se vende en la mayoría de establecimientos por 3,99 euros. Sin embargo, mientras que en 2023 contenía 260 gramos, en 2024 se ha 'adelgazado' 30 gramos, para pesar en báscula 230 gramos. "Por lo tanto, el precio por kilo del turrón de Suchard ha aumentado un 13%, pese a que a simple vista la mayoría de los consumidores no detecta esta bajada de peso de 30 gramos", considera la organización.
Por todo ello, desde Facua solicitan al Ministerio de Derechos Sociales, Consumo y Agenda 2030 que promueva una modificación de la ley para obligar a las empresas que incurran en reduflación a que lo tengan que anunciar durante un largo periodo de tiempo en el etiquetado del producto afectado. "De este modo, los consumidores podrían conocer de manera clara cómo se ha modificado el envase, el formato o el precio de estos productos", concluye la organización.
Así lo corrobora la organización Facua-Consumidores en Acción, quien ha detectado ejemplos de reduflación en nueve turrones y bombones a las puertas de la Navidad. En concreto, ha identificado esta práctica tanto en marcas propias como en algunas marcas blancas.
El caso más llamativo es el de la Caja Roja de Nestlé, que a través de sus distintos formatos (en el de 42 bombones —antes 44—, en el de 21 bombones —antes 21— y en el de 11 bombones) ha reducido el número de dulces y ha aumentado los precios.
De la misma compañía, Facua también destaca el caso de los bombones Dark Sublime, que aunque han aumentado el peso de sus formatos de 145 gramos —antes 143— y 87 gramos —antes 85—, ha subido su precio de venta de manera desproporcionada, entre un 17% y un 20% de acuerdo a los ejemplos recogidos en diferentes superficies —en este caso, en Alcampo y DIA—.
En DIA, el turrón crujiente neցro de su marca blanca pesa 50 gramos menos de un año a otro. Pero, además, se ha encarecido 14 céntimos, lo cual supone una subida del 7,5% (o del 43,45% por kilo). Algo similar ocurre con su surtido de pralinés, que pesa 130 gramos menos pero cuesta 35 céntimos más.
La caja Dulces Deseos de Lindt costaba el año pasado 12,99 euros en su formato de 345 gramos. Este año no se comercializa en ese formato, pero sí en otro de 337 gramos a un precio es 13,99 euros.
Por último, el turrón de Suchard es, para Facua, "uno de los ejemplos más claros de reduflación detectados". Tanto el año pasado como este, la tableta de chocolate clásica se vende en la mayoría de establecimientos por 3,99 euros. Sin embargo, mientras que en 2023 contenía 260 gramos, en 2024 se ha 'adelgazado' 30 gramos, para pesar en báscula 230 gramos. "Por lo tanto, el precio por kilo del turrón de Suchard ha aumentado un 13%, pese a que a simple vista la mayoría de los consumidores no detecta esta bajada de peso de 30 gramos", considera la organización.
Por todo ello, desde Facua solicitan al Ministerio de Derechos Sociales, Consumo y Agenda 2030 que promueva una modificación de la ley para obligar a las empresas que incurran en reduflación a que lo tengan que anunciar durante un largo periodo de tiempo en el etiquetado del producto afectado. "De este modo, los consumidores podrían conocer de manera clara cómo se ha modificado el envase, el formato o el precio de estos productos", concluye la organización.