Prometheo
Madmaxista
- Desde
- 10 Sep 2012
- Mensajes
- 4.711
- Reputación
- 8.156
A raíz de un artículo publicado hace pocos días en Strategic Culture Foundation, reseñado más abajo, no está de más echar abajo otra vez a la la mitificada y bendecida Polonia de la II Guerra Mundial, a través de sus infames antecedentes. No desmerece, de alguna manera, de aquél Estado nancy que la invadió. Siguiendo a J.A. González Canales podemos decir que la imagen que se ha tenido siempre de Polonia, ha sido la de un país agredido, víctima de sus verdugos alemanes y soviéticos. Un pueblo que ha tenido que luchar continuamente por su existencia y su autonomía. Sin embargo esta visión mitificada e inmaculada de Polonia no concuerda con la realidad.
Veamos algunos breves apuntes sobre que se puede decir de la Polonia pre-invadida por el nazismo. Nada bueno, por otra parte.
El artículo de Strategic Culture:
Fuentes:
KAOSENLARED.NET -- Katyn y la desmemoria polaca
Pyotr Gromov - True Story. Sharp Turn in Polish History - Strategic Culture Foundation
Veamos algunos breves apuntes sobre que se puede decir de la Polonia pre-invadida por el nazismo. Nada bueno, por otra parte.
El expansionismo polaco
Pacto de amistad nancy-polaco
Desde su nacimiento como estado, reconocido en el Tratado de Versalles de 1918, Polonia fue un país expansionista y bastante belicoso más allá de sus fronteras. Al día siguiente de su declaración de independencia, invadió Przemysl, a solo 70 kilómetros de Lvov en la región de la Galitzia ucraniana. Polonia llegará a la misma Kiev, capital de Ucrania.
Rememorando el imperio polaco-lituano medieval, invadió el este de sus límites jurídicos(pertenecientes al imperio ruso), saltándose la legalidad internacional vigente y la recién creada Linea Curzon. Un tratado obra del secretario de Estado de Asuntos Exteriores inglés, Lord Curzon, que trazaba una frontera como posible tregua al conflicto ruso-polaco. Estos movimientos, la hicieron entrar en guerra con la naciente revolución rusa, que ya luchaba contra el ejército blanco y con algunas potencias occidentales en ese momento.
Terminada la guerra ruso-polaca en 1921, Polonia se anexionó más de 200 mil kilómetros al este de sus límites de 1918(territorios de mayoría ucraniana y bielorrusa).Originándose la fin, según fuentes diversas entre 20 mil(fuentes polacas[1]) y 80 mil(fuentes mayoritariamente rusas[2]) soldados rusos en campos de concentración polacos como Tuchola o Pulawy. Este trato dado a los soldados rusos quedará grabado en la memoria rusa[3].
[1] Polish-Russian Findings
[2] El historiador militar M. Filimoshin confirma este número, basándose en la carta del coronel polaco Ignacy Matuszewski que envía al Ministro de Guerra, en la que asegura la fin solo en Tuchola de 22 mil prisioneros rusos.
[3] Al hacer la pregunta al presidente polaco de por qué varios miles de oficiales de la policía, el Ejército y la guardia fronteriza de Polonia fueron asesinados en Katyn en 1940, Kaczynski dijo: "Habrá sido una venganza por el año 1920. Una venganza porque Polonia supo rechazar en aquel entonces la agresión (de Rusia) y también el comunismo”. Presidente polaco califica la tragedia de Katyn como venganza rusa por la matanza de prisioneros de guerra rusos en 1920 | Mundo | RIA Novosti
También Polonia entraría en guerra con Lituania y Checoslovaquia, invadiendo el 20% del territorio de la primera, incluido su capital Vilnus. Polonia se convirtió de ese modo en un país agresor dirigido por una casta de militares ultranacionalistas y ultracatólicos, apoyados por los anglofranceses y el vaticano. Su posición estratégica y sus alianzas, la erigían como “centro de todo el sistema contemporáneo del imperialismo internacional[4]”, como ya advirtió Lenin.
Reforzada y asentada las fronteras limítrofes, el estado polaco, al mando del dictador Jozef Pilsudski, promueve la idea de la Gran Polonia. El objetivo es acabar con la identidad de las comunidades ucranianas, bielorrusas, judía, checa, alemana o rusa, asimilándolas a la cultura polaca.
Se producen emigraciones masivas en Rutenia, donde decenas de miles de ucranianos y bielorrusos son obligados a huir. Se persigue: la lengua rusa entre otras, la religión ortodoxa y en general las costumbres ajenas a Polonia. Igualmente comienza la colonización con habitantes polacos de estas tierras conseguidas mediante la conquista militar.
Muchos ucranianos se sintieron traicionados, ya que algunos lucharon al lado de Polonia, en pro de conseguir la independencia de Rusia, este resentimiento ira inoculando un extremismo nacionalista ucraniano antipolaco que tendrá consecuencias nefastas en la II Guerra Mundial.
Otra minoría perseguida fue la judía, si de algo ha sido conocida Polonia, sobre todo por Hollywood, ha sido por esta comunidad, lo que muchos desconocen es que la persecución a los judíos no se implanta con la oleada turística de la Alemania nancy, oficialmente Polonia ya había creado una jurisdicción segregadora.
El pacto de amistad polaco-alemán y la oleada turística a la república checoslovaca
La historiografía oficial polaca, ha utilizado una y otra vez el pacto Molotov-Ribbentrop como arma arrojadiza, y como origen directo de la contienda mundial. Esta visión unilateral impide analizar de una manera más compleja el ambiente europeo de los años 30, dejándose atrás los pactos que Inglaterra, Francia y la misma Polonia tuvieron con la Alemania nancy.
Desde la llegada al poder de Hitler, las cláusulas de Versalles fueron forzadas una y otra vez por el gobierno nancy. Esta condescendencia de anglofranceses, que utilizaron el argumento de la seguridad colectiva, venia por la amenaza que suponía para los intereses capitalistas, la Unión Soviética, que en esos momentos ya era una potencia militar e industrial.Era lógico, para las potencias occidentales, que en el centro de Europa hubiera un país que sirviera de tapón a la “expansión comunista”.
De ese modo Alemania se rearmó considerablemente, militarizó la Renania, firmó el pacto con Gran Bretaña en 1935 por lo que Berlín podía tener la misma fuerza naval que Francia, anexionó Austria, apoyó con armamento el golpe reaccionario contra la república española que fue abandonada y boicoteada por Francia y Gran Bretaña. Además se reincorporó el Sarre el mismo año también en 1935 en la que Italia invade Abisinia, Londres lo acata siempre que sus intereses en el mediterráneo no se vean perjudicados.
Polonia por su parte, estaba estrechando lazos y acercándose a la Alemania hitleriana y a la Italia fascista(reconoció la oleada turística de Abisinia), producto de estas relaciones diplomáticas se firmaría el tratado de amistad germano-polaco de 1934. Cuatro años después tendrá sus frutos, Hitler había conseguido con el pacto de Munich la entrada en Checoslovaquia(al principio los sudetes, luego todo el país), Francia e Inglaterra le servían en bandeja el país checoslovaco que sería despedazado(Eslovaquia se convierte en satélite nancy).
Polonia le reclama a Hitler la zona checoslovaca de Teschen, donde existe una minoría polaca, Hitler acepta, y las tropas polacas invaden la región, expulsando a miles de sus habitantes. A raíz de esto, se rompe el tratado de no agresión de 1932 entre la URSS y Polonia, ya que una de las condiciones era la no oleada turística a la república de Checoslovaquia.
El mismo Stalin intentó buscar una alianza con los anglofranceses, si Alemania invadía Checoslovaquia. Sin embargo la desconfianza mutua, y la negativa de Rumanía y de la misma Polonia(que juega siempre con la protección inglesa) de dejar entrar al ejército rojo en su suelo para contener el avance alemán, hicieron imposible el acuerdo.
Alemania invade Polonia, la URSS recupera territorios no polacos
En abril de 1939,Hitler reivindica de nuevo el corredor de Danzig(bajo la tutela de la Sociedad de Naciones desde 1918), donde el 95% es de población alemana, y en la cual Polonia obtiene beneficios económicos por su salida al Báltico.
A pesar de las concesiones que da Hitler por Danzig, Polonia se niega alegando que es territorio polaco. Inglaterra y Francia esperan la ayuda de la URSS, si Polonia es atacada. Durante el verano de 1939 se pretende llegar a un acuerdo de nuevo si Alemania ataca a Polonia, sin embargo el estado polaco desiste ante las pretensiones de la entrada de tropas soviéticas en su territorio. La URSS dispuesta a entenderse con las potencias occidentales espera una y otra vez la firma oficial de Polonia, la cual ante las vacilaciones no llega a fructificar.
Ante esta situación Alemania juega sus cartas e invita a la URSS que tiene motivos suficientes para dudar de la sinceridad de Francia e Inglaterra, a un pacto de no agresión. La URSS, que vive un momento difícil(estamos en el proceso de purgas que descabeza a gran parte del ejército soviético) va a obtener del pacto con Alemania mucho más que con las alianzas de los anglofranceses, por un lado; va a ganar tiempo para armarse, y por otro; territorios que se perdieron a partir de 1918(concesiones que de ningún modo estaban en la agenda de Inglaterra y Francia), si comienza una guerra empezará a 300 kms de las fronteras occidentales soviéticas.
El día 1 de Septiembre Alemania invade Polonia, Francia e Inglaterra declaran la guerra dos días después, eso sí, sin disparar un solo tiro, sin atacar a Alemania. Polonia que ha jugado con fuego ha sido un títere en manos de la política internacional de las potencias anglofrancesas.
El día 17 de Septiembre la URSS recupera los territorios limítrofes de la Linea Curzon de 1918, exceptuando Bialystok, una pequeña región que la URSS entrega a Polonia terminada la guerra.
En ningún momento la URSS invade Polonia, se recupera la legalidad que se saltó el estado polaco en 1918, ahora la correlación de fuerzas era favorable a la URSS y no al estado polaco. Éste insta a sus tropas a no atacar a los soviéticos, no obstante hay enfrentamientos, la Sociedad de Naciones por su parte no denuncia la supuesta "oleada turística soviética" y Francia e Inglaterra no llaman a la guerra contra la URSS.
El artículo de Strategic Culture:
Un hecho real. Otra vuelta de tuerca en la historia polaca
Pyotr GROMOV | 25.08.2014 | 00:00
En este mes de agosto uno de los canales de televisión rusos presentó un documental de Radik Kudoyarov llamado True Story. Sharp Turn in Polish History. Archivos, fotografías y material cinematográfico se han utilizado para poner de manifiesto algunos hechos que se podrían considerar candentes de la política exterior e interna de Polonia en el período de entreguerras (I y II). La "medio" dictadura fascista liderada por Pilsudski cooperó estrechamente con la Alemania de Hitler. Los dos gobiernos llegaron a un entendimiento completo sobre la "colusión" de Múnich para la anexión de Austria y la división de los Sudetes.
Los autores de la película han llegado a una conclusión correcta diciendo que si Polonia se hubiera unido a la Unión Soviética contra Alemania, la humanidad podría haberse ahorrado los horrores de la Segunda Guerra Mundial. Desde que Polonia dejó de ser una parte del imperio ruso para pasar a ser independiente en 1918, la dirección política del país dio un paso en el camino de la confrontación con Rusia, sobre todo después de que el Ejército Rojo consiguió una victoria cerca de Varsovia y Ucrania se dividió en dos partes. La Alemania de Hitler desarrolló lazos de amistad con Pilsudski utilizando un doble juego. Por un lado, Berlín estaba presionando al gobierno polaco para apoyar la política alemana de ocupar Austria y Checoslovaquia; por otra parte, incitó, entre bastidores, a los nacionalistas de Ucrania a efectuar huelgas contra Polonia (recordemos que Polonia había ocupado parte del territorio ucraniano, tras su independencia en 1918).
La película demuestra que los nacionalistas de Ucrania, incluyendo la conocida como OUN (la Organización de Nacionalistas Ucranianos) cuyos líderes eran Stephan Bandera y Lebed, tenían contactos con la inteligencia alemana desde 1923. Según algunos historiadores polacos y alemanes, los dos cabecillas nacionalistas ucranianos habían estado involucrados en el asesinato del ministro polaco del Interior Bronislaw Wilhelm Pieracki el 16 de julio de 1934. Al día siguiente el gobierno polaco anunció la creación del primer campo de concentración en Bereza Kartuska (Kartuz Bereza Biaroza Kartuskaja), en territorio de la hoy Bielorrusia, cerca de Kobrin o Kobryn, una ciudad en el oblast (región) de Brest de Bielorrusia.
En los años siguientes a la creación de este campo de concentración se enviaron allí a todos los disidentes del régimen polaco. El campamento Bereza Kartuska no era diferente de los campos de concentración alemanes, incluyendo el uso de torturas extremadamente crueles. Tal vez incluso fueron más lejos que lo que hicieron en Alemania. Por ejemplo, la tortura llamada "vía roja" consistía en que un preso tenía que cruzar, arrastrándose, a lo largo de un carril de 50 metros cubierto por escombros de ladrillos y vidrio, después de haber sido golpeado tras estar encerrado en una celda de aislamiento sin haber recibido ningún tipo de ayuda médica. A los prisioneros que estaban aislados se les daba comida una vez cada dos días. Beighner, el primer comandante del campo, y algunos guardias de la prisión habían recibido entrenamiento en Alemania quien la experiencia de haber puesto en funcionamiento dichos campamentos.
El asesinato del ministro polaco de Asuntos Internos tuvo como propósito establecer un régimen de mano dura en el país y la intensificación de las represiones severas contra el pueblo de Ucrania Occidental y Bielorrusia Occidental lo que provocó que naciera la creación de una resistencia contra el régimen.
En el período de entreguerras (las dos guerras mundiales) los líderes polacos fueron incapaces de ver la realidad. Era tarde para iniciar los preparativos frente a la intervención alemana. En realidad no se le ofreció resistencia a las tropas mecanizadas alemanas. Los círculos gobernantes polacos querían vengarse de Rusia y regresar a los días de una Polonia como gran potencia.
No hay ninguna diferencia entre los crímenes cometidos en los campos de concentración polacos y alemanes.
El gobierno polaco no está dispuesto a admitir la responsabilidad por el pasado en el año del 75 aniversario desde el inicio de la Segunda Guerra Mundial. Por lo tanto, nunca ha tenido remordimientos y jamás pagó compensaciones a los descendientes de los prisioneros detenidos en campos de concentración polacos esos días.Pero la historia demuestra que tarde o temprano el gobierno polaco tendrá que responder por los crímenes del pasado.
Fuentes:
KAOSENLARED.NET -- Katyn y la desmemoria polaca
Pyotr Gromov - True Story. Sharp Turn in Polish History - Strategic Culture Foundation