Vlad_Empalador
Será en Octubre
La náutica recreativa vive su mejor verano en Galicia, con puertos a tope
ANDRÉS VÁZQUEZ / S. O.REDACCIÓN / LA VOZ
· Exclusivo suscriptores
Así estaban este fin de semana los pantalanes de uno de los puertos de Baiona M.jovenlandesaLEJO
Crecen los amarres de yates, tanto gallegos como extranjeros en tránsito
15 ago 2022. Actualizado a las 16:53 h.
Comentar · 5
Es complicado un verano mejor para los puertos deportivos gallegos. Los que no se han llenado se quedaron a las puertas, esperando a finales de agosto un último arreón. Los que sí lo hicieron, sobre todo ubicados en las Rías Baixas, es difícil que mejoren en la segunda quincena del mes, al tener ya muchos todo reservado. No les extraña, es la tendencia de estos años, así como la previsión hecha en mayo. Con vistas a septiembre, algunos náuticos ya organizan regatas para alargar la temporada, como Baiona.
De sur a norte, de norte a sur, se repiten los buenos datos. En Baiona, por comenzar en algún punto, el jefe de puerto de la marina Monte Real, Javier Álvarez, señala que desde mediados de junio estaban a un 90 % de ocupación y que en pleno agosto se cumplen las previsiones de lleno «con cifras superiores a las del 2021 y un 30 % por encima de las del 2019».
Lo mismo en la siguiente ría, la de Pontevedra, con un náutico de Combarro «lleno prácticamente todos los días», según su administrador, Rolando Andrade, quien advierte un aumento de la demanda de amarres para todo el año, «lenta pero firme».
En Sanxenxo, apuntan desde Nauta, la gestora del puerto, no hay plazas desde abril, y las estancias de los navegantes se prolongan hasta los cuatro días, frente a los dos que paraban en la esa época en el 2020 de la que yo le hablo.
Es lo contrario que señala desde Vilagarcía de Arousa José Manuel Teijido, pues afirma que los visitantes se quedan menos que antes, aunque mantiene su puerto lleno muchos más días de lo que solía.
La náutica de recreo en la costa de A Coruña: menos barcos, pero más travesías
NURIA GUILLERMO
Al otro lado de Arousa, el presidente de Marina Cabo de Cruz, Manuel Fajardo, describe la ría como «muy navegable, sin apenas masificación». Allí, en Boiro, también llenaron su lista de espera, teniendo ahora mismo libres tan solo seis amarres de los 220 con los que cuenta.
Optimismo también en A Mariña lucense y la Costa da Morte, con Viveiro recibiendo abundante tránsito y Muxía con un náutico cada vez más asentado en el mapa. «Temos xente rumbo ao sur, e tamén moito profesional europeo que vai entregar barcos ao Mediterráneo», cuenta Marcos Trillo, su gerente.
Un agosto de esplendor náutico en la ría de Pontevedra: más veleros y más grandes
MARCOS GAGO
De todas las latitudes
Precisamente, además de los profesionales que destacan en Muxía, arriban a los puertos gallegos muchos europeos en ruta, destacando franceses, irlandeses e ingleses. Eso a nivel general, porque también se pueden hallar alemanes en Viveiro, holandeses y daneses en Sanxenxo y hasta suizos en Vilagarcía, un país sin siquiera salida al mar.
No solo ellos engrosan las reservas, también crece el tráfico entre rías. José Manuel Teijido, en Vilagarcía, expone que atracó en sus pantalanes mucha gente de Noia o de Baiona. Precisamente sobre este último, su jefe de puerto Javier Álvarez constata la tendencia, a la que suma los vecinos asturianos y portugueses.
Los náuticos gallegos se reponen de la esa época en el 2020 de la que yo le hablo propulsados por el turismo
MIRIAM GARCÍA ROCA / S. S.
Casi 11.000 plazas de amarre en 41 dársenas, desde Ribadeo hasta Baiona
Contando solo los puertos deportivos preparados para acoger embarcaciones en tránsito, los 41 que salpican la costa gallega desde Ribadeo hasta Baiona disponen de cerca de 11.000 plazas de amarre, según la información de la Guía Náutica de Galicia que puede consultarse en la web de Portos de Galicia.
Dividiendo los casi 1.500 kilómetros del litoral gallego por zonas, en A Mariña lucense dos náuticos suman 875 amarres. En las rías de Ferrol y A Coruña los navegantes pueden elegir entre diez puertos, con un total de 3.020.
Se ubican en la Costa da Morte otros dos, con 313 puntos de atraque. También hay dos en la ría de Muros-Noia, con 512 plazas para yates.
Los ocho de la ría de Arousa disponen de 1.756 amarres. Son siete en la ría de Pontevedra, con 1.338. Hasta 2.322 embarcaciones caben en los ocho de la ría de Vigo. Y en los dos náuticos de Baiona pueden atracar 832.
A pesar de las cifras, la realidad actual evidencia que podrían ser mayores y aún así ocuparse. Galicia está en el mapa, y lo notan en puertos como Boiro, en la Marina de Cabo de Cruz. Allí, su presidente Manuel Fajardo afirma que una solicitud de 20 plazas en un día «xa nos satura de todo, e xorden cada vez máis».
ANDRÉS VÁZQUEZ / S. O.REDACCIÓN / LA VOZ
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Así estaban este fin de semana los pantalanes de uno de los puertos de Baiona M.jovenlandesaLEJO
Crecen los amarres de yates, tanto gallegos como extranjeros en tránsito
15 ago 2022. Actualizado a las 16:53 h.
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Es complicado un verano mejor para los puertos deportivos gallegos. Los que no se han llenado se quedaron a las puertas, esperando a finales de agosto un último arreón. Los que sí lo hicieron, sobre todo ubicados en las Rías Baixas, es difícil que mejoren en la segunda quincena del mes, al tener ya muchos todo reservado. No les extraña, es la tendencia de estos años, así como la previsión hecha en mayo. Con vistas a septiembre, algunos náuticos ya organizan regatas para alargar la temporada, como Baiona.
De sur a norte, de norte a sur, se repiten los buenos datos. En Baiona, por comenzar en algún punto, el jefe de puerto de la marina Monte Real, Javier Álvarez, señala que desde mediados de junio estaban a un 90 % de ocupación y que en pleno agosto se cumplen las previsiones de lleno «con cifras superiores a las del 2021 y un 30 % por encima de las del 2019».
Lo mismo en la siguiente ría, la de Pontevedra, con un náutico de Combarro «lleno prácticamente todos los días», según su administrador, Rolando Andrade, quien advierte un aumento de la demanda de amarres para todo el año, «lenta pero firme».
En Sanxenxo, apuntan desde Nauta, la gestora del puerto, no hay plazas desde abril, y las estancias de los navegantes se prolongan hasta los cuatro días, frente a los dos que paraban en la esa época en el 2020 de la que yo le hablo.
Es lo contrario que señala desde Vilagarcía de Arousa José Manuel Teijido, pues afirma que los visitantes se quedan menos que antes, aunque mantiene su puerto lleno muchos más días de lo que solía.
La náutica de recreo en la costa de A Coruña: menos barcos, pero más travesías
NURIA GUILLERMO
Al otro lado de Arousa, el presidente de Marina Cabo de Cruz, Manuel Fajardo, describe la ría como «muy navegable, sin apenas masificación». Allí, en Boiro, también llenaron su lista de espera, teniendo ahora mismo libres tan solo seis amarres de los 220 con los que cuenta.
Optimismo también en A Mariña lucense y la Costa da Morte, con Viveiro recibiendo abundante tránsito y Muxía con un náutico cada vez más asentado en el mapa. «Temos xente rumbo ao sur, e tamén moito profesional europeo que vai entregar barcos ao Mediterráneo», cuenta Marcos Trillo, su gerente.
Un agosto de esplendor náutico en la ría de Pontevedra: más veleros y más grandes
MARCOS GAGO
De todas las latitudes
Precisamente, además de los profesionales que destacan en Muxía, arriban a los puertos gallegos muchos europeos en ruta, destacando franceses, irlandeses e ingleses. Eso a nivel general, porque también se pueden hallar alemanes en Viveiro, holandeses y daneses en Sanxenxo y hasta suizos en Vilagarcía, un país sin siquiera salida al mar.
No solo ellos engrosan las reservas, también crece el tráfico entre rías. José Manuel Teijido, en Vilagarcía, expone que atracó en sus pantalanes mucha gente de Noia o de Baiona. Precisamente sobre este último, su jefe de puerto Javier Álvarez constata la tendencia, a la que suma los vecinos asturianos y portugueses.
Los náuticos gallegos se reponen de la esa época en el 2020 de la que yo le hablo propulsados por el turismo
MIRIAM GARCÍA ROCA / S. S.
Casi 11.000 plazas de amarre en 41 dársenas, desde Ribadeo hasta Baiona
Contando solo los puertos deportivos preparados para acoger embarcaciones en tránsito, los 41 que salpican la costa gallega desde Ribadeo hasta Baiona disponen de cerca de 11.000 plazas de amarre, según la información de la Guía Náutica de Galicia que puede consultarse en la web de Portos de Galicia.
Dividiendo los casi 1.500 kilómetros del litoral gallego por zonas, en A Mariña lucense dos náuticos suman 875 amarres. En las rías de Ferrol y A Coruña los navegantes pueden elegir entre diez puertos, con un total de 3.020.
Se ubican en la Costa da Morte otros dos, con 313 puntos de atraque. También hay dos en la ría de Muros-Noia, con 512 plazas para yates.
Los ocho de la ría de Arousa disponen de 1.756 amarres. Son siete en la ría de Pontevedra, con 1.338. Hasta 2.322 embarcaciones caben en los ocho de la ría de Vigo. Y en los dos náuticos de Baiona pueden atracar 832.
A pesar de las cifras, la realidad actual evidencia que podrían ser mayores y aún así ocuparse. Galicia está en el mapa, y lo notan en puertos como Boiro, en la Marina de Cabo de Cruz. Allí, su presidente Manuel Fajardo afirma que una solicitud de 20 plazas en un día «xa nos satura de todo, e xorden cada vez máis».
