Kadashman-Enlil I
Madmaxista
La "Masacre de Badajoz" se perpetró tras la toma de Badajoz por los sublevados contra el gobierno legítimo de la República por tropas comandadas por Juan Yagüe, "el carnicero de Badajoz". Los prisioneros fueron ametrallados en la plaza de toros, tras todo un día de matanzas indiscriminadas efectuadas por soldados marroquíes.
Lógicamente, la Fundación Nacional Francisco Franco (que debe ser de izquierdas, porque aquí los únicos que se acuerdan de Franco son los gente de izquierdas que siempre sacan el comodín) lo niega. Para eso están y para eso se la subvenciona.
Arranca fuerte, acaba de manera PATÉTICA.
Arranca advirtiendo que lo de las "matanzas" (así, entrecomillado) fue un INVENTO de Whitaker.
Pero luego el artículo no tiene pérdida. Es penoso.
El escritor reconoce la ayuda prestada por el régimen nancy en la Guerra Civil y el envío de la tristemente célebre División Azul como agradecimiento, que Yagüe era filonazi, y supongo que le hubiese gustado que quienes escribían sobre el particular deberían sentir misericordia por los amigos de Hitler.
Pero sigue.
No niega (porque no puede) la inmunda frase de Yagüe, el Carnicero.
"Qué esperaba usted? ¿Que iba a llevar 4.000 prisioneros gente de izquierdas conmigo, teniendo mi columna que avanzar contrarreloj? ¿O iba a soltarlos en la retaguardia y dejar que Badajoz fuera roja otra vez?"
"Cita sacada de contexto", "la trasladaron literalmente", "dieron pábulo".
Jamás se ha visto manera más penosa de excusar a un genocida.
Se queja amargamente de los métodos de Whitaker para obtener información.
Afea que no escriba sólo de lo que ha visto, como hizo Pío Moa (ironic mode off), sino que cite cosas que le confió un agente especial nancy en España, que no sabría de qué hablaría.
Pero luego... atención. Refuta a Whitaker ¡con un papel "hallado por casualidad en una librería de viejo!!!
No hay nada que confirme de mejor manera una masacre franquista como la de Badajoz, que leer a un puñetero franquista intentando escribir un artículo de pago sin poder disimular la vergüenza con la que lo ha hecho.