La Guardia Civil identifica 30 direcciones pertenecientes al exchanger Coinbase, a las que se enviaron supuestamente 45,68 bitcoins entre mayo de 2020 y septiembre de 2021. Y también 11 direcciones del exchanger Binance, que arrojarían un balance positivo de 242,4 bitcoins. Por ello, el instituto armado pidió dictar una comisión rogatoria internacional a ambas “casas de cambio” virtuales para que se identificara a los usuarios de dichas cuentas y se proceda a bloquear los fondos que tengan. Una medida que respalda la Fiscalía.
De hecho, el ministerio público apremió al juzgado de Huelva a adoptar esta iniciativa ante la posibilidad de que los fondos localizados se acaben esfumando de nuevo. “El elemento más decisivo de la urgencia de su intervención es el de la extrema facilidad que los autores tendrían para hacer que esos activos se desvanezcan con un par de claves que se encuentran en su poder y algunas pulsaciones en la pantalla de un teléfono móvil”, argumenta el ministerio público: “tras*ferir esos activos a otras cuentas o carteras virtuales (wallets) resulta extremadamente sencillo, al tiempo que relocalizarlos se convierte en un juego de azar imposible”.