BeninExpress
Madmaxista
Perdón por el off topic, y el 'semi-tocho' ya sé que aquí a la mayoría les cuesta horrores leer más de dos líneas seguidas y que además sois muy fans de comentar que los ruskis tienen un pésimo material bélico, que apenas están avanzando y que Zelensky es poco menos que el General Patton, pero quería compartir con vosotros algo que que mí me ha llamado la atención desde el primer día.
Cualquiera puede hacer la prueba..
Entras en los estados de WhatsApp o en cualquier cuenta de Twitter y toda la charía hispanistaní no solo ha abrazado súbitamente el relato otanista (los rusos son malos) sino también la estética nacionalista ucraniana.
Todo, absolutamente todo está lleno de banderas ucranianas y corazones azules y amarillos. El nivel máximo de soplapollismo se alcanza cuando a las banderitas y/o corazoncitos se añade el rancísimo 'slava Ukraïna'. Que más o menos vendría a ser el equivalente a importarte un huevo el fútbol pero de la noche a la mañana ponerte en el perfil una bandera del Madrid y un lema de los Ultra Sur porque a los pobrecitos no les dejan entrar en el Bernabéu..
Da entre grima y vergüenza ajena el tema por varios motivos pero el que más me sorprende es el cambio de opinión que han sufrido éstos seres con rajitas entre las piernas, y es que esas mismas que hoy se declaran fervientes defensoras de los ucranianos y que están dispuestísimas a traerse autobuses enteros de refugiados, hasta antes de ayer veían a un Volodymyr random en su barrio y poco menos que se cambiaban de acera.
"Ayyy no, si es que parecen los malos de una peli de Nicolas Cage.. y además ni sonríen ni nada".
Pero bueeeno, no os vayáis a creer que es algo nuevo o que éste repentino interés por Ucrania tiene algo de lógica, éstas mismas charos que hoy son proucranianas y mucho ucranianas son las que hasta hace poco tenían en su Facebook banderas de Canarias y un volcán.
Se llama paripé y es la palabra que mejor va a definir a este puñetero siglo XXI.
Cualquiera puede hacer la prueba..
Entras en los estados de WhatsApp o en cualquier cuenta de Twitter y toda la charía hispanistaní no solo ha abrazado súbitamente el relato otanista (los rusos son malos) sino también la estética nacionalista ucraniana.
Todo, absolutamente todo está lleno de banderas ucranianas y corazones azules y amarillos. El nivel máximo de soplapollismo se alcanza cuando a las banderitas y/o corazoncitos se añade el rancísimo 'slava Ukraïna'. Que más o menos vendría a ser el equivalente a importarte un huevo el fútbol pero de la noche a la mañana ponerte en el perfil una bandera del Madrid y un lema de los Ultra Sur porque a los pobrecitos no les dejan entrar en el Bernabéu..
Da entre grima y vergüenza ajena el tema por varios motivos pero el que más me sorprende es el cambio de opinión que han sufrido éstos seres con rajitas entre las piernas, y es que esas mismas que hoy se declaran fervientes defensoras de los ucranianos y que están dispuestísimas a traerse autobuses enteros de refugiados, hasta antes de ayer veían a un Volodymyr random en su barrio y poco menos que se cambiaban de acera.
"Ayyy no, si es que parecen los malos de una peli de Nicolas Cage.. y además ni sonríen ni nada".
Pero bueeeno, no os vayáis a creer que es algo nuevo o que éste repentino interés por Ucrania tiene algo de lógica, éstas mismas charos que hoy son proucranianas y mucho ucranianas son las que hasta hace poco tenían en su Facebook banderas de Canarias y un volcán.
Se llama paripé y es la palabra que mejor va a definir a este puñetero siglo XXI.
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