castguer
Madmaxista
Esclavitud es la situación en la cual un individuo está bajo el dominio de otro, perdiendo la capacidad de disponer libremente de sí mismo.
La esclavitud requiere de hombres que no piensen y a los que no caracterice ningún signo identitario, por ejemplo, nacional (Espartaco, el célebre rebelde, era griego). En consecuencia, se fomenta desde el Estado (instrumento del Gran Hermano y la Gran Empresa) el perfecto inane integral, carente de criterio, de conocimientos y sed de ellos, así como incluso de dignidad propia. La escuela es el punto de partida de toda esta operación de ingeniería socio-política, en tanto que deben extirparse de raíz las pasiones humanas, aquello que justamente nos caracteriza como hombres. Las pasiones, incluso las malas pasiones, ¡benditas sean también!, son la única garantía de nuestra individualidad y el mejor vehículo de comunicación con los demás miembros de la especie: sin ellas, la relación con los demás “no es necesaria”.
El Gran Poder, nutrido de múltiples gentes, hoy más que nunca, persigue la destrucción del individualismo y las pasiones, con el plan de que el rebaño se someta a la producción en masa, y lo haga felizmente gracias a diversiones pasajeras (incluidas las relaciones sensuales, estando ya mal vista la fidelidad y el amor intenso).
Demos
La esclavitud requiere de hombres que no piensen y a los que no caracterice ningún signo identitario, por ejemplo, nacional (Espartaco, el célebre rebelde, era griego). En consecuencia, se fomenta desde el Estado (instrumento del Gran Hermano y la Gran Empresa) el perfecto inane integral, carente de criterio, de conocimientos y sed de ellos, así como incluso de dignidad propia. La escuela es el punto de partida de toda esta operación de ingeniería socio-política, en tanto que deben extirparse de raíz las pasiones humanas, aquello que justamente nos caracteriza como hombres. Las pasiones, incluso las malas pasiones, ¡benditas sean también!, son la única garantía de nuestra individualidad y el mejor vehículo de comunicación con los demás miembros de la especie: sin ellas, la relación con los demás “no es necesaria”.
El Gran Poder, nutrido de múltiples gentes, hoy más que nunca, persigue la destrucción del individualismo y las pasiones, con el plan de que el rebaño se someta a la producción en masa, y lo haga felizmente gracias a diversiones pasajeras (incluidas las relaciones sensuales, estando ya mal vista la fidelidad y el amor intenso).
Demos