JoséBatallas
Madmaxista
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Ya se escuchan los galopes... cabalga Santi cabalga y Cierra España!
Hay, camaradas, amigos y españoles, una tesis y una mística en el que hacer política. Los que creen que la política es un arte menor, y que no es más que la prosa, por otra parte necesaria de cada día, están profundamente equivocados, y llevan a eso que llaman politica al mas tremendo y rotundo y espectacular de los fracasos.
Existe una tesis y existe una mística, porque existe lo que se llama en filosofía un finis operis y un finis operantis. Yo se y vosotros sabéis también que el finis operis, el fin de la obra política, consiste en gobernar al servicio de la nación, en el bien comun de los españoles, y en una administración agil y honesta, y en lo posible barata, que mejore las condiciones de vida del pueblo.
Pero si este es el fin de la obra, para que el fin de la obra pueda cumplirse es un requisito indispensable y necesario el finis operandis. El fin del que obra. El fin, el propósito, el designio y la meta y el objetivo de todos aquellos que han asumido la responsabilidad del poder político, que consiste en edificar una comunidad política con un sentido trascendente, en crear y construir un estado que no sea solamente un estado formal de derecho, un estado de razón, sino que sea un estado ético, impregnado por un sentido religioso de la vida.
Y para conseguir esto es indispensable esa metanoia griega, esa conversio interior, esa iluminación del espíritu, esa sembradura fecunda de la semilla del patriotismo. Para eso hace falta un tránsito personal y ésta es la suprema apelación, la mas seria y definitiva y urgente y apasionada que yo os hago. Hace falta un tránsito, tenemos que tras*itar por un camino difícil y estrecho y el tránsito consiste en que pasemos de la comodidad a la austeridad, de un talante burgués a un clima de heroísmo, de la indiferencia al apasionamiento; porque solo cuando un pueblo reúne las guías de capitanes que son a la vez heroes, son a la vez apasionados y son a la vez sinceros, solamente en ese instante en que se juntan la pasión, la entrega generosa, y el heroísmo, solamente entonces se construye ese diamante puro, macizo y bienlabrado contra el cual se estrellan las fuerzas de la masonería, del capitalismo internacional, del marxismo y de los viejos y eternos enemigos de España y de nuestra civilización.
