Norfolk, Virginia - Un Norview Escuela Secundaria 10mo grado inteligente y talentoso admitido hoy en el tribunal que mató a sus padres a la semana antes de Navidad porque estaba cansado de sus castigos aparentemente de rutina ", como mi padre quitando mi iPod y esas cosas."
Vincent Parker atacó a su progenitora Carol mientras salía de un cuarto de baño arriba en su casa Bland Street. Él admitió a la policía que roció a su progenitora con gas pimienta, la apuñaló en el ojo, y luego la golpeó en la cara y la cabeza con un bate de béisbol y una barra de hierro "hasta que ella dejó de respirar." Un médico forense identificó 25 smashes y pinchazos separados el cuello, la cara y la cabeza de Carol Parker.
Cuando el padre de Vincent Wayne Parker llegó a casa, Vincent le golpeó con una barra de hierro y le apuñaló varias veces. Wayne Parker vivió lo suficiente para decirle a la policía lo que pasó. Después de la primera tratando de decir que su padre era el agresor, Vincent admitió que mató a sus padres. Vincent era único hijo de Carol y Wayne.
"Sólo recuerdo enojarse", dijo a los investigadores. "Todo es de mi papá. Todo esto como mi padre quitando mi iPod y esas cosas ".
Esos detalles y declaraciones fueron incluidas en "estipulación de los hechos" de la fiscalía presentó a un juez el miércoles. Vincent, de 16 años, se declaró culpable de dos cargos de asesinato en segundo grado en un tribunal de adultos. Él va a regresar a la Corte de Circuito de Norfolk, en septiembre para conocer su sentencia.
¿Por qué un estudiante de cuadro de honor sin antecedentes penales rompió con tanta violencia sobre tales castigos benignos es un misterio para su familia.
"Él es un joven inteligente", dijo su abuelo, Allen Taylor, padre de Carol Taylor. "Él es inteligente en la escuela. No sé lo que pasó ".
El abogado defensor Emily Munn dijo al juez una evaluación psiquiátrica mostró Vincent estaba cuerdo e inteligente. A pesar de que Vicente está siendo condenado como adulto, Munn dijo al juez que va a pedir al tribunal que considere dejar le sirven al menos parte de su condena en un centro de menores. Podría enfrentar décadas en prisión si él está condenado a la máxima de ambos asesinatos. Su abuelo espera un castigo mucho más corto.
"Quiero que él consiga algún tipo de asesoramiento", dijo. "Le ayuda a crecer y ser un hombre comprensivo. Sea arrepentido de lo que hizo. Le dije que pedirle a Dios que lo perdone por lo que hizo ".
Cuando se le preguntó si él perdonó a su nieto, Taylor dijo: "Bueno, sí, lo hice. Porque si yo no lo perdono, ¿quién lo hará?
"Tuvimos que darle a Dios", dijo. "Él es el único que nos puede ayudar ahora."
