De la Gloria a la Sombra
Hubo un tiempo de luz dorada,
donde el sol besaba cada flor,
y la risa, como cascada,
llenaba el aire de esplendor.
Los héroes, con espadas de fuego,
forjaban leyendas sin igual,
y el amor, en su dulce juego,
tejía sueños sin final.
Mas el tiempo, cruel y voraz,
como río que todo arrastra,
llevó consigo la paz,
dejando solo sombra y ceniza.
Ahora el sol se esconde, temeroso,
y la noche, eterna, se enseñorea,
el héroe yace, silencioso,
y el amor llora, desconsolado.
¿Dónde quedó la luz brillante?
¿Dónde el eco de la canción?
Solo queda el viento silbante,
y el recuerdo de lo que se perdió.
Pero en la oscuridad, una chispa,
una llama que se niega a morir,
la esperanza, tenue y terca,
que nos recuerda que aún podemos vivir.
Aunque la sombra nos envuelva,
y el frío nos hiele el corazón,
la luz volverá, de algún modo,
a traernos un nuevo amanecer.