Max powell
Himbersor
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Por dar contexto, se abandonó un standard donde mas o menos todo funcionaba a nivel económico de manera estable, para implementar una aberración basada exclusivamente en la confianza y el dominio militar. (Los motivos son obvios y discutibles y darían para un hilo propio).
Pero estamos aquí para vislumbrar el posible futuro, o al menos, acercarnos a una futura realidad.
El paradigma ha cambiado, esa promesa de pago basada en poder militar y respaldada por la obligación de hacer tras*acciones en la moneda hegemónica para conseguir la principal materia prima mundial, ha cambiado. (Petróleo)
Ya no sólo por que Arabia, se haya retirado de dicho acuerdo, que ya de por sí es un evento para la historia, si no que los países productores tanto de materias primas como industriales, con el tiempo, dejarán de aceptar la moneda hegemónica, que les compra el producto y les traslada la inflación inherente de la impresión unilateral y descontrolada del emisor hegemónico.
En resumen sin entrar en bonos, bolsa y demás distracciones, todas en poder de los mismos. Los países dueños de bienes materiales reales, se están cansando del timo que supone vender objetos reales a cambio de promesas de pago que no valen nada. Todo esto me recuerda a vender espejos y bisutería a cambio de oro a indígenas y en la actualidad estos indígenas que suponen el 70% de la población mundial, se están empezando a dar cuenta del camelo. (Conste que lo considero un trato legal mientras ambas partes lo consideren justo, pero como todo en la vida, los tratos llegan a su fin y hay que pasar página).
El problema es que el dueño actual de la moneda de reserva, no quiere desprenderse de su poder hegemónico, ya que supondría tanto el colapso de su propia nación, como el fin de su hegemonía mundial. (Como sería lógico).
¿Y como se resuelven históricamente estas situaciones?, pues en guerras, las guerras mantienen a raya rivales y aspirantes al título de líder mundial. Y vamos directos hacia una, donde nuestro continente ha sido ya sacrificado en aras de conseguir mas tiempo, vender mas armamento y en el futuro dar lugar a una reconstrucción. (Todo esto beneficia al dueño de la moneda de reserva mundial que vive en una "isla"). Pero lo novedoso de la situación actual, es que los países quieren dejar de vender productos reales, para adquirir una moneda descontrolada que no vale nada, respaldada en nada y que mide indirectamente el valor propio de sus propias monedas locales, basándose en pura fantasía.
Es obvio, que el cambio de moneda de reserva no va a ser inmediato, pero ya ha comenzado, la ventana de overton se movió hace tiempo y en estos últimos años parece una cosa mas que hecha por los países mas interesados en intercambiar bienes reales por una moneda real.
En resumen, estamos ante una situación donde un sistema económico moribundo se enfrenta a un cambio de paradigma y los grandes poderes no van a ceder su parcela de poder sin dar batalla y ese campo de batalla es por desgracia Europa- Oriente medio- Pacífico.
Saludos.
Pero estamos aquí para vislumbrar el posible futuro, o al menos, acercarnos a una futura realidad.
El paradigma ha cambiado, esa promesa de pago basada en poder militar y respaldada por la obligación de hacer tras*acciones en la moneda hegemónica para conseguir la principal materia prima mundial, ha cambiado. (Petróleo)
Ya no sólo por que Arabia, se haya retirado de dicho acuerdo, que ya de por sí es un evento para la historia, si no que los países productores tanto de materias primas como industriales, con el tiempo, dejarán de aceptar la moneda hegemónica, que les compra el producto y les traslada la inflación inherente de la impresión unilateral y descontrolada del emisor hegemónico.
En resumen sin entrar en bonos, bolsa y demás distracciones, todas en poder de los mismos. Los países dueños de bienes materiales reales, se están cansando del timo que supone vender objetos reales a cambio de promesas de pago que no valen nada. Todo esto me recuerda a vender espejos y bisutería a cambio de oro a indígenas y en la actualidad estos indígenas que suponen el 70% de la población mundial, se están empezando a dar cuenta del camelo. (Conste que lo considero un trato legal mientras ambas partes lo consideren justo, pero como todo en la vida, los tratos llegan a su fin y hay que pasar página).
El problema es que el dueño actual de la moneda de reserva, no quiere desprenderse de su poder hegemónico, ya que supondría tanto el colapso de su propia nación, como el fin de su hegemonía mundial. (Como sería lógico).
¿Y como se resuelven históricamente estas situaciones?, pues en guerras, las guerras mantienen a raya rivales y aspirantes al título de líder mundial. Y vamos directos hacia una, donde nuestro continente ha sido ya sacrificado en aras de conseguir mas tiempo, vender mas armamento y en el futuro dar lugar a una reconstrucción. (Todo esto beneficia al dueño de la moneda de reserva mundial que vive en una "isla"). Pero lo novedoso de la situación actual, es que los países quieren dejar de vender productos reales, para adquirir una moneda descontrolada que no vale nada, respaldada en nada y que mide indirectamente el valor propio de sus propias monedas locales, basándose en pura fantasía.
Es obvio, que el cambio de moneda de reserva no va a ser inmediato, pero ya ha comenzado, la ventana de overton se movió hace tiempo y en estos últimos años parece una cosa mas que hecha por los países mas interesados en intercambiar bienes reales por una moneda real.
En resumen, estamos ante una situación donde un sistema económico moribundo se enfrenta a un cambio de paradigma y los grandes poderes no van a ceder su parcela de poder sin dar batalla y ese campo de batalla es por desgracia Europa- Oriente medio- Pacífico.
Saludos.
