MonteKarmelo
Madmaxista
- Desde
- 28 Jun 2006
- Mensajes
- 7.055
- Reputación
- 12.195
Eurodiputados alemanes piden sanciones para Guardans por «utilizar» los ataques de Bombay
Ignasi Guardans i Cambó es uno de los vicepresidentes de la Comisión de Comercio Exterior del Parlamento Europeo y en calidad de tal dirigía la misión que efectuaba una visita oficial a la India y que fue sorprendida por los ataques terroristas de Bombay. Dos de sus colegas, los diputados alemanes Erika Mann (socialista) y Daniel Caspary (del Grupo Popular) aprovecharon una entrevista en la noche del lunes en un programa de entrevistas de la primera cadena de la televisión pública para calificar el comportamiento de Guardans durante los sucesos como «escandaloso», porque «estaba ocupado solamente de utilizar la situación para garantizarse su presencia en las listas» de las próximas elecciones. El popular Caspary llegó a decir que la actitud del convergente debería ser objeto de un análisis por parte de la Cámara para «aplicar las consecuencias adecuadas».
Los diputados alemanes llegaron a decir que Guardans «sólo se ocupaba de hablar con los medios de comunicación españoles» a pesar de que había diputados en el interior del hotel Taj Mahal, que estaba en manos de los terroristas. Los dos diputados relataron los detalles de su experiencia personal en los momentos más dramáticos y condenaron el papel del eurodiputado español, que presidía la delegación y «sólo se ocupaba de aprovecharla para garantizar su reelección».
Mientras la delegación estuvo en la capital comercial de la India, en efecto, Guardans habló por numerosas emisoras de radio y televisión españolas e internacionales, gracias a que se encontraba en un restaurante, porque cuando se produjo el ataque terrorista no se encontraba en el hotel como otros eurodiputados. Los legisladores alemanes le reprochan que estuviera pensando más en su propio beneficio político que en el interés de la delegación. Guardans se había quejado de que el cónsul alemán en Bombay se hubiera ocupado solamente de los miembros alemanes de la delegación y no de los demás. Sin embargo, Guardans ha alabado el papel del cónsul español. El eurodiputado catalán había criticado a Esperanza Aguirre por regresar a toda prisa a España después de escapar del tiroteo en el hotel donde se alojaba y también se ha quejado de la falta de una estrategia europea conjunta.
Mal negocio
Si los diputados alemanes tienen razón, la operación relativa a su candidatura no le ha salido muy rentable al convergente, según explicó ayer él mismo. Incluso si su actitud no llegase a tener consecuencias en la cámara las posibilidades de que vuelva a ser cabeza de lista no están garantizadas. Guardans estuvo el lunes en Barcelona y almorzó con Artur Mas, a quien le expuso su disposición para volver a presentarse como candidato a la reelección en el Parlamento Europeo. Sin embargo, al parecer Mas le informó que en CDC tienen en mente «otros perfiles». Ayer, en Bruselas, declaró en términos más modestos que por ahora «solamente soy candidato a ser candidato».
Ignasi Guardans i Cambó es uno de los vicepresidentes de la Comisión de Comercio Exterior del Parlamento Europeo y en calidad de tal dirigía la misión que efectuaba una visita oficial a la India y que fue sorprendida por los ataques terroristas de Bombay. Dos de sus colegas, los diputados alemanes Erika Mann (socialista) y Daniel Caspary (del Grupo Popular) aprovecharon una entrevista en la noche del lunes en un programa de entrevistas de la primera cadena de la televisión pública para calificar el comportamiento de Guardans durante los sucesos como «escandaloso», porque «estaba ocupado solamente de utilizar la situación para garantizarse su presencia en las listas» de las próximas elecciones. El popular Caspary llegó a decir que la actitud del convergente debería ser objeto de un análisis por parte de la Cámara para «aplicar las consecuencias adecuadas».
Los diputados alemanes llegaron a decir que Guardans «sólo se ocupaba de hablar con los medios de comunicación españoles» a pesar de que había diputados en el interior del hotel Taj Mahal, que estaba en manos de los terroristas. Los dos diputados relataron los detalles de su experiencia personal en los momentos más dramáticos y condenaron el papel del eurodiputado español, que presidía la delegación y «sólo se ocupaba de aprovecharla para garantizar su reelección».
Mientras la delegación estuvo en la capital comercial de la India, en efecto, Guardans habló por numerosas emisoras de radio y televisión españolas e internacionales, gracias a que se encontraba en un restaurante, porque cuando se produjo el ataque terrorista no se encontraba en el hotel como otros eurodiputados. Los legisladores alemanes le reprochan que estuviera pensando más en su propio beneficio político que en el interés de la delegación. Guardans se había quejado de que el cónsul alemán en Bombay se hubiera ocupado solamente de los miembros alemanes de la delegación y no de los demás. Sin embargo, Guardans ha alabado el papel del cónsul español. El eurodiputado catalán había criticado a Esperanza Aguirre por regresar a toda prisa a España después de escapar del tiroteo en el hotel donde se alojaba y también se ha quejado de la falta de una estrategia europea conjunta.
Mal negocio
Si los diputados alemanes tienen razón, la operación relativa a su candidatura no le ha salido muy rentable al convergente, según explicó ayer él mismo. Incluso si su actitud no llegase a tener consecuencias en la cámara las posibilidades de que vuelva a ser cabeza de lista no están garantizadas. Guardans estuvo el lunes en Barcelona y almorzó con Artur Mas, a quien le expuso su disposición para volver a presentarse como candidato a la reelección en el Parlamento Europeo. Sin embargo, al parecer Mas le informó que en CDC tienen en mente «otros perfiles». Ayer, en Bruselas, declaró en términos más modestos que por ahora «solamente soy candidato a ser candidato».