Segismunda
Reina de los Trolls
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ANTECEDENTES:
Durante unas vacaciones en Canarias, Anabel Pantoja conoce a Omar Sánchez, un instructor de surf (eufemismo de 'ama-papos estivales'). Corre el año 2018 y la tertuliana con nombre de muñeca posesa cae rendida ante las pintacas de este jovenlandés cani (ver imagen inferior). Un año después se instala en casa del canario, le cambia las cortinas, le tapiza los sofás, le coloca la tarima flotante que vio en casa de su amiga Jessi... y se promete. Ella tiene 32 años y el 28, pero están listos para formar una bella familia.
SE ACABÓ EL JIJIJÍ (PORQUE YO ME LO PROPUSE Y SUFRÍ)
Cuatro meses después de la boda, Anabel decide que Omar ya no la hace reír y da por finiquitado el matrimonio. Es entonces cuando se desatan los rumores de que la tertuliana le ha hecho la liana a su todavía marido. Sin embargo, el motivo real de la ruptura es que Anabel, mujer de shishi inquieto, no quiere ser progenitora tan joven, mientras Omar ya está preparado para plantarle la semillita de papá en el chumino. La prima de España tiene muy clara su ruptura y disfruta de un empoderamiento de magnitud Edurne. Es entonces cuando Telecinco llama a filas a Omar Sánchez: será concursante en Supervivientes 2022.
ANABEL PANTOJA EJECUTA LA DES-LIANA
Un escalofrío recorre las gigantescas berzas de Ana Isabel Pantoja Bernal (ver imagen inferior). De pronto, ese man olvidado se convierte en un posicionadito y una lluvia torrencial de jujus se dirige hacia su miembro viril con velocidad de crucero. Se hace patente para ella la posibilidad de perderlo y, presa de la angustia, le pide que la espere. Esto, en el argot de los realities, significa que NO use a media docena de influencers como si fuesen tajalápices. Quizás no quiera a Omar para nada, eso ya lo decidirá tras el concurso, pero de momento ha frenado en seco a su todavía marido, para que no se agarre a ninguna liana y no abandone la Santa Unión que aún no ha sido revocada por el Vaticano ni por una Charo de un juzgado de Sevilla.
Y todo esto lo ha hecho en directo para toda España, que es como se hacen ahora las cosas. Con afán pedagógico ¿A vosotros qué os parece?
Durante unas vacaciones en Canarias, Anabel Pantoja conoce a Omar Sánchez, un instructor de surf (eufemismo de 'ama-papos estivales'). Corre el año 2018 y la tertuliana con nombre de muñeca posesa cae rendida ante las pintacas de este jovenlandés cani (ver imagen inferior). Un año después se instala en casa del canario, le cambia las cortinas, le tapiza los sofás, le coloca la tarima flotante que vio en casa de su amiga Jessi... y se promete. Ella tiene 32 años y el 28, pero están listos para formar una bella familia.
SE ACABÓ EL JIJIJÍ (PORQUE YO ME LO PROPUSE Y SUFRÍ)
Cuatro meses después de la boda, Anabel decide que Omar ya no la hace reír y da por finiquitado el matrimonio. Es entonces cuando se desatan los rumores de que la tertuliana le ha hecho la liana a su todavía marido. Sin embargo, el motivo real de la ruptura es que Anabel, mujer de shishi inquieto, no quiere ser progenitora tan joven, mientras Omar ya está preparado para plantarle la semillita de papá en el chumino. La prima de España tiene muy clara su ruptura y disfruta de un empoderamiento de magnitud Edurne. Es entonces cuando Telecinco llama a filas a Omar Sánchez: será concursante en Supervivientes 2022.
ANABEL PANTOJA EJECUTA LA DES-LIANA
Un escalofrío recorre las gigantescas berzas de Ana Isabel Pantoja Bernal (ver imagen inferior). De pronto, ese man olvidado se convierte en un posicionadito y una lluvia torrencial de jujus se dirige hacia su miembro viril con velocidad de crucero. Se hace patente para ella la posibilidad de perderlo y, presa de la angustia, le pide que la espere. Esto, en el argot de los realities, significa que NO use a media docena de influencers como si fuesen tajalápices. Quizás no quiera a Omar para nada, eso ya lo decidirá tras el concurso, pero de momento ha frenado en seco a su todavía marido, para que no se agarre a ninguna liana y no abandone la Santa Unión que aún no ha sido revocada por el Vaticano ni por una Charo de un juzgado de Sevilla.
Y todo esto lo ha hecho en directo para toda España, que es como se hacen ahora las cosas. Con afán pedagógico ¿A vosotros qué os parece?
