A estas alturas de la película creo que queda patente que para el ciudadano de a pie es más peligrosa si cabe la delincuencia legalizada que la no legalizada.
Todos conocemos lo que se puede esperar de ladrones, forzadores, estafadores, traficantes de drojas y un largo etcétera, sin embargo no sabemos lo que se puede esperar de políticos, jueces o policía política bolivariana entre otros.