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La empresa privada sube un 27% más los sueldos que la pública en 2023
Los convenios colectivos en el ámbito administrativo registran alzas del 2,48% mientras impulsan un 3,16% las nóminas del sector privado
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La empresa privada sube un 27% más los sueldos que la pública en 2023
Los convenios colectivos en el ámbito administrativo registran alzas del 2,48% mientras impulsan un 3,16% las nóminas del sector privado
tras*currida ya algo más de la mitad del 2023, los registros de subidas salariales comienzan a dar cuenta de los resultados de las arduas negociaciones celebradas entre empresarios y sindicatos tanto a finales del pasado año en caso del sector público como en el ámbito privado donde el pacto para el V Acuerdo para el Empleo y la Negociación Colectiva (AENC) se sustanció en mayo tras un año de bloqueo.
Una primera lectura que ya aflora a partir de la entrega mensual de datos que lleva a cabo el Ministerio de Trabajo sobre la evolución salarial registrada en los convenios colectivos es que las revalorizaciones están permitiendo por primera vez en mucho tiempo que los empleados de nuestro país recuperen poder adquisitivo tras un año, el 2022, que ha supuesto un rejonazo sin precedentes al poder de compra de los hogares con un IPC medio del 8,4%. La segunda lectura, está en la heterogeneidad de las subidas en función del sector y la naturaleza de las empresas.
En este sentido, partiendo de la base de que el AENC firmado por patronal y sindicatos en el sector privado invita a los negociadores a asentar una senda de revalorización del 10% en los próximos tres años –2023, 2024 y 2025–, con un alza inicial del 4% para el presente ejercicio, y que el acuerdo sustanciado con las centrales sindicales y el Ministerio de Función Pública para los funcionarios parte de una base del 8,6% trienal -un 2,5% para este año-, el balance de los primeros siete meses del año deja una escalada de los salarios un 27,5% mayor en las empresas públicas que en las privadas.
Hasta el mes de julio, el avance salarial en las empresas públicas es del 2,48% mientras que en las empresas privadas el ritmo se sitúa en el 3,16%. La diferencia, de ese casi 30% mencionado, se corresponde con el nivel previsto para las revalorizaciones en los acuerdos marco. Cabe recordar, no obstante, que en el caso del sector privado las bandas no son de obligado cumplimiento sino una recomendación. Concretamente, las subidas del sector público afectan a un total de 93.612 trabajadores mientras que las subidas en las compañías privadas, en los convenios a nivel de empresa, alcanzan a 426.260 trabajadores.
En esta subdivisión, la tendencia se reproduce en los centros puramente asociados a la Administración Pública. Así, la Administración del Estado y la Seguridad Social registra en 2023 una revalorización media del 2,50% mientras que en la Administración autonómica y local se sitúa en el 2,66%.
Poder de compra
Observando el parámetro de la subida salarial desde el prisma que ofrece la estadística del Ministerio de Trabajo se observa cómo los salarios siguen siendo los grandes perdedores de la crisis inflacionista iniciada con el estallido de la guerra en Ucrania. El IPC de los primeros siete meses del año se sitúa de media en el 3,8%. Con esta cifra, los trabajadores del sector privado estarían afrontando una pérdida de poder de compra del 0,64% en el presente año, mientras que la caída en el sector público se incrementa hasta los 1,32 puntos porcentuales.
Sin embargo, cabe recordar un aspecto. Los avances salariales que diferencia la senda entre el sector público y privado recogen los convenios colectivos a nivel de empresa y en fase de aplicación, independiente de si vienen de años anteriores o si se han firmado en el presente ejercicio. Si nos ascendemos de la división por la naturaleza de la empresa y nos fijamos en el momento de la firma observamos como en general las subidas se sitúan en España en el 3,34% para un total de 8,9 millones de trabajadores. Sin embargo, mientras que las subidas que provienen de años anteriores se sitúan en el 3,07% para 6,7 millones de trabajadores, las firmas de 2023 reflejan subidas del 4,18% para 2,1 millones de empleados.
Aquí ya se empieza a observar el mantenimiento, e incluso ganancia, de poder adquisitivo de los trabajadores en 2023. Si bien, casi la totalidad de ellos vienen de asimilar un importante golpe. Cogiendo la media del pasado para el conjunto de los trabajadores protegidos por convenio la subida media fue del 2,98%, por lo que la pérdida de poder de compra sólo en el pasado año es de casi 5,5 puntos porcentuales, una de las mayores caídas de registradas entre los grandes países de la Unión Europea.
Pero más reveladores aún son los datos recabados por la Agencia Tributaria a partir de las retenciones de IRPF de los trabajadores que declaran rentas del trabajo. Según las cifras del gabinete de María Jesús Montero, en los tres primeros meses del año el salario medio pagado por las grandes empresas se incrementó un 5%, mientras que en las pequeñas y medianas empresas esa subida fue aún mayor, del 5,5%. En ambos casos, la revalorización supera tanto la media fijada para este año por el AENC del 4% como el 3,8% que marca el IPC medio en lo que va de año.
Divergencia entre sectores
Esta heterogeneidad entre lo público y privado y entre los convenios firmados este año o con anterioridad se refleja igualmente en la subdivisión por sectores. Tomando como referencia el dato general –que recoge tanto las subidas fijadas en los convenios de empresas y los de ámbito superior– se aprecia una diferencia de hasta el 20% entre el sector con mayor y el de menor ritmo de avance, correspondientes al agrario con un 3,63% de media y al de la construcción con un 3,02%.
Entre medias se encuentran las revalorizaciones efectuadas en el ámbito de la industria, del 3,15% de media, y en los servicios, del 3,42%. Estos dos sectores, además, acaparan a más del 90% de los trabajadores afectados, entre los 2,1 millones en el caso del sector fabril y casi 6 millones en el de los servicios.
Cabe destacar que desde la patronal CEOE se realizó la recomendación de subida salarial en función de la situación financiera y posibilidades económicas de cada compañía. De hecho, las empresas arrojan estas cifras de revalorización en un contexto de esfuerzos crecientes. Al alza de cotizaciones sociales impuesta por el Gobierno en el último año se suma un caldo de cultivo ya de por sí fuertemente erosivo para los márgenes empresariales. Según afirma la patronal de la pequeña y mediana empresa Cepyme los costes de producción se han elevado sólo en 2022 en más de un 25% a causa de la inflación.
