M. Priede
Será en Octubre
- Desde
- 14 Sep 2011
- Mensajes
- 50.897
- Reputación
- 114.279
**El marqués de Lafayette se convirtió en el jefe de la nueva Guardia Nacional y se inició un programa para educar a la ciudadanía. Se estaba preparando una monarquía constitucional que introduciría en una picadora de carne geopolítica un sistema de valores totalmente incompatible con cualquier sistema construido en torno a una élite hereditaria… ¡y en realidad se estaba haciendo sin derramamiento de sangre!
Pero algo no salió según lo planeado.
Para 1793, Bailly y la mayoría de sus aliados más cercanos habían sido decapitados por los jacobinos. Científicos como Antoine Lavoisier fueron incluidos en los asesinatos con el lema jacobino que gritaba “la revolución no necesita científicos” (después de todo, la ciencia era elitista). Lafayette optó por salvar la cabeza escapándose el 19 de agosto de 1792 convirtiéndose en prisionero en un calabozo de los Habsburgo durante 4 años (2). El rey Luis XVI -quien fue el gran amigo de la causa americana y partícipe de la monarquía constitucional perdió la cabeza en enero de 1793- se unió a su esposa 9 meses después. Para 1794, la revolución solo se conocía como el "Terror" y se ganó ese nombre ya que más de 40 000 personas fueron ejecutadas en un período muy corto. Francia se bañó en sangre mientras las alianzas de poder iban y venían entre los jacobinos de “izquierda” bajo el control de Maximilian Robespierre, Marat y Danton y los girondinos y monárquicos de la "derecha" opuesta. Con cada cambio de poder, oleadas de ejecuciones golpeaban por todos lados. Francia se convirtió en un estado policial con policías secretos incrustados en las colas de pan y los mercados tomando nota de todas las críticas al gobierno, el precio del pan y el ceño fruncido, con los desprevenidos quejosos llevados a prisión en el mejor de los casos, o guillotinados en el peor.
**
Entonces, ¿cómo salió tan mal?
La primera pista aquí se encuentra en el hecho de que los mismos banqueros anglo-suizos que financiaron las guerras de Napoleón fueron los mismos banqueros que provocaron la decapitación económica de Francia que la tras*formó en un terror sangriento. Al igual que el arte de los ajustes estructurales del FMI y el Banco Mundial y los préstamos basados en condiciones, el ministro de Finanzas, Jacques Necker, no solo contrajo una gran cantidad de deudas impagables entre 1786 y 1789, sino que también impuso una austeridad que paralizó la capacidad de recuperación de la nación. El profesor Beaudry escribió:
**Cuando las tropas francesas abrieron fuego contra las masas armadas hambrientas que habían rodeado la fortaleza de la Bastilla el 14 de julio de 1789, se desató el infierno y se liberó por completo un genio que nadie podría volver a meter en la botella. La fortaleza fue asaltada, sus soldados y gobernadores decapitados, y la gente comenzó a gritar para que Necker y Orleans se convirtieran en los salvadores de Francia. La prensa jacobina había estado difundiendo la idea a las masas durante algún tiempo.
El duque masónico que había estado operando en un plan para convertirse en un "Rey jacobino" tenía la intención de traer el "Sistema Británico" a Francia modelado en el equilibrio de poder de Gran Bretaña de una Cámara de los Comunes, Cámara de los Lores y Monarca. Sin embargo, todavía estaba tres lugares por debajo del título de Rey de Francia (el Rey tenía un hijo) y, por lo tanto, se llevó a cabo el intento de asesinato del Rey el 17 de julio de 1789, en el que un tirador de alto calibre apuntó al carruaje del Rey. sobre el puente Luis XV, esquivando al rey y matando a una mujer junto al carruaje.
El 23 de junio de 1789, un Necker desesperado le dio un mensaje al rey diciendo: "Señor, lo que debe hacer ahora es acceder a los deseos razonables de Francia y resignarse a adoptar la constitución británica".
(3) Congreso de Viena de 1815 y los meses de orgías y alcohol que lo rodearon | Burbuja.info
Pero algo no salió según lo planeado.
Para 1793, Bailly y la mayoría de sus aliados más cercanos habían sido decapitados por los jacobinos. Científicos como Antoine Lavoisier fueron incluidos en los asesinatos con el lema jacobino que gritaba “la revolución no necesita científicos” (después de todo, la ciencia era elitista). Lafayette optó por salvar la cabeza escapándose el 19 de agosto de 1792 convirtiéndose en prisionero en un calabozo de los Habsburgo durante 4 años (2). El rey Luis XVI -quien fue el gran amigo de la causa americana y partícipe de la monarquía constitucional perdió la cabeza en enero de 1793- se unió a su esposa 9 meses después. Para 1794, la revolución solo se conocía como el "Terror" y se ganó ese nombre ya que más de 40 000 personas fueron ejecutadas en un período muy corto. Francia se bañó en sangre mientras las alianzas de poder iban y venían entre los jacobinos de “izquierda” bajo el control de Maximilian Robespierre, Marat y Danton y los girondinos y monárquicos de la "derecha" opuesta. Con cada cambio de poder, oleadas de ejecuciones golpeaban por todos lados. Francia se convirtió en un estado policial con policías secretos incrustados en las colas de pan y los mercados tomando nota de todas las críticas al gobierno, el precio del pan y el ceño fruncido, con los desprevenidos quejosos llevados a prisión en el mejor de los casos, o guillotinados en el peor.
**
Entonces, ¿cómo salió tan mal?
La primera pista aquí se encuentra en el hecho de que los mismos banqueros anglo-suizos que financiaron las guerras de Napoleón fueron los mismos banqueros que provocaron la decapitación económica de Francia que la tras*formó en un terror sangriento. Al igual que el arte de los ajustes estructurales del FMI y el Banco Mundial y los préstamos basados en condiciones, el ministro de Finanzas, Jacques Necker, no solo contrajo una gran cantidad de deudas impagables entre 1786 y 1789, sino que también impuso una austeridad que paralizó la capacidad de recuperación de la nación. El profesor Beaudry escribió:
El acuerdo de libre comercio de Gran Bretaña hizo que Francia guardara su grano en reservas “económicamente ilegales”, por lo que Gran Bretaña compró todo el grano francés que su población podía comer y mucho más. Cuando una devastadora tormenta de granizo azotó Francia en junio de 1788 y destruyó la mayoría de los cultivos, se aseguró una hambruna continua y el rey de Francia rogó a Gran Bretaña la oportunidad de volver a comprar algo de grano para alimentar a las masas hambrientas, a lo que Gran Bretaña celebró una reunión y simplemente respondió negativamente.
**Cuando las tropas francesas abrieron fuego contra las masas armadas hambrientas que habían rodeado la fortaleza de la Bastilla el 14 de julio de 1789, se desató el infierno y se liberó por completo un genio que nadie podría volver a meter en la botella. La fortaleza fue asaltada, sus soldados y gobernadores decapitados, y la gente comenzó a gritar para que Necker y Orleans se convirtieran en los salvadores de Francia. La prensa jacobina había estado difundiendo la idea a las masas durante algún tiempo.
El duque masónico que había estado operando en un plan para convertirse en un "Rey jacobino" tenía la intención de traer el "Sistema Británico" a Francia modelado en el equilibrio de poder de Gran Bretaña de una Cámara de los Comunes, Cámara de los Lores y Monarca. Sin embargo, todavía estaba tres lugares por debajo del título de Rey de Francia (el Rey tenía un hijo) y, por lo tanto, se llevó a cabo el intento de asesinato del Rey el 17 de julio de 1789, en el que un tirador de alto calibre apuntó al carruaje del Rey. sobre el puente Luis XV, esquivando al rey y matando a una mujer junto al carruaje.
El 23 de junio de 1789, un Necker desesperado le dio un mensaje al rey diciendo: "Señor, lo que debe hacer ahora es acceder a los deseos razonables de Francia y resignarse a adoptar la constitución británica".
https://www.strategic-culture.org/n...-1789-1794-just-another-tonalidad-revolution/
(3) Congreso de Viena de 1815 y los meses de orgías y alcohol que lo rodearon | Burbuja.info
Última edición:
