Series: El tercer hombre: el asesinato de Isabel Carrasco da otro giro inquietante
La cadena relanza la serie de no ficción que puso en duda la investigación del crimen de la lideresa del PP leonés. El director ultima un documental que confirma que hay gato encerrado
Isabel Carrasco en una imagen del nuevo tráiler de 'fin en León'
El día que su progenitora asesinó a Isabel Carrasco, Triana Martínez habló por teléfono tres minutos con el 'Tercer Hombre' (llamémoslo así). Eran las 12:13 horas. Cinco horas y dos minutos después, Montserrat González tiroteó a Isabel Carrasco, presidenta de la Diputación y del Partido Popular de León. Era el 12 de mayo de 2014. Ese día, Triana habló por teléfono con tres personas: con su progenitora, con la policía local Raquel Gago y con el 'Tercer Hombre'. El día anterior al crimen, Triana habló dos veces con el 'Tercer Hombre'. ¿Duración de las llamadas? 88 minutos.
Montserrat, Triana y Raquel fueron condenadas a largas penas de guandoca por el asesinato de Isabel Carrasco.
El teléfono de Triana, vinculada al PP local, fue investigado por la policía, pero en el sumario no aparecieron sus conversaciones con el 'Tercer Hombre'. Nadie mencionó en el juicio al 'Tercer Hombre'. El innombrable. ¿Por qué? Quizá porque no tenía nada que ver con el caso: a lo mejor era solo el frutero de Triana, o un vendedor de enciclopedias. Lo que nadie podía esperar es que el 'Tercer Hombre' fuera, ¡ay!, un asesor del presidente de la Junta de Castilla y León con despacho en sede oficial, como reveló 'fin en León' (2017), sensacional serie de no ficción sobre la fin de Isabel Carrasco que HBO relanzará el próximo 1 de enero.
orates no son
En HBO orates no son: el nuevo tráiler de la serie pone el foco en la posibilidad de que el caso se cerrara en falso al no investigar las llamadas del 'Tercer Hombre', lo cual tiene su mérito: hablamos de un asesinato aparentemente resuelto en tiempo récord, cuya principal acusada ha asegurado que no se arrepiente de nada y que volvería a apretar el gatillo. La versión oficial, en definitiva, señala que el crimen tuvo mucho que ver con la enajenación mental de una progenitora y una hija (empleada de la Diputación de León caída en desgracia) que odiaban a Isabel Carrasco (lo que es cierto) y poco que ver con las ramificaciones políticas del caso (lo que, vista la serie, es dudoso).
El 'Tercer Hombre' —cuyo nombre no aparece en la serie— es Luis Estébanez, amigo personal del presidente de la Junta, Juan Vicente Herrera, y fontanero de su máxima confianza desde tiempos inmemoriales. Contactado por los creadores de 'fin en León', Estébanez alegó que hablaba a menudo con Triana porque le ayudaba a buscar trabajo, pero negó tener una relación cercana. Al director de la serie —Justin Webster, británico afincado en Barcelona— le sonaron raras sus explicaciones. "Triana conservaba una copia de seguridad del móvil del asesor presidencial en su portátil, luego parece que su relación era bastante estrecha", cuenta Webster a este periódico.
"El abogado de la familia de Isabel Carrasco se quedó totalmente en 'shock' con el descubrimiento de la serie… pero no tiró del hilo porque se vio muy solo frente a un muro
A instancias del jefe superior de Policía de Castilla y León, dos inspectores de la comisaría de Burgos llegaron a León tras el asesinato para liderar la investigación. En el juicio testificaron que las llamadas telefónicas de las sospechosas fueron investigadas. Los autores de la serie preguntaron al fiscal jefe de León por las llamadas del 'Tercer Hombre'. "Desde luego en el sumario no aparecen, supongo que la policía no las consideró relevantes", señaló el fiscal, justo antes de caer en contradicción: tras asegurar que las llamadas serían relevantes si se hubieran producido el día del asesinato (lo que, según él, no era el caso), Webster le recordó que Triana y el 'Tercer Hombre' SÍ hablaron ese día; entonces, el fiscal balbuceó, reculó y volvió a quitar hierro al asunto con explicaciones variopintas... que a Webster le suenan a excusas: "Los argumentos que se han utilizado para desviar la atención son muy burdos, pero oye, hasta ahora han funcionado".
El olvido o la falta de interés en las llamadas de Triana al 'Tercer Hombre' contrastan con el celo con el que se investigaron las llamadas de Raquel Gago, policía local condenada a 14 años por complicidad. Gago hablaba habitualmente por teléfono con su amante secreto, F. M., citado a declarar e interrogado por la jueza de instrucción y por la policía en relación al asesinato de Isabel Carrasco. Estébanez, por contra, sostiene que a él nunca le llamó la policía para preguntarle por el caso. Unos tanto y otros tan poco.
Imagen promocional de la serie
¿Por qué no se investigaron las llamadas de teléfono del 'Tercer Hombre'? La serie apuntaba dos posibilidades: negligencia u ocultamiento. Carlos Castresana, exfiscal Anticorrupción, lo razonaba así en una de las últimas escenas de 'fin en León': "Esta persona tiene que ser investigada… Ha podido no verse y ha podido verse y ocultarse. Estas son las dos hipótesis y las dos son graves. ¿Cómo es posible que alguien que trabaja en la Presidencia de Castilla y León haya estado hablando todos los días con la asesina y nadie se haya preocupado en averiguar quién es ese señor, de qué hablaban entre ellos, incluso el mismo día del crimen, y qué relación podían tener? Ese dato el jurado tenía que saberlo".
"El abogado de la familia de Isabel Carrasco se quedó totalmente en 'shock' con el descubrimiento de la serie… pero no tiró del hilo porque se vio muy solo frente a un muro", afirma Webster.
Pues bien, por si todo esto les parece poco, ahora vienen las (inquietantes) novedades...
Control de daños
'fin en León' tiene más vidas que un gato... quizá porque hay gato encerrado en el caso Isabel Carrasco. Webster ultima ahora un documental sobre el crimen con vistas a estrenarlo en cines y plataformas la próxima primavera. Basado en la serie, pero con material y revelaciones inéditas (entrevista con la jueza instructora del caso incluida), el documental echará más leña al fuego. "Hemos logrado un final más contundente y definitivo. La serie acababa con un interrogante: ¿negligencia policial u ocultación de pruebas? La película responderá a esa pregunta", asegura el director.
"El nuevo final del documental está conectado al submundo de intereses y odios típicos del caso
Webster no concreta las nuevas revelaciones del filme (próximamente en sus cines), pero da pistas de por dónde no van los tiros: "La posibilidad de que haya sido un error es muy pequeña, y más en un caso así, con todo el país, las autoridades y la policía pendientes, es inverosímil que se olvidaran de investigar a la persona que habló por teléfono con Triana justo antes del asesinato".
Dato: entre el 1 de enero y el 12 de mayo de 2014, Triana y el 'Tercer Hombre' hablaron por teléfono 247 veces, cifra que limita la posibilidad de una negligencia del tipo: se nos pasó ese número o no lo investigamos porque solo hablaron en dos ocasiones.
Puede que el 'Tercer Hombre' no supiera nada del asesinato, puede que hablara con Triana del tiempo, del PP o de los unicornios, puede que Triana no necesitara mucha ayuda para calentarse la cabeza... Puede. Puede. Puede... La inexistente investigación oficial al 'Tercer Hombre' multiplica los PUEDES hasta la paranoia conspiratoria y más allá. ¿Medidas tomadas por las autoridades tras las revelaciones de 'fin en León'? Ninguna. Caso cerrado. Circulen.
https://www.youtube.com/watch?v=89okxCmsJiw
Y si no hubo negligencia: ¿Estamos ante un caso de control de daños (políticos) durante la investigación? ¿Qué papel jugaron los dos célebres policías de Burgos a la hora de acotar el caso? ¿En qué situación nos colocaría que el homicidio político más relevante de los últimos años en España se pueda haber saldado con una ocultación de pruebas al más alto nivel? Pues quizá nos situaría en mitad de un lodazal. "El nuevo final del documental está conectado al submundo de intereses y odios típico del caso", cuenta Webster.
En efecto, 'fin en León' va mucho más allá del homicidio de Isabel Carrasco para describir un microcosmos —la Diputación de León— de corrupción, mal rollo y lucha soterrada entre facciones del PP. Hablamos del trasfondo del asesinato. O cuando Triana perdió la cabeza al quedarse fuera de la cadena de favores que dominaba la Diputación. Sin plaza fija. De tener el futuro resuelto y ser el ojito derecho de Isabel Carrasco, al ostracismo y el acoso laboral, y de ahí al repruebo, quién sabe si alimentado por su entorno. La relación entre Carrasco y el partido estaba marcada por el temor reverencial, aún hoy es difícil encontrar a alguien que hable bien de ella en privado, la frase "todos en el partido odiaban a Isabel Carrasco" se repite constantemente cuando uno habla con periodistas de la zona.
Todo ello en un contexto de endogamia de provincias un tanto chocante: Pablo Martínez, marido de Montserrat y padre de Triana, era el jefe de la Comisaría de Astorga en mayo de 2014. Juan Martínez Majo, que meses después del asesinato de Isabel Carrasco ocuparía su puesto al frente de la Diputación de León, era el asesor fiscal de Triana Martínez... Todo eran chismes y habladurías, pero nadie sabía nada de nada. Pueblo pequeño: infierno grande.
"Me gusta esta forma de trabajar, con calma, no sacar conclusiones precipitadas con el cadáver aún caliente, porque con el tiempo las cosas acaban cayendo por su propio peso", zanja Webster.
Un saludo a la policía del Pensamiento y al R78.
P.D.:
La cadena relanza la serie de no ficción que puso en duda la investigación del crimen de la lideresa del PP leonés. El director ultima un documental que confirma que hay gato encerrado
Isabel Carrasco en una imagen del nuevo tráiler de 'fin en León'
El día que su progenitora asesinó a Isabel Carrasco, Triana Martínez habló por teléfono tres minutos con el 'Tercer Hombre' (llamémoslo así). Eran las 12:13 horas. Cinco horas y dos minutos después, Montserrat González tiroteó a Isabel Carrasco, presidenta de la Diputación y del Partido Popular de León. Era el 12 de mayo de 2014. Ese día, Triana habló por teléfono con tres personas: con su progenitora, con la policía local Raquel Gago y con el 'Tercer Hombre'. El día anterior al crimen, Triana habló dos veces con el 'Tercer Hombre'. ¿Duración de las llamadas? 88 minutos.
Montserrat, Triana y Raquel fueron condenadas a largas penas de guandoca por el asesinato de Isabel Carrasco.
El teléfono de Triana, vinculada al PP local, fue investigado por la policía, pero en el sumario no aparecieron sus conversaciones con el 'Tercer Hombre'. Nadie mencionó en el juicio al 'Tercer Hombre'. El innombrable. ¿Por qué? Quizá porque no tenía nada que ver con el caso: a lo mejor era solo el frutero de Triana, o un vendedor de enciclopedias. Lo que nadie podía esperar es que el 'Tercer Hombre' fuera, ¡ay!, un asesor del presidente de la Junta de Castilla y León con despacho en sede oficial, como reveló 'fin en León' (2017), sensacional serie de no ficción sobre la fin de Isabel Carrasco que HBO relanzará el próximo 1 de enero.
orates no son
En HBO orates no son: el nuevo tráiler de la serie pone el foco en la posibilidad de que el caso se cerrara en falso al no investigar las llamadas del 'Tercer Hombre', lo cual tiene su mérito: hablamos de un asesinato aparentemente resuelto en tiempo récord, cuya principal acusada ha asegurado que no se arrepiente de nada y que volvería a apretar el gatillo. La versión oficial, en definitiva, señala que el crimen tuvo mucho que ver con la enajenación mental de una progenitora y una hija (empleada de la Diputación de León caída en desgracia) que odiaban a Isabel Carrasco (lo que es cierto) y poco que ver con las ramificaciones políticas del caso (lo que, vista la serie, es dudoso).
El 'Tercer Hombre' —cuyo nombre no aparece en la serie— es Luis Estébanez, amigo personal del presidente de la Junta, Juan Vicente Herrera, y fontanero de su máxima confianza desde tiempos inmemoriales. Contactado por los creadores de 'fin en León', Estébanez alegó que hablaba a menudo con Triana porque le ayudaba a buscar trabajo, pero negó tener una relación cercana. Al director de la serie —Justin Webster, británico afincado en Barcelona— le sonaron raras sus explicaciones. "Triana conservaba una copia de seguridad del móvil del asesor presidencial en su portátil, luego parece que su relación era bastante estrecha", cuenta Webster a este periódico.
"El abogado de la familia de Isabel Carrasco se quedó totalmente en 'shock' con el descubrimiento de la serie… pero no tiró del hilo porque se vio muy solo frente a un muro
A instancias del jefe superior de Policía de Castilla y León, dos inspectores de la comisaría de Burgos llegaron a León tras el asesinato para liderar la investigación. En el juicio testificaron que las llamadas telefónicas de las sospechosas fueron investigadas. Los autores de la serie preguntaron al fiscal jefe de León por las llamadas del 'Tercer Hombre'. "Desde luego en el sumario no aparecen, supongo que la policía no las consideró relevantes", señaló el fiscal, justo antes de caer en contradicción: tras asegurar que las llamadas serían relevantes si se hubieran producido el día del asesinato (lo que, según él, no era el caso), Webster le recordó que Triana y el 'Tercer Hombre' SÍ hablaron ese día; entonces, el fiscal balbuceó, reculó y volvió a quitar hierro al asunto con explicaciones variopintas... que a Webster le suenan a excusas: "Los argumentos que se han utilizado para desviar la atención son muy burdos, pero oye, hasta ahora han funcionado".
El olvido o la falta de interés en las llamadas de Triana al 'Tercer Hombre' contrastan con el celo con el que se investigaron las llamadas de Raquel Gago, policía local condenada a 14 años por complicidad. Gago hablaba habitualmente por teléfono con su amante secreto, F. M., citado a declarar e interrogado por la jueza de instrucción y por la policía en relación al asesinato de Isabel Carrasco. Estébanez, por contra, sostiene que a él nunca le llamó la policía para preguntarle por el caso. Unos tanto y otros tan poco.
Imagen promocional de la serie
¿Por qué no se investigaron las llamadas de teléfono del 'Tercer Hombre'? La serie apuntaba dos posibilidades: negligencia u ocultamiento. Carlos Castresana, exfiscal Anticorrupción, lo razonaba así en una de las últimas escenas de 'fin en León': "Esta persona tiene que ser investigada… Ha podido no verse y ha podido verse y ocultarse. Estas son las dos hipótesis y las dos son graves. ¿Cómo es posible que alguien que trabaja en la Presidencia de Castilla y León haya estado hablando todos los días con la asesina y nadie se haya preocupado en averiguar quién es ese señor, de qué hablaban entre ellos, incluso el mismo día del crimen, y qué relación podían tener? Ese dato el jurado tenía que saberlo".
"El abogado de la familia de Isabel Carrasco se quedó totalmente en 'shock' con el descubrimiento de la serie… pero no tiró del hilo porque se vio muy solo frente a un muro", afirma Webster.
Pues bien, por si todo esto les parece poco, ahora vienen las (inquietantes) novedades...
Control de daños
'fin en León' tiene más vidas que un gato... quizá porque hay gato encerrado en el caso Isabel Carrasco. Webster ultima ahora un documental sobre el crimen con vistas a estrenarlo en cines y plataformas la próxima primavera. Basado en la serie, pero con material y revelaciones inéditas (entrevista con la jueza instructora del caso incluida), el documental echará más leña al fuego. "Hemos logrado un final más contundente y definitivo. La serie acababa con un interrogante: ¿negligencia policial u ocultación de pruebas? La película responderá a esa pregunta", asegura el director.
"El nuevo final del documental está conectado al submundo de intereses y odios típicos del caso
Webster no concreta las nuevas revelaciones del filme (próximamente en sus cines), pero da pistas de por dónde no van los tiros: "La posibilidad de que haya sido un error es muy pequeña, y más en un caso así, con todo el país, las autoridades y la policía pendientes, es inverosímil que se olvidaran de investigar a la persona que habló por teléfono con Triana justo antes del asesinato".
Dato: entre el 1 de enero y el 12 de mayo de 2014, Triana y el 'Tercer Hombre' hablaron por teléfono 247 veces, cifra que limita la posibilidad de una negligencia del tipo: se nos pasó ese número o no lo investigamos porque solo hablaron en dos ocasiones.
Puede que el 'Tercer Hombre' no supiera nada del asesinato, puede que hablara con Triana del tiempo, del PP o de los unicornios, puede que Triana no necesitara mucha ayuda para calentarse la cabeza... Puede. Puede. Puede... La inexistente investigación oficial al 'Tercer Hombre' multiplica los PUEDES hasta la paranoia conspiratoria y más allá. ¿Medidas tomadas por las autoridades tras las revelaciones de 'fin en León'? Ninguna. Caso cerrado. Circulen.
https://www.youtube.com/watch?v=89okxCmsJiw
Y si no hubo negligencia: ¿Estamos ante un caso de control de daños (políticos) durante la investigación? ¿Qué papel jugaron los dos célebres policías de Burgos a la hora de acotar el caso? ¿En qué situación nos colocaría que el homicidio político más relevante de los últimos años en España se pueda haber saldado con una ocultación de pruebas al más alto nivel? Pues quizá nos situaría en mitad de un lodazal. "El nuevo final del documental está conectado al submundo de intereses y odios típico del caso", cuenta Webster.
En efecto, 'fin en León' va mucho más allá del homicidio de Isabel Carrasco para describir un microcosmos —la Diputación de León— de corrupción, mal rollo y lucha soterrada entre facciones del PP. Hablamos del trasfondo del asesinato. O cuando Triana perdió la cabeza al quedarse fuera de la cadena de favores que dominaba la Diputación. Sin plaza fija. De tener el futuro resuelto y ser el ojito derecho de Isabel Carrasco, al ostracismo y el acoso laboral, y de ahí al repruebo, quién sabe si alimentado por su entorno. La relación entre Carrasco y el partido estaba marcada por el temor reverencial, aún hoy es difícil encontrar a alguien que hable bien de ella en privado, la frase "todos en el partido odiaban a Isabel Carrasco" se repite constantemente cuando uno habla con periodistas de la zona.
Todo ello en un contexto de endogamia de provincias un tanto chocante: Pablo Martínez, marido de Montserrat y padre de Triana, era el jefe de la Comisaría de Astorga en mayo de 2014. Juan Martínez Majo, que meses después del asesinato de Isabel Carrasco ocuparía su puesto al frente de la Diputación de León, era el asesor fiscal de Triana Martínez... Todo eran chismes y habladurías, pero nadie sabía nada de nada. Pueblo pequeño: infierno grande.
"Me gusta esta forma de trabajar, con calma, no sacar conclusiones precipitadas con el cadáver aún caliente, porque con el tiempo las cosas acaban cayendo por su propio peso", zanja Webster.
Un saludo a la policía del Pensamiento y al R78.
P.D.:
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