Sorprendentemente, Sánchez aún sigue en el poder y para colmo, sigue dando mítines. De hecho, hoy ha personificado a la derecha sobre la figura del novio de Ayuso. Machismo y feminismo por los suelos. Es cómo decir hay que pegarle dos tortas a Ayuso. Un cosa es alimentar a los cerdos y otra es echarles de comer. Esta izquierda ya es demasiado tóxica, que es mejor quitarla de los informativos y del horario infantil.
Criticar al novio de Ayuso es incendiar la ignorancia, es no querer debatir. Es cambiarle de nombre a la plaza del pueblo. Conocemos al novio de Ayuso, pero el sanchismo tiene dirigentes tan mediocres que nadie conoce a la pareja de Bolaños.
Patético diciendo el orate que no hay nada más antipatriota que defraudar a Hacienda. Y eso que el sanchismo ha defraudado a todas las instituciones.
Sánchez es el manager de la plaza de pueblo. El sanchismo actúa de forma cruel y criminal, hace creer al vototonto sociata que es familiar del alcalde del pueblo para criticar al mejor del otro pueblo. Ya no hace falta intimidar con un rifle, el rifle es el ego ignorante.
Criticar al novio de Ayuso es incendiar la ignorancia, es no querer debatir. Es cambiarle de nombre a la plaza del pueblo. Conocemos al novio de Ayuso, pero el sanchismo tiene dirigentes tan mediocres que nadie conoce a la pareja de Bolaños.
Patético diciendo el orate que no hay nada más antipatriota que defraudar a Hacienda. Y eso que el sanchismo ha defraudado a todas las instituciones.
Sánchez es el manager de la plaza de pueblo. El sanchismo actúa de forma cruel y criminal, hace creer al vototonto sociata que es familiar del alcalde del pueblo para criticar al mejor del otro pueblo. Ya no hace falta intimidar con un rifle, el rifle es el ego ignorante.