El PSOE evita publicitar un paseo de Sánchez por Getafe para esquivar los abucheos

El Pionero

Alcalde y presidente de Fútbol Paco premium
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Marbella de tal y tal
Los "paseos" como acto político en sí son algo ya habitual en los dirigentes de la clase política española. Uno de los más fieles abanderados de los "paseos" fue en su día Mariano Rajoy cuando era líder del Partido Popular y no tenía demasiadas ganas de contestar a las preguntas de la prensa.

Desde el departamento de comunicación del PP se enviaba un aviso el día anterior a los periodistas con la agenda de Rajoy y si tocaba paseo por alguna ciudad española, sobre todo en campaña, se indicaba el lugar y la hora en el que iba a comenzar. No se podía preguntar pero se podía estar. Ahora el PSOE le da una vuelta de tuerca más a estos "paseos": ni preguntar ni estar. No vaya a ser que alguien pueda grabar cómo se abuchea al presidente del gobierno.
Esto es lo que ocurrió el sábado en a localidad madrileña de Getafe. El Partido Socialista había programado un acto de Pedro Sánchez allí, en el polideportivo municipal Juan de la Cierva, dentro de la campaña "El Gobierno de la gente". La sorpresa para los periodistas que allí esperaban al presidente vino un rato después cuando se enteraron por los tuits que el propio Sánchez subió a su perfil de Twitter de que antes había estado dando un paseo por las calles de Getafe.


El presidente del Gobierno visitó un mercadillo solidario y una pastelería. Se hizo fotos con la gente y, según la alcaldesa de Getafe, Sara Hernández, "se montó la locura". Eso es, al menos, lo que dijo al comenzar el mitin en el polideportivo: "Os pido disculpas por la tardanza, pero haciendo bueno el lema de 'El Gobierno de la gente' el presidente del Gobierno ha visitado hoy varios puntos de Getafe y se ha montado la locura".

Un discurso que tuvo que interrumpir en alguna ocasión porque aunque consiguieron dar esquinazo a las protestas durante el paseo de Sánchez, no lo lograron en el acto en sí. Desde fuera del polideportivo varias personas mostraron su malestar con la gestión socialista lo que obligó a la alcaldesa a parar en varias ocasiones. Los asistentes trataron de acallar los abucheos con aplausos a los oradores.

 
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