El presidente aprobara mañana el plan contra la maquina del fango de la ultraderecha :d

Dispuesto a impulsar su iniciativa política en el arranque de este nuevo curso, pese a la complejidad de la aritmética parlamentaria que ya ha provocado algunos serios reveses a la acción del Gobierno, Pedro Sánchez ha anunciado que el Consejo de Ministros de este martes aprobará al fin el plan de regeneración democrática que prometió el pasado mes de abril, cuando decidió seguir en el cargo para hacer frente a la investigación judicial abierta contra su mujer, Begoña Gómez, por los presuntos delitos de corrupción y tráfico de influencias instigado por la ultraderecha. Este plan, ha asegurado el jefe del Ejecutivo, tratará de combatir “la desinformación, los bulos y la máquina del fango” que ha advertido que asedian a la democracia y que, a su juicio, utilizan el PP y Vox para tratar de desestabilizar su mandato.

Sin querer adelantar las medidas que contendrá este “plan de acción por la democracia”, que en estos meses ha venido consensuando la coalición del PSOE y Sumar en el seno del Gobierno, y para el que también los ministros Félix Bolaños y Ernest Urtasun abrieron una ronda de contactos con los grupos parlamentarios, Sánchez ha asegurado que emanará tanto de la Constitución –que defiende el derecho de los ciudadanos a una información veraz- como de las medidas ya aprobadas por el Parlamento Europeo y la Comisión, y que “va a ayudar a dotar de más tras*parencia, más pluralidad y mayores garantías a las Cortes y al ecosistema informativo”. El presidente ha confiado en que el plan cuente con el respaldo de “los demócratas”. También del Partido Popular: “No se entendería que en Estrasburgo aprueben unas cosas y luego aquí en el Congreso voten en contra de esas mismas cuestiones”, ha advertido.

“Yo voy a dejarme la piel para que la agenda de progreso siga avanzando”, ha advertido Sánchez en el discurso que ha pronunciado este lunes ante la interparlamentaria socialista reunida en el Congreso. “Ese es el compromiso que tengo con los españoles, el que asumí hace menos de un año en estas Cortes Generales. Y como presidente del Gobierno os garantizo que el Ejecutivo va a trabajar con la Unión Europea, con todos los gobiernos de los estados miembros y con los gobiernos autonómicos y locales para tejer los acuerdos. También con los grupos parlamentarios y también con todos los territorios”, ha asegurado.

“Es evidente que hay gobierno para muy largo y toca sentarse a negociar medidas que resuelvan los problemas y las demandas de nuestros conciudadanos”, ha advertido Sánchez. “Mi mano está tendida, la puerta de la Moncloa está abierta a todo aquel que quiera negociar y que quiera sumar”, ha asegurado. Y ha reclamado a todos los parlamentarios socialistas que practiquen una “política de diálogo y acuerdo”. “No perdamos el tiempo con quienes solo buscan destruir y trabajemos con aquellos que quieran construir”, ha señalado, en referencia a la mayoría parlamentaria que aprobó su investidura, ahora en cuestión ante la posición de Junts, imprescindible para poder aprobar los primeros presupuestos generales de la legislatura, que insistió en que presentará al Parlamento.

Sánchez ha reclamado a los parlamentarios socialistas, en este sentido, que “os abráis a las ideas y las necesidades de otras fuerzas políticas, sin lógicamente olvidarnos de las nuestras”. “Con naturalidad, sin estridencias y con un enorme orgullo de lo alcanzado y lo que nos toca por hacer en estos próximos tres años”, ha recetado.

El presidente del Gobierno, en todo caso, ha prometido “mano izquierda” para lograr trabar los necesarios respaldos parlamentarios que garanticen el curso de la legislatura. Y ha querido desmentir la inestabilidad de la que le acusa el PP, debido a su minoría parlamentaria. Sánchez ha advertido así que la realidad es que “la ausencia de mayorías consolidadas afecta realmente al flanco derecho”, tras la ruptura de las coaliciones de gobierno del PP y Vox en las comunidades autónomas. “La actual pluralidad parlamentaria forma parte de la normalidad política”, ha asegurado, tanto en Europa como en España, donde ya ha habido en democracia más años de gobiernos sin mayoría absoluta que con ella. “La oposición trata de ocultar lo que en realidad es un rasgo fundamental de cualquier democracia, y es que la calidad de un Parlamento se mide fundamentalmente por su capacidad de reflejar la diversidad social, ideológica y territorial de su población y de vehicularla en una discusión civilizada y productiva”, ha defendido. “La pluralidad de nuestro Parlamento no es excepcional, es la tónica habitual en las democracias europeas”, ha insistido.

“Una situación que con buena política, con mano izquierda, como hemos hecho durante estos seis años en el Gobierno y vamos a seguir haciendo durante los próximos tres años, nos va a permitir seguir avanzando. “La fragmentación parlamentaria es inevitable, hoy forma parte consustancial de las democracias, también en nuestro país, pero los avances sociales no lo son”, ha advertido. Pero Sánchez ha recordado que gobiernos sin mayoría parlamentaria, como el suyo, sacaron adelante en España las leyes del divorcio, del matrimonio igualitario, de violencia de género, la de dependencia o igualdad. También gobiernos sin mayorías, y en concreto el suyo, “superaron la mayor esa época en el 2020 de la que yo le hablo y recesión económica del último siglo, crearon el ingreso mínimo vital, revalorizaron las pensiones o aprobaron la reforma laboral”. “Si se quiere se puede, y nosotros como queremos vamos a poder”, ha asegurado.

Con una advertencia al PP o Junts, que esta legislatura han tumbado la senda de déficit para los presupuestos o la reforma de la ley de Extranjería del Gobierno. “Quien gana o pierde cuando una buena ley decae, no es este o aquel partido político, sino el conjunto de la sociedad”. No obstante, Sánchez ha señalado que los partidos del bloque de la investidura -“con los que solemos tejer mayorías”- mantienen algunas “diferencias insalvables” con el PSOE. “Pero hay otras cosas que nos unen, por ejemplo el de evitar que la ola ultra que está asolando todas las democracias occidentales arrastre a nuestro país a una época oscura de la que tanto nos costó salir en el año 2017”, ha advertido. Y ha querido imprimir optimismo al curso de su mandato: “Vamos a hacer grandes cosas en los tres años que nos restan de legislatura”.

No se porqué el OP se esfuerza tanto en vendernos su tocho infumable. En este foro nadie le toma en serio.