De Venezuela a China: Zapatero se busca otra dictadura a la que servir (y de la que sacar pasta)
Tras años de trabajo para el chavismo, el expresidente se ha convertido en uno de los lobistas más destacados de la dictadura comunista china.
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De Venezuela a China: Zapatero se busca otra dictadura a la que servir (y de la que sacar pasta)
Tras años de trabajo para el chavismo, el expresidente se ha convertido en uno de los lobistas más destacados de la dictadura comunista china.Desde el pasado mes de febrero José Luis Rodríguez Zapatero es presidente del Consejo Consultivo de la Fundación ONUART, una organización española público-privada fundada por un diplomático español, que fue presidida por Miguel Ángel jovenlandesatinos –el desastroso ministro de Exteriores del propio Zapatero– y que, a raíz de la entrada de un poderoso donante, se va a enfocar en trabajar con y en China.
De hecho, ya se han organizado dos conciertos en el país asiático, el segundo de ellos, en lo que parece un acto deliberado de sarcasmo, durante las celebraciones del Día Mundial de los Derechos Humanos.
Tal y como explica en un reportaje en El Confidencial el periodista Ignacio Cembrero, –colaborador de esRadio–, este cambio en la orientación de ONUART es el último episodio de un activismo que se remonta a 2020, cuando fue una pieza fundamental para el acercamiento entre la dictadura comunista y el Grupo de Puebla en el que Zapatero juega un papel fundamental.
Sólo en los últimos meses Zapatero hizo un nuevo viaje a Pekín a principios de julio, participando en la Octava Cumbre Mundial de Grupos de Reflexión; y en mayo recibió en Madrid una delegación que prepara Exposición Internacional de Importaciones de China. También, siempre según el artículo de Cembrero, organizó una reunión en Ferraz entre parte de la cúpula del PSOE –incluidos María Jesús Montero y Santos Cerdán– y representantes del Partido Comunista Chino.
Zapatero también ha sido clave en el sorprendente viaje a China de este mismo verano en el que el líder del PSOE en Madrid, al menos por ahora, Juan Lobato, y socialistas de otras trece comunidades autónomas han recorrido el gigante asiático en un viaje que, según algunas informaciones periodísticas, fue financiado por Cátedra China, una organización creada como un "espacio de diálogo entre China y España" en cuyo "claustro de honor" está, sí, lo han adivinado, el propio José Luis Rodríguez Zapatero. No obstante, esta organización ha negado este vínculo en un correo electrónico enviado a El Confidencial.
Todo este activismo, por decirlo de una forma sutil, coincide con la consideración cada vez más extendida de los peligro de injerencias de China, sus tácticas de espionaje y su forma mucho más allá de la legalidad de hacer lobby. De hecho, en el último informe anual de Departamento de Seguridad Nacional de Moncloa se advertía que China está desarrollando en nuestro país "diversas capacidades que podrían ser empleadas para la ejecución de una estrategia híbrida" que por un lado sirva para "la obtención de información política, militar o científico-tecnológica" y por el otro contemple también "la construcción de redes de influencia en las altas esferas de poder político y económico, con capacidad de ejercer presión sobre temas de especial interés o sensibilidad". Parece claro que Zapatero es una pieza clave de este esfuerzo.
