Icibatreuh
Madmaxista
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Para que leáis un poco y no estéis todo el puñetero día metidos en el foro.
Dedicado a la forera italiana @Tierra Azul , para que se de cuenta qué fácilmente se pasa del comunismo al fascismo. En cuanto lo lea la volveré a meter en el ignore, no me gustan sus histerismos.
Lectura interesantísima para filocomunistas y filofascistas. Si entendéis el pasado comprendereis mejor el presente y adivinareis también mejor el futuro
El libro cuenta en forma novelada el ascenso del fascismo y del propio Mussolini pero también explica con asombrosa claridad el predominio del socialismo bolchevique en la Italia de 1919. (El partido Comunista se fundaría en 1921). Ahí podemos ver a Nicola Bombacci, su secretario general, que proclamaba a toda página en sus medios: "La bandera roja triunfará". "Proletarios, la acción es inminente, A la insurrección!!". En 1917 la bandera roja ya había triunfado en Rusia. Tambien en 1919 la bandera roja había triunfado en Hungría de la mano de Bela Kun. Hasta en Baviera se establece la "República Soviética de Baviera".
En Milán hay huelgas revolucionarias y se respira un ambiente presovietico. Pero la falta de firmeza de Bombacci paraliza el movimiento. Como en el caso de Puigdemont y la independencia se queda en meras frases revolucionarias. Ante la multitud dice" La a bandera roja ha llegado a Rusia y queremos que Rusia esté también aquí ". Pero al final todo queda descafeinado y dice: "La huelga es de carácter demostrativo, no revolucionaria". Todos para casa, como Puigdemont en la proclamación durante 7 segundos de la independencia.
La falta de firmeza de estos socialistas soviéticos da alas a Mussolini y sus fuerzas fascistas. Ellos sí que saben usar la violencia en toda su extensión, mucho más que los gente de izquierdas con su utopías revolucionarias.
En noviembre de 1919 los socialistas revolucionarios triunfan con un 33% de los votos y 152 escaños de 500. Los fascistas ningún representante. "Los socialistas han conquistado Italia pero no saben qué hacer con ella' (Scurati). Los nacionalistas apalean a los diputados socialistas por no gritar "Viva el Rey". Los socialistas como de costumbre montan la huelga general. En Milán se respira un ambiente revolucionario pero la Revolución no llega. Los dirigentes socialistas no se atreven a dar el paso definitivo. Marzo de 1920. En Milán siguen la huelgas generales, es una ciudad muerta. En la Fiat los sindicatos quieren controlar cada vez más las empresas. Estas responden con un cierre patronal. En el fondo los sindicatos quieren la revolución pero los socialistas la posponen una vez más. En el campo el 100% de los pueblos están en manos de los Socialistas. En todos hay una Casa del Pueblo, las Ligas Rojas son dueñas de la situación. "Consiguen imponer a los propietarios agrícolas condiciones laborales tales que les privan de la propiedad de la tierra" (Scurati). Se imponen a través de huelgas masivas. La derecha dice que el estado ha abdicado ante la violencia socialista. Pero esta es una nimiedad comparado con la vivencia fascista que vendrá después. El Fascio sí que está armado y preparado para la lucha. En abril de 2020, Bombacci, el " Cristo de los Obreros" viaja a Escandinavia para entrevistarse con el lugarteniente de Lenin. Los comunistas le dicen que 'En Italia el Socialismo es fuerte pero la facción revolucionaria es débil ". Que "la revolución ya ha triunfado en Rusia y ahora quieren restaurar las relaciones comerciales con los estados Capitalistas" A la vuelta Mombacci está muy amargado, la dictadura del proletariado está cada vez más lejos. Aún así en septiembre de de 2020 la CGT con más de 500.000 trabajadores toman 600 fábricas. Las banderas rojas ondean en todas ellas, como en Alfa Romeo. Las fábricas de Italia pasan a manos de los obreros. Un miedo atroz se apodera de las clases burguesas. Primero los campesinos, luego las fábricas. "Una declaracion de guerra" dice el Corriere de la Será. Pero una vez más la revolución no llega. Mussolini se ríe de ellos; "De verdad creéis que el comunismo es posible en Italia, el país más individualista del mundo?"
Los acontecimientos posteriores son conocidos. Mussolini aprovecha el miedo a los Soviets para imponer su particular revolución fascista usando la violencia hasta límites nunca vistos. Van pueblo por pueblo linchando a los dirigentes campesinos. Queman las banderas rojas una por una en aldeas, fábricas y ciudades.
Al final el "Cristo de los Obreros" Nicola Bombacci se acerca al fascismo y acaba siendo un dirigente de ellos. Paradojas de la vida, lo acaban matando a la vez que a Mussolini y le cuelgan boca abajo en la misma plaza de Milan. El que no tuvo huevones para hacer la revolución al final le linchan los revolucionarios.
www.casadellibro.com
Dedicado a la forera italiana @Tierra Azul , para que se de cuenta qué fácilmente se pasa del comunismo al fascismo. En cuanto lo lea la volveré a meter en el ignore, no me gustan sus histerismos.
Lectura interesantísima para filocomunistas y filofascistas. Si entendéis el pasado comprendereis mejor el presente y adivinareis también mejor el futuro
El libro cuenta en forma novelada el ascenso del fascismo y del propio Mussolini pero también explica con asombrosa claridad el predominio del socialismo bolchevique en la Italia de 1919. (El partido Comunista se fundaría en 1921). Ahí podemos ver a Nicola Bombacci, su secretario general, que proclamaba a toda página en sus medios: "La bandera roja triunfará". "Proletarios, la acción es inminente, A la insurrección!!". En 1917 la bandera roja ya había triunfado en Rusia. Tambien en 1919 la bandera roja había triunfado en Hungría de la mano de Bela Kun. Hasta en Baviera se establece la "República Soviética de Baviera".
En Milán hay huelgas revolucionarias y se respira un ambiente presovietico. Pero la falta de firmeza de Bombacci paraliza el movimiento. Como en el caso de Puigdemont y la independencia se queda en meras frases revolucionarias. Ante la multitud dice" La a bandera roja ha llegado a Rusia y queremos que Rusia esté también aquí ". Pero al final todo queda descafeinado y dice: "La huelga es de carácter demostrativo, no revolucionaria". Todos para casa, como Puigdemont en la proclamación durante 7 segundos de la independencia.
La falta de firmeza de estos socialistas soviéticos da alas a Mussolini y sus fuerzas fascistas. Ellos sí que saben usar la violencia en toda su extensión, mucho más que los gente de izquierdas con su utopías revolucionarias.
En noviembre de 1919 los socialistas revolucionarios triunfan con un 33% de los votos y 152 escaños de 500. Los fascistas ningún representante. "Los socialistas han conquistado Italia pero no saben qué hacer con ella' (Scurati). Los nacionalistas apalean a los diputados socialistas por no gritar "Viva el Rey". Los socialistas como de costumbre montan la huelga general. En Milán se respira un ambiente revolucionario pero la Revolución no llega. Los dirigentes socialistas no se atreven a dar el paso definitivo. Marzo de 1920. En Milán siguen la huelgas generales, es una ciudad muerta. En la Fiat los sindicatos quieren controlar cada vez más las empresas. Estas responden con un cierre patronal. En el fondo los sindicatos quieren la revolución pero los socialistas la posponen una vez más. En el campo el 100% de los pueblos están en manos de los Socialistas. En todos hay una Casa del Pueblo, las Ligas Rojas son dueñas de la situación. "Consiguen imponer a los propietarios agrícolas condiciones laborales tales que les privan de la propiedad de la tierra" (Scurati). Se imponen a través de huelgas masivas. La derecha dice que el estado ha abdicado ante la violencia socialista. Pero esta es una nimiedad comparado con la vivencia fascista que vendrá después. El Fascio sí que está armado y preparado para la lucha. En abril de 2020, Bombacci, el " Cristo de los Obreros" viaja a Escandinavia para entrevistarse con el lugarteniente de Lenin. Los comunistas le dicen que 'En Italia el Socialismo es fuerte pero la facción revolucionaria es débil ". Que "la revolución ya ha triunfado en Rusia y ahora quieren restaurar las relaciones comerciales con los estados Capitalistas" A la vuelta Mombacci está muy amargado, la dictadura del proletariado está cada vez más lejos. Aún así en septiembre de de 2020 la CGT con más de 500.000 trabajadores toman 600 fábricas. Las banderas rojas ondean en todas ellas, como en Alfa Romeo. Las fábricas de Italia pasan a manos de los obreros. Un miedo atroz se apodera de las clases burguesas. Primero los campesinos, luego las fábricas. "Una declaracion de guerra" dice el Corriere de la Será. Pero una vez más la revolución no llega. Mussolini se ríe de ellos; "De verdad creéis que el comunismo es posible en Italia, el país más individualista del mundo?"
Los acontecimientos posteriores son conocidos. Mussolini aprovecha el miedo a los Soviets para imponer su particular revolución fascista usando la violencia hasta límites nunca vistos. Van pueblo por pueblo linchando a los dirigentes campesinos. Queman las banderas rojas una por una en aldeas, fábricas y ciudades.
Al final el "Cristo de los Obreros" Nicola Bombacci se acerca al fascismo y acaba siendo un dirigente de ellos. Paradojas de la vida, lo acaban matando a la vez que a Mussolini y le cuelgan boca abajo en la misma plaza de Milan. El que no tuvo huevones para hacer la revolución al final le linchan los revolucionarios.
M., EL HIJO DEL SIGLO | ANTONIO SCURATI | ALFAGUARA | Casa del Libro
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