fausal
Madmaxista
Un aire gélido. De ese que cala y parece que el cuerpo se queda inerte. Esa es la sensación tras encontrar a un fantasma. Tras buscarlo más de un año. Indagando por alguien que parecía una leyenda urbana. Y que algunas veces no son un mito vacío. Se encarnan. Como en este caso. La pura verdad. Había que hallarlo: al ganador del premio más grande jamás entregado en España: 137,3 millones de euros en los Euromillones... Llega en traje oscuro, la chaqueta entallada, unos 165 centímetros de estatura, zapatos a juego, anillo de oro y un reloj espléndido, de la misma marca que utiliza el sultán de Brunei. Se baja de un todoterreno verde oliva de más de 100.000 euros. Trae dos acompañantes, chinos como él. Extiende la mano. Charlamos. Suelta una sentencia...
-Sabes que me siento aún pobre. Soy pobre. Lo soy.
"Era tan pobre que no tenía más que dinero", recuerdo lo que cantaba el viejo Sabina mientras le miro a la cara. En sus ojos cansados de la dura lucha previa, los dientes descalcificados por la antigua mala alimentación, se comprende lo que quiere decir. En el caso de Javi -el nombre con el que le llaman todos- quiere decir que se ve a sí mismo como un hombre humilde... Que recuerda su pasado. Llegó desde la provincia china de Zhejiang, como el 70% de los chinos de España. A luchar duro en comercios orientales, primero. En Barcelona en un restaurante, como asistente de cocina. En Navarra, más de lo mismo. Ahorrando y evaluando en qué gastar sus pocos fondos. Siempre creyendo en el trabajo como fórmula de éxito. Después a Madrid, a trabajar en Cobo Calleja, en Fuenlabrada, el mayor polígono asiático de Europa. Javi es un hombre que antes vivía en Parla, en el extrarradio, zona obrera de Madrid, y que hoy vive en La Finca, la misma urbanización de Cristiano Ronaldo. Ubicada en Pozuelo de Alarcón, es el municipio con mayor renta per capita.
-¿Es cierto que no sólo ganó en los Euromillones?
-Sí. Sí. Recibí 1,86 millones de euros. En la Primitiva.
Escueto en sus palabras. Monosilábico la mayoría de las veces. No domina el castellano con fluidez. Su paso hasta la mayor de las fortunas fue así, no necesitó más que frases cortas y datos precisos. Como cuando hace exactamente 698 días puso un mensaje en su WhatsApp: "Quiero viajar el mundo" [sic]. Habían pasado 168 noches desde que ganó exactamente en La Primitiva esos 1,861 millones de euros. Era su declaración de intenciones tras un golpe con el que un jugador amateur ya se habría retirado, feliz con esa alegría millonaria. Él no...
-¿Debe ser usted el hombre con más suerte de España? ¿Del mundo?
-[Hace una pausa larga, cierra los ojos, mira arriba, a derecha, a izquierda, toma aire] Sí. Sí... Dos grandes premios son míos...
Dos carcajadas tímidas. Se sujeta el anillo de oro que le regaló su mujer, el que reemplazaba el anterior, más austero. Él le atribuye a ella gran parte de su fortuna. Hay una permanente sensación de agradecimiento en cada frase. De no creer lo que ha sucedido.
-¿Cuál fue su reacción cuando ganó su primer premio? ¿Se mordió las manos?
-No pude dormir en tres días. Ojos abiertos, mirada en el techo. Fue la felicidad, mucho mayor que cuando tocó la segunda vez.
-¿En qué lo gastó?
-Gasté poco. Primero me compré un piso en Parla. Vivía de alquilado antes... Justo acababa de venir mi mujer de China. Por eso creo que lo que he conseguido es por mi mujer. Ella llegó el 13 de septiembre de 2013. Mi familia me trajo la suerte.
Habían pasado sólo 48 días entre la llegada de su amada Lili y el pequeño Juan, su primer hijo [nombres cambiados por seguridad]. Su alegría por ese primer premio en La Primitiva es tremenda. Los números premiados: 07, 33, 35, 36, 39 y 40. Hay una entre 13,9 millones de posibilidades de que le toque a un jugador con una apuesta simple. Él jugó un poco más.
-Invertí siete euros. Y gané 1.861.536,14 euros... Apuesto mucho desde entonces.
-¿Siguió trabajando?
Javi sostiene el billete que le dio 137.3 millones de euros MARTÍN MUCHA
-Sí. No era suficiente para retirarse. Sé lo que es. Llegué hace 18 años a España. Trabajé de todo: restaurantes chinos, españoles, en Cobo Calleja, en Todo a cien. Ordenaba, limpiaba. Eso sí, cuando me tocó el premio grande, lo dejé todo.
-Era junio de 2014. Ganó 137.313.501 euros... ¿Todavía esta descolocado con tanto dinero?
-Aún. Había apostado 42 euros. Fui con el billete al banco. Ellos manejan todo, los intereses, las inversiones...
Apuesta por fondos de inversión relativamente seguros, los que le han dado intereses suculentos. Pero ahora con la caída del Ibex-35, él lo sufre. Pese a ser de noche, su asesor financiero se reunirá con él en horas.
-¿Cuánto ha perdido en Bolsa?
-He ganado y he perdido.
-¿De qué vive? ¿De los intereses?
-Sí. De los fondos de inversión. Aunque este año ha sido malo. En los últimos meses, he perdido más de un millón. Mucho.
-¿Quién decide dónde invertir?
-Sigo los consejos de los asesores financieros. Es la banca privada de... Yo soy uno de los clientes mayores de mi banco. ¡Son muy macho cabríoes! Está bien. Está bien. A comprar... Y la Bolsa cae.
-¿Por qué eligió La Finca para comprarse allí su nueva casa?
-Hay mucha gente mala y buscaba seguridad. Aquí es más tranquilo.
-¿Tiene de vecino a Cristiano?
-Vive al lado.
-¿Se lo ha cruzado?
-Más a su niño. Ha jugado con mis hijos.
-¿Es el único chino en la urbanización?
-Muchos chinos ricos viven aquí. Somos muchos... Más de 10 familias. Me compré la casa para estar tranquilo.
No entra en detalles precisos sobre cuánto le costó su residencia [unos 1.000 metros cuadrados construidos]. "Los precios mínimos de una propiedad en esta urbanización están en los adosados de Los Lagos 1, que rondan 1.550.000 euros. El precio máximo en La Finca puede alcanzar los 20.000.000 euros", refiere Jorge Salido, del suplemento Su Vivienda de EL MUNDO.
-¿Y el piso de Parla?
-Está tranquilo. Ni lo alquilo, ni lo vendo.
-¿Pagó 27 millones de impuestos?
-28 millones a Hacienda.
-¿Duele?
-No, para España muy bien. Lo que pueda ayudar, lo haré. Me gusta mucho este país. Aquí me voy a quedar...
El lotero de sus grandes premios
A pesar de los lujos propios de un nuevo rico, no hace alarde de despilfarro. Paga lo que puede pagar, sin negarse caprichos. Parte de los buenos consejos vienen de los que le dio hace años un lotero, Ángel González, de la administración de lotería número 7 de Parla, en el centro comercial El Ferial. En su local hay un enorme letrero que celebra el premio que ganó Javi: "Aquí el mayor premio de la Historia". El propio González no sabía quién era el ganador. Contactamos con él.
-¿Sabe quién es el ganador de los 137,3 millones de euros?
-No. Y aunque lo supiera no se lo diría.
-¿En su administración también se dieron 1,9 millones de euros?
-Así es.
-Sabe que es la misma persona la que obtuvo el premio mayor.
-No. Pero siempre tuve la sospecha.
-¿Vino a contarle su buena ventura?
-Sí, la primera vez. Era cliente mío. Me enseñó el boleto y le dije: "¡Es el billete ganador!". Le di las instrucciones y las recomendaciones sobre qué hacer con el dinero. Estuvimos hablando varias veces. Hablábamos de vez en cuando. Fue un golpe que cambió su vida.
-¿Su nombre era Javi?
-Sí.
En su voz se percibe la satisfacción porque fuera el ganador.
-¿Qué le aconsejó?
-Era el típico chino trabajador. Tenía su pequeño negocio. Comentábamos las combinaciones. Él parecía tomar nota de todo... A raíz de darle el premio de la Primitiva, me ofrecí para asesorarle. Le dije que no se pusiera nervioso con tanto dinero. Que meditase. Que diversificase. De hecho, le ofrecí un asesor de un banco. El responsable de la banca privada de Bankinter. Él optó por otra entidad.
EN 225 DÍAS, EN LA MISMA ADMINISTRACIÓN. La número 7 de Parla. Los propietarios, Ángel González y su esposa Pilar, no conocían que los dos premios más grandes los había ganado la misma persona, menos un ciudadano chino. "Pensándolo fríamente es impresionante. Hay gente que le toca la lotería más de una vez..Pero algo como esto es casi imposible", dice Ángel. MARTÍN MUCHA
-¿Qué hizo cuando supo que en su administración había tocado el premio histórico?
-Le llamé por teléfono. ¿No serás tú? "No sé. No sé. El billete lo tiene mi mujer...", me respondió. Cuando volví a comunicarme me dijo rotundo que no era él. Le perdí la pista.
-¿Como vendedor de lotería conoce un caso similar?
-Pensándolo fríamente es impresionante. Hay gente que le toca la lotería más de una vez... Pero algo como esto es casi imposible.
Ya habíamos señalado que acertar los seis números de la primitiva era una posibilidad entre 14 millones. Que a un ser humano le toquen los Euromillones, implica una opción entre 116.531.800. Que le toquen ambos premios a una persona, en un plazo menor de 8 meses, eleva exponencialmente la cifra. Sólo haciendo una sumatoria, serían 140,5 millones a uno. Pero añadiendo el baremo del tiempo, es cuasi inestimable. ¿Una ecuación de esta fortuna "casi imposible"? ¿Mil millones a uno? Quizá. O más.
-¿Es realmente extraño que, además, le toque a un cliente chino?
-Eso no lo es tanto. Tenemos numerosos clientes chinos, que además juegan buenas cantidades. Desde el obrero al jefe, el empresario. Para nosotros son muy importantes, les tenemos el máximo respeto. Y Javi era un cliente mimado.
-¿Le habían preguntado muchas veces sus clientes quién fue el ganador?
-Casi cada semana. Al principio llamaron de todos los medios. Siempre hubo especulaciones...
-¿Cómo era Javi antes del premio?
-Vestía de sport, con cazadora, jersey de cuello alto. Muy sencillo.
-¿Cómo se lo imagina hoy?
-En una buena casa. Y en aviones. Quería viajar por el mundo.
A todo lujo por Ibiza y París
Lo va haciendo. Sus últimos destinos reconocidos han sido París e Ibiza. Pagándole el viaje a sus mejores amigos. Sin medir gastos en su Tarjeta Visa Infinite, sólo para mega ricos, la competidora de la Centurion de American Express. Javi la busca en su cartera. No la encuentra. Enciende un pitillo. El ruido de la cafetería oculta la conversación.
-Cuénteme de sus lujos. ¿Qué coche se ha comprado?
-Un Porsche Panamera.
-¿Cómo fue cuando acudió a comprarlo y le dijo al dependiente: "me lo llevo"? ¿Le preguntó cómo iba a pagar?
-Sí. Y yo respondí así [y golpea la mesa levemente con el puño].
-¿Se sorprendió?
-Sí.
-¿Algún otro supercoche?
-Tengo varios. Un BMW. Un Ferrari...
-¿Modelos?
-No me acuerdo [risas].
Su memoria selectiva es por seguridad. "Entre 120.000 y 220.000 cuesta un Porsche Panamera. Un Ferrari vale desde 215.000, el California, el de menor precio... Hasta los 311.000, el F12", nos dice Sergio Piccione, experto en Motor de este periódico. "Si da los datos exactos sería muy fácilmente identificarle, pues no se venden tantas unidades en España".
Javi medita cada respuesta para no ponerse en riesgo.
-¿Y ese reloj? ¿Es un Roger Dubois?
-Sí. Es barato.
-¿La ropa? Esa chaqueta que tan bien le queda...
-Es normal, vale 100 euros. Voy a las tiendas a las que van todos.
-Ropa low-cost con un reloj que vale como mínimo 16.000 euros.
-...[Más risas].
-¿Algún deporte? ¿Gimnasio?
-Me ayuda a pensar jugar al golf.
-¿Se despierta tranquilo?
-Siempre.
Lo que de verdad le da paz, una bendición, es tener a la familia cerca. A su mujer, al primogénito que se trajeron de China y al pequeño que ya nació aquí. Por ahora sólo hablan chino. Los cuida una progenitora entregada.
El hombre con más suerte del mundo da una calada al cigarro.
-¿Se quedarán a vivir en España?
-Nos quedaremos, sí.
-Aparte de la suerte que le trae su familia, ¿Números favoritos? ¿O deja todo al azar?
-Los elijo yo. Mucha gente apuesta automáticamente y es un error para mí. Hay que calcular los números, pensar.
-Cuénteme acerca de su método. ¿En qué se basa?
-Analizo frente al ordenador los números anteriores.
-¿Siempre juega los mismos números?
-No. Voy cambiando. Le doy a la misma combinación dos o tres oportunidades. Si no toca nada, otros. Eso sí, dibujo en un papel siempre los números que me vienen a la mente.
-¿Sigue apostando cotidianamente?
-Cuando hay botes grandes.
-¿Cuánto juega?
-Mucho...
-¿300? ¿500 euros?
-De 3.000 a 8.000.
-¿Los pierde?
-Mi media es ganar la mitad. Mi récord ha sido gastar 9.000.
-¿Resultado?
-Gané 20.000.
-¿Quiere usted decirme que juega a la lotería y nunca pierde?
-En total siempre gano... ¡No! Es broma.
-¿Ha estado cerca de ganar otra vez?
-Ya me ha tocado la primera vez. Ya sé cómo va. Sigo apostando. Nunca se sabe.
Dice haber nacido en 1973, a final de año. De signo del zodiaco, Capricornio. En el horóscopo chino, es buey. ¿Qué representa para la astrología oriental? La prosperidad.
-Aún no ha invertido su dinero en un negocio, si lo hace ¿dónde lo hará?
-En este país sin duda. ¡Gracias España!
-¿Sintió alguna vez racismo aquí?
-Nunca. Me han tratado siempre bien. Antes y después...
-Aun así es muy precavido.
-Es que hay gente mala. A veces tengo mucho miedo...
Se coge el pelo. Lo peina para atrás. A Javi le aterra su seguridad. Por eso se alejó de todo su pasado en Parla, inició una nueva vida en La Finca. Observo su rostro. Tiene una cicatriz grande en la cara.
-¿Cómo se la hizo?
-Cuando era pequeño. Entre los seis años y los ocho años. Mi abuela tenia un cuchillo grande y pasé corriendo.
-¿A qué se dedicaban sus padres?
-En China, mis padres ya están jubilados. Antes trabajaban como obreros.
-Hijo de obreros. Ahora multimillonario...
-Yo soy pobre. Mi alma es humilde.
Mentiras y leyendas
Repite esa frase. Y se coge las manos. Acaricia su anillo. Observa a sus acompañantes. Da un sorbo a un café. Otro...
-¿Cómo me encontró? -indaga ahora Javi. Curioso, pasando al contragolpe.
-La semana después en que ganó los Euromillones [13 de junio de 2014], un vecino suyo me dijo que el premio le había tocado a un ciudadano chino. No me quiso decir más. Desde entonces lo busco...
-Hice distintas pesquisas y me llevaron a encontrar a gente que le conocía. Hasta que usted se convirtió en una leyenda urbana. Hay foros de internet que repetían la misma idea...
"Dicen que le ha tocado a un chino", se escribió en uno de ellos, de residentes de Parla, la urbe más activa de España según el INE. "Mi vecino que tiene un bar me comentó que es del barrio de toda la vida y justo dijo "me ha tocado" y se fue", negaba otro comentario. Los periódicos de toda España hablaban de su caso. "Está desaparecido", titulaban.
-Yo lo leía todo, pero ninguno era yo. Aquí estoy. Éste soy yo.
¿Lavado de dinero? Su fortuna la atribuye a la suerte.Todos sus impuestos pagados... Parte de viaje cual escape. Puede cumplir con aquel mensaje. "Viajar por el mundo". Caprichos. Lujos. Todos a medida. Se sube al todoterreno. Da un último sorbo al café. El pitillo, cenizas. Enciende otro. Quiere irse a casa y lo hace. Antes, las fotos. El hombre más afortunado del mundo arrastra los pies. Se detiene cerca de un árbol, las ramas filtran la luz de una farola. En apariencia, aura.
El hombre con más suerte del mundo | Crónica | EL MUNDO
-Sabes que me siento aún pobre. Soy pobre. Lo soy.
"Era tan pobre que no tenía más que dinero", recuerdo lo que cantaba el viejo Sabina mientras le miro a la cara. En sus ojos cansados de la dura lucha previa, los dientes descalcificados por la antigua mala alimentación, se comprende lo que quiere decir. En el caso de Javi -el nombre con el que le llaman todos- quiere decir que se ve a sí mismo como un hombre humilde... Que recuerda su pasado. Llegó desde la provincia china de Zhejiang, como el 70% de los chinos de España. A luchar duro en comercios orientales, primero. En Barcelona en un restaurante, como asistente de cocina. En Navarra, más de lo mismo. Ahorrando y evaluando en qué gastar sus pocos fondos. Siempre creyendo en el trabajo como fórmula de éxito. Después a Madrid, a trabajar en Cobo Calleja, en Fuenlabrada, el mayor polígono asiático de Europa. Javi es un hombre que antes vivía en Parla, en el extrarradio, zona obrera de Madrid, y que hoy vive en La Finca, la misma urbanización de Cristiano Ronaldo. Ubicada en Pozuelo de Alarcón, es el municipio con mayor renta per capita.
-¿Es cierto que no sólo ganó en los Euromillones?
-Sí. Sí. Recibí 1,86 millones de euros. En la Primitiva.
Escueto en sus palabras. Monosilábico la mayoría de las veces. No domina el castellano con fluidez. Su paso hasta la mayor de las fortunas fue así, no necesitó más que frases cortas y datos precisos. Como cuando hace exactamente 698 días puso un mensaje en su WhatsApp: "Quiero viajar el mundo" [sic]. Habían pasado 168 noches desde que ganó exactamente en La Primitiva esos 1,861 millones de euros. Era su declaración de intenciones tras un golpe con el que un jugador amateur ya se habría retirado, feliz con esa alegría millonaria. Él no...
-¿Debe ser usted el hombre con más suerte de España? ¿Del mundo?
-[Hace una pausa larga, cierra los ojos, mira arriba, a derecha, a izquierda, toma aire] Sí. Sí... Dos grandes premios son míos...
Dos carcajadas tímidas. Se sujeta el anillo de oro que le regaló su mujer, el que reemplazaba el anterior, más austero. Él le atribuye a ella gran parte de su fortuna. Hay una permanente sensación de agradecimiento en cada frase. De no creer lo que ha sucedido.
-¿Cuál fue su reacción cuando ganó su primer premio? ¿Se mordió las manos?
-No pude dormir en tres días. Ojos abiertos, mirada en el techo. Fue la felicidad, mucho mayor que cuando tocó la segunda vez.
-¿En qué lo gastó?
-Gasté poco. Primero me compré un piso en Parla. Vivía de alquilado antes... Justo acababa de venir mi mujer de China. Por eso creo que lo que he conseguido es por mi mujer. Ella llegó el 13 de septiembre de 2013. Mi familia me trajo la suerte.
Habían pasado sólo 48 días entre la llegada de su amada Lili y el pequeño Juan, su primer hijo [nombres cambiados por seguridad]. Su alegría por ese primer premio en La Primitiva es tremenda. Los números premiados: 07, 33, 35, 36, 39 y 40. Hay una entre 13,9 millones de posibilidades de que le toque a un jugador con una apuesta simple. Él jugó un poco más.
-Invertí siete euros. Y gané 1.861.536,14 euros... Apuesto mucho desde entonces.
-¿Siguió trabajando?
Javi sostiene el billete que le dio 137.3 millones de euros MARTÍN MUCHA
-Sí. No era suficiente para retirarse. Sé lo que es. Llegué hace 18 años a España. Trabajé de todo: restaurantes chinos, españoles, en Cobo Calleja, en Todo a cien. Ordenaba, limpiaba. Eso sí, cuando me tocó el premio grande, lo dejé todo.
-Era junio de 2014. Ganó 137.313.501 euros... ¿Todavía esta descolocado con tanto dinero?
-Aún. Había apostado 42 euros. Fui con el billete al banco. Ellos manejan todo, los intereses, las inversiones...
Apuesta por fondos de inversión relativamente seguros, los que le han dado intereses suculentos. Pero ahora con la caída del Ibex-35, él lo sufre. Pese a ser de noche, su asesor financiero se reunirá con él en horas.
-¿Cuánto ha perdido en Bolsa?
-He ganado y he perdido.
-¿De qué vive? ¿De los intereses?
-Sí. De los fondos de inversión. Aunque este año ha sido malo. En los últimos meses, he perdido más de un millón. Mucho.
-¿Quién decide dónde invertir?
-Sigo los consejos de los asesores financieros. Es la banca privada de... Yo soy uno de los clientes mayores de mi banco. ¡Son muy macho cabríoes! Está bien. Está bien. A comprar... Y la Bolsa cae.
-¿Por qué eligió La Finca para comprarse allí su nueva casa?
-Hay mucha gente mala y buscaba seguridad. Aquí es más tranquilo.
-¿Tiene de vecino a Cristiano?
-Vive al lado.
-¿Se lo ha cruzado?
-Más a su niño. Ha jugado con mis hijos.
-¿Es el único chino en la urbanización?
-Muchos chinos ricos viven aquí. Somos muchos... Más de 10 familias. Me compré la casa para estar tranquilo.
No entra en detalles precisos sobre cuánto le costó su residencia [unos 1.000 metros cuadrados construidos]. "Los precios mínimos de una propiedad en esta urbanización están en los adosados de Los Lagos 1, que rondan 1.550.000 euros. El precio máximo en La Finca puede alcanzar los 20.000.000 euros", refiere Jorge Salido, del suplemento Su Vivienda de EL MUNDO.
-¿Y el piso de Parla?
-Está tranquilo. Ni lo alquilo, ni lo vendo.
-¿Pagó 27 millones de impuestos?
-28 millones a Hacienda.
-¿Duele?
-No, para España muy bien. Lo que pueda ayudar, lo haré. Me gusta mucho este país. Aquí me voy a quedar...
El lotero de sus grandes premios
A pesar de los lujos propios de un nuevo rico, no hace alarde de despilfarro. Paga lo que puede pagar, sin negarse caprichos. Parte de los buenos consejos vienen de los que le dio hace años un lotero, Ángel González, de la administración de lotería número 7 de Parla, en el centro comercial El Ferial. En su local hay un enorme letrero que celebra el premio que ganó Javi: "Aquí el mayor premio de la Historia". El propio González no sabía quién era el ganador. Contactamos con él.
-¿Sabe quién es el ganador de los 137,3 millones de euros?
-No. Y aunque lo supiera no se lo diría.
-¿En su administración también se dieron 1,9 millones de euros?
-Así es.
-Sabe que es la misma persona la que obtuvo el premio mayor.
-No. Pero siempre tuve la sospecha.
-¿Vino a contarle su buena ventura?
-Sí, la primera vez. Era cliente mío. Me enseñó el boleto y le dije: "¡Es el billete ganador!". Le di las instrucciones y las recomendaciones sobre qué hacer con el dinero. Estuvimos hablando varias veces. Hablábamos de vez en cuando. Fue un golpe que cambió su vida.
-¿Su nombre era Javi?
-Sí.
En su voz se percibe la satisfacción porque fuera el ganador.
-¿Qué le aconsejó?
-Era el típico chino trabajador. Tenía su pequeño negocio. Comentábamos las combinaciones. Él parecía tomar nota de todo... A raíz de darle el premio de la Primitiva, me ofrecí para asesorarle. Le dije que no se pusiera nervioso con tanto dinero. Que meditase. Que diversificase. De hecho, le ofrecí un asesor de un banco. El responsable de la banca privada de Bankinter. Él optó por otra entidad.
EN 225 DÍAS, EN LA MISMA ADMINISTRACIÓN. La número 7 de Parla. Los propietarios, Ángel González y su esposa Pilar, no conocían que los dos premios más grandes los había ganado la misma persona, menos un ciudadano chino. "Pensándolo fríamente es impresionante. Hay gente que le toca la lotería más de una vez..Pero algo como esto es casi imposible", dice Ángel. MARTÍN MUCHA
-¿Qué hizo cuando supo que en su administración había tocado el premio histórico?
-Le llamé por teléfono. ¿No serás tú? "No sé. No sé. El billete lo tiene mi mujer...", me respondió. Cuando volví a comunicarme me dijo rotundo que no era él. Le perdí la pista.
-¿Como vendedor de lotería conoce un caso similar?
-Pensándolo fríamente es impresionante. Hay gente que le toca la lotería más de una vez... Pero algo como esto es casi imposible.
Ya habíamos señalado que acertar los seis números de la primitiva era una posibilidad entre 14 millones. Que a un ser humano le toquen los Euromillones, implica una opción entre 116.531.800. Que le toquen ambos premios a una persona, en un plazo menor de 8 meses, eleva exponencialmente la cifra. Sólo haciendo una sumatoria, serían 140,5 millones a uno. Pero añadiendo el baremo del tiempo, es cuasi inestimable. ¿Una ecuación de esta fortuna "casi imposible"? ¿Mil millones a uno? Quizá. O más.
-¿Es realmente extraño que, además, le toque a un cliente chino?
-Eso no lo es tanto. Tenemos numerosos clientes chinos, que además juegan buenas cantidades. Desde el obrero al jefe, el empresario. Para nosotros son muy importantes, les tenemos el máximo respeto. Y Javi era un cliente mimado.
-¿Le habían preguntado muchas veces sus clientes quién fue el ganador?
-Casi cada semana. Al principio llamaron de todos los medios. Siempre hubo especulaciones...
-¿Cómo era Javi antes del premio?
-Vestía de sport, con cazadora, jersey de cuello alto. Muy sencillo.
-¿Cómo se lo imagina hoy?
-En una buena casa. Y en aviones. Quería viajar por el mundo.
A todo lujo por Ibiza y París
Lo va haciendo. Sus últimos destinos reconocidos han sido París e Ibiza. Pagándole el viaje a sus mejores amigos. Sin medir gastos en su Tarjeta Visa Infinite, sólo para mega ricos, la competidora de la Centurion de American Express. Javi la busca en su cartera. No la encuentra. Enciende un pitillo. El ruido de la cafetería oculta la conversación.
-Cuénteme de sus lujos. ¿Qué coche se ha comprado?
-Un Porsche Panamera.
-¿Cómo fue cuando acudió a comprarlo y le dijo al dependiente: "me lo llevo"? ¿Le preguntó cómo iba a pagar?
-Sí. Y yo respondí así [y golpea la mesa levemente con el puño].
-¿Se sorprendió?
-Sí.
-¿Algún otro supercoche?
-Tengo varios. Un BMW. Un Ferrari...
-¿Modelos?
-No me acuerdo [risas].
Su memoria selectiva es por seguridad. "Entre 120.000 y 220.000 cuesta un Porsche Panamera. Un Ferrari vale desde 215.000, el California, el de menor precio... Hasta los 311.000, el F12", nos dice Sergio Piccione, experto en Motor de este periódico. "Si da los datos exactos sería muy fácilmente identificarle, pues no se venden tantas unidades en España".
Javi medita cada respuesta para no ponerse en riesgo.
-¿Y ese reloj? ¿Es un Roger Dubois?
-Sí. Es barato.
-¿La ropa? Esa chaqueta que tan bien le queda...
-Es normal, vale 100 euros. Voy a las tiendas a las que van todos.
-Ropa low-cost con un reloj que vale como mínimo 16.000 euros.
-...[Más risas].
-¿Algún deporte? ¿Gimnasio?
-Me ayuda a pensar jugar al golf.
-¿Se despierta tranquilo?
-Siempre.
Lo que de verdad le da paz, una bendición, es tener a la familia cerca. A su mujer, al primogénito que se trajeron de China y al pequeño que ya nació aquí. Por ahora sólo hablan chino. Los cuida una progenitora entregada.
El hombre con más suerte del mundo da una calada al cigarro.
-¿Se quedarán a vivir en España?
-Nos quedaremos, sí.
-Aparte de la suerte que le trae su familia, ¿Números favoritos? ¿O deja todo al azar?
-Los elijo yo. Mucha gente apuesta automáticamente y es un error para mí. Hay que calcular los números, pensar.
-Cuénteme acerca de su método. ¿En qué se basa?
-Analizo frente al ordenador los números anteriores.
-¿Siempre juega los mismos números?
-No. Voy cambiando. Le doy a la misma combinación dos o tres oportunidades. Si no toca nada, otros. Eso sí, dibujo en un papel siempre los números que me vienen a la mente.
-¿Sigue apostando cotidianamente?
-Cuando hay botes grandes.
-¿Cuánto juega?
-Mucho...
-¿300? ¿500 euros?
-De 3.000 a 8.000.
-¿Los pierde?
-Mi media es ganar la mitad. Mi récord ha sido gastar 9.000.
-¿Resultado?
-Gané 20.000.
-¿Quiere usted decirme que juega a la lotería y nunca pierde?
-En total siempre gano... ¡No! Es broma.
-¿Ha estado cerca de ganar otra vez?
-Ya me ha tocado la primera vez. Ya sé cómo va. Sigo apostando. Nunca se sabe.
Dice haber nacido en 1973, a final de año. De signo del zodiaco, Capricornio. En el horóscopo chino, es buey. ¿Qué representa para la astrología oriental? La prosperidad.
-Aún no ha invertido su dinero en un negocio, si lo hace ¿dónde lo hará?
-En este país sin duda. ¡Gracias España!
-¿Sintió alguna vez racismo aquí?
-Nunca. Me han tratado siempre bien. Antes y después...
-Aun así es muy precavido.
-Es que hay gente mala. A veces tengo mucho miedo...
Se coge el pelo. Lo peina para atrás. A Javi le aterra su seguridad. Por eso se alejó de todo su pasado en Parla, inició una nueva vida en La Finca. Observo su rostro. Tiene una cicatriz grande en la cara.
-¿Cómo se la hizo?
-Cuando era pequeño. Entre los seis años y los ocho años. Mi abuela tenia un cuchillo grande y pasé corriendo.
-¿A qué se dedicaban sus padres?
-En China, mis padres ya están jubilados. Antes trabajaban como obreros.
-Hijo de obreros. Ahora multimillonario...
-Yo soy pobre. Mi alma es humilde.
Mentiras y leyendas
Repite esa frase. Y se coge las manos. Acaricia su anillo. Observa a sus acompañantes. Da un sorbo a un café. Otro...
-¿Cómo me encontró? -indaga ahora Javi. Curioso, pasando al contragolpe.
-La semana después en que ganó los Euromillones [13 de junio de 2014], un vecino suyo me dijo que el premio le había tocado a un ciudadano chino. No me quiso decir más. Desde entonces lo busco...
-Hice distintas pesquisas y me llevaron a encontrar a gente que le conocía. Hasta que usted se convirtió en una leyenda urbana. Hay foros de internet que repetían la misma idea...
"Dicen que le ha tocado a un chino", se escribió en uno de ellos, de residentes de Parla, la urbe más activa de España según el INE. "Mi vecino que tiene un bar me comentó que es del barrio de toda la vida y justo dijo "me ha tocado" y se fue", negaba otro comentario. Los periódicos de toda España hablaban de su caso. "Está desaparecido", titulaban.
-Yo lo leía todo, pero ninguno era yo. Aquí estoy. Éste soy yo.
¿Lavado de dinero? Su fortuna la atribuye a la suerte.Todos sus impuestos pagados... Parte de viaje cual escape. Puede cumplir con aquel mensaje. "Viajar por el mundo". Caprichos. Lujos. Todos a medida. Se sube al todoterreno. Da un último sorbo al café. El pitillo, cenizas. Enciende otro. Quiere irse a casa y lo hace. Antes, las fotos. El hombre más afortunado del mundo arrastra los pies. Se detiene cerca de un árbol, las ramas filtran la luz de una farola. En apariencia, aura.
El hombre con más suerte del mundo | Crónica | EL MUNDO