El gobernador de Florida firma un poryecto de ley para quitar privilegios a Disney World

Gobernador de Florida, Ron DeSantis (Getty Images)



El gobernador de Florida, Ron DeSantis, firmó el viernes un proyecto de ley para disolver el gobierno privado de Walt Disney World, luego de que el gigante del entretenimiento criticara una medida que los críticos han denominado burlonamente como la ley "No digas lgtb".

Lo hizo y también firmó la "Ley Stop pogre", que entra en vigencia el 1 de julio y prohíbe que las escuelas públicas y las empresas privadas de Florida hagan que las personas se sientan incómodas o culpables por motivos de raza, sesso u origen nacional.

La nueva acción de Disney elimina el Distrito de Mejoramiento de Reedy Creek, como se conoce al gobierno de Disney de 55 años, así como un puñado de otros distritos similares para junio de 2023. La medida permite que se restablezcan los distritos, dejando una avenida para renegociar su futuro. Esto, luego de que DINEY tomara una posición en contra de la acción de Florida para detener las discusiones LGBTQ en las escuelas.


“Creemos en la educación, no en el adoctrinamiento”, dijo DeSantis en una conferencia de prensa, según los informes. "Creemos que un componente importante de la libertad en el estado de Florida es la libertad de que se le opongan ideologías opresivas sin su consentimiento".

La acción de Disney podría tener enormes implicaciones fiscales para la compañía, un pilar de Florida cuyos parques temáticos han tras*formado a Orlando en uno de los destinos turísticos más populares del mundo, y sirve para agriar aún más la relación entre el gobierno encabezado por los republicanos y un actor político importante en el estado.

La represión se produjo después de que Disney se mostró en desacuerdo con la adopción en Florida de la ley de derechos de los padres en la educación, que restringe la discusión de temas LGBTQ en las escuelas. El gobernador republicano de Florida y la legislatura liderada por el Partido Republicano han planteado el tema como central en las guerras culturales estadounidenses, insistiendo en que los niños, en particular los más pequeños, son demasiado vulnerables a las sugerencias y demasiado jóvenes para comprender las implicaciones de un tema complejo que puede alterar la vida. .

El propio Disney ha sido criticado por sus empleados por no defender con suficiente fuerza la representación y los derechos LGBTQ. Pero a medida que ha intensificado su oposición a la ley de derechos de los padres de Florida, ha desencadenado un tipo diferente de reacción, de los conservadores que dicen que los padres, no los educadores o los principales conglomerados de entretenimiento, deberían ser los que decidan cuándo o si las conversaciones LGBTQ con los jóvenes son adecuado.

En medio del choque, el valor de las acciones de D9sney ha bajado. La acción bajó $3,35 (2,75 %) el viernes, $11,75 (9 %) la semana pasada, $19 (14 %) el mes pasado y $53,74 (31 %) los últimos seis meses


De los pocos políticos decentes que quedan.