El Football Leaks, el censor y la autocensura | ctxt.es
Doce periódicos europeos reunidos en la nueva red de medios European Investigative Collaborations (EIC) están publicando, desde el 2 de diciembre, la operación Football Leaks, calificada como la fuga de documentos más amplia de la historia del deporte.
Obtenidos por el semanario alemán Der Spiegel, esos 18,6 millones de documentos desvelan los secretos de la pujante industria del fútbol. Fraude y evasión fiscal, redes de prespitación, conexiones mafiosas, explotación de jugadores menores de edad… 60 periodistas, asociados a ocho informáticos, han investigado estos documentos durante más de seis meses.
El proyecto reúne, junto a Der Spiegel, a Mediapart (Francia), The Sunday Times (Reino Unidos), Expresso (Portugal), El Mundo (España), L’Espresso (Italia), Le Soir (Bélgica), NRC Handelsblad (Países Bajos) y The Black Sea, un digital creado por el Centro Rumano por el Periodismo de Investigación.
El escándalo salpica a la élite del fútbol europeo y apunta directamente al agente Jorge Mendes, portugués de 50 años, como centro de operaciones. Los documentos revelan una monumental red de evasión fiscal que ha facilitado la ocultación de, al menos, 188 millones de euros de beneficios de sponsoring, a través de una maraña de sociedades pantalla y de cuentas offshore siutadas en Irlanda, las Islas Vírgenes Británicas, Panamá y Suiza. De este total de ingresos, 150 millones corresponden únicamente a Ronaldo.
Según los medios del EIC, Ronaldo, Mourinho y otras estrellas de la galaxia Mendes llevan años utilizando un sistema masivo y ultra-organizado de evasión de capitales, elaborado por el abogado de Mendes, Carlos Osorio, a través de empresas como Gestifute, Polaris y MIM. "Durante los últimos siete años, la gran figura del Real Madrid ha cobrado, con total discreción, un total de 149,5 millones de euros, fruto de sus beneficios de sponsoring, en paraísos fiscales. De esta fortuna, el delantero sólo ha pagado 5,6 millones de impuestos. Es decir, apenas el 4%. Toda una proeza”, apostilla Mediapart.
La investigación ha permitido saber que, el 20 de diciembre de 2014, Cristiano Ronaldo vendió por 74,7 millones de euros sus derechos de marketing para los años 2015-2020, para continuar beneficiándose de un régimen fiscal ventajoso (la ley del impatriado, o ley Behckam) que iba a desaparecer solo doce días después. De esta manera, eludió 31 millones de euros en impuestos, según el EIC.
La lista de los beneficiarios se completa con otros representados de Mendes: Mourinho, hoy en el Manchester United; Radamel Falcao, el delantero colombiano que jugó en el Atlético de Madrid y hoy milita en el AS Mónaco; tres jugadores portugueses que han pasado también por el Madrid y/o el Mónaco: Ricardo Carvalho, Fabio Coentrao y Pepe; y el colombiano James Rodríguez, comprado por el Real Madrid al Mónaco por 80 millones de euros.
“Entre bastidores, Mendes ayuda a sus clientes más ricos a eludir impuestos en sus países de residencia. Todo con la participación financiera, o bien con la complicidad, del club más grande del mundo, el Real Madrid”, sostiene Mediapart.
El asunto ha generado reacciones de diversa índole. Mientras en Europa la noticia suscitaba amplio interés, algunos grandes medios españoles, como El País, Marca, As o La Sexta, decidían silenciar casi por completo su existencia, y algunos periodistas afines al presidente del Real Madrid, Florentino Pérez, intentaban minimizar el alcance del escándalo situándolo al nivel del caso Messi.
El jugador del Barcelona fue condenado en julio de 2016 a 21 meses de prisión por tres delitos fiscales relacionados con sus derechos de imagen: la suma de la cifra evadida se elevaba a 4,1 millones de euros, incluidos los intereses de demora.
Mediapart cree que, más allá de equipos, la Hacienda española dispensa un “trato de favor” a Cristiano Ronaldo: “Por montajes offshore idénticos, otros empleados del Real Madrid, entre ellos José Mourinho, han sido objeto de una sanción fiscal. Jugadores como Samuel Eto’o y Lionel Messi han sido procesados judicialmente por montantes muy inferiores. Pero Ronaldo es, aparentemente, un contribuyente aparte. Lo que siembra ciertas dudas sobre las protecciones de las que podría beneficiarse”.
Y añade: "El jugador portugués recibió, entre 2009 y 2014, 74,8 millones de euros en diferentes cuentas en Suiza, a través de una sociedad offshore inscrita en las Islas Vírgenes Británicas, sin comunicar esta información al fisco. Por miedo a ser descubierto, Ronaldo terminó por declarar una parte. Se puso en marcha una inspección fiscal. Pero sus abogados consiguieron milagrosamente evitar cualquier tipo de sanción. Según nuestras informaciones, ni siquiera tuvo que pagar intereses de demora por su tardía y parcial declaración de impuestos".
Tres imputados, un juez de lo militar
La respuesta de la Justicia española ante las revelaciones ha sido ambivalente. El 7 de diciembre, la Fiscalía de Madrid denunció a tres exjugadores del Madrid por fraude fiscal: Xavi Alonso, Ángel di María y Ricardo Carvalho, y dijo que investiga a Fabio Coentrao y a Radamel Falcao.
Un día después de la publicación de la noticia sobre el presunto fraude, el 3 de diciembre, El Mundo reveló que el juez Arturo Zamarriego había enviado un requerimiento prohibiéndole la publicación de cualquier información relacionada con el Football Leaks. Dicha decisión no fue respetada por el periódico.
El gabinete Senn Ferrero, fundado y dirigido por Julio Senn y Javier Ferrero, dos abogados que han trabajado para el Real Madrid, sostiene que los documentos usados en la investigación fueron robados en un ataque informático sufrido hace meses. Senn Ferrero denunció esa intrusión y pidió al juez que impidiera la publicación de los documentos, alegando que podría atentar contra ”el honor” y ”la imagen” de sus clientes.
El juez Zamarriego, que procede de la jurisdicción militar, dio la razón a la "boutique especializada al (sic) asesoramiento integral en el sector del deporte y el entretenimiento", según dice la web de la firma, y evoca en su auto la existencia de “informaciones sustraídas de los servidores” de Senn Ferrero, “datos de carácter confidencial, de índole fiscal y legal de sus clientes”. Basándose en esos fundamentos, el magistrado recuerda al director de El Mundo que la difusión de tales documentos puede conllevar, en España, una pena de hasta cinco años de prisión.
Por su parte, la persona que hizo llegar los documentos a Der Spiegel –un joven portugués que habla cinco idiomas, actúa bajo el nombre ficticio de John y está detrás de la plataforma Football Leaks– aseguró a la revista alemana que no se había producido una entrada ilícita en ningún servidor. Todo, sostiene, fue un trabajo de fuentes.
La Federación Europea de Periodistas (FEJ) calificó la decisión del magistrado como un “acto de censura indigno de una democracia”. El secretario general de la FEJ, Ricardo Gutiérrez, dijo que “el juez Zamarriego criminaliza el ejercicio de la libertad de prensa e intimida a los periodistas amenazándoles con una pena de prisión. Es intolerable e indigno”.
La FAPE (Federación de Asociaciones de Periodistas de España) considera que la medida adoptada por el juez es "un ataque a la libertad de prensa, tiene pocos precedentes en la historia democrática e incumple el artículo 20 de la Constitución", que reconoce el derecho “a comunicar o recibir libremente información veraz”, derecho que, según el texto constitucional, “no puede restringirse mediante ningún tipo de censura previa”.
Tras el intento de censurar la información en España, el despacho Senn Ferrero envió el 5 de diciembre un correo al EIC felicitándose por las diligencias abiertas por Zamarriego. La carta, firmada por una abogada de Deloitte que representa a Senn Ferrero, comunica al EIC que Zamarriego había pedido en un segundo auto a las autoridades judiciales de varios países europeos que censuren la publicación de la investigación.
Impunidad y Rajoy
El mismo 5 de diciembre, por la noche, Pedro García Cuartango, director de El Mundo, explicó las consecuencias de la investigación en El Partidazo de la Cope: “Lo importante no es el dedo sino la luna. Y aquí la luna es que un grupo de jugadores, de agentes, de entrenadores, se ha enriquecido de forma ilegal. La sociedad española atravesaba una profunda crisis; y mientras políticos como Rita Barberá eran procesados por blanquear mil euros (...), este grupo de profesionales, de futbolistas, de entrenadores ha defraudado decenas de millones de euros a Hacienda. Es un enorme escándalo que esta gente sea tan insolidaria, tan zascandil. Tiene que intervenir Hacienda".
El Real Madrid ha rechazado responder a las preguntas de los medios del EIC, justificando su reticencia en el hecho de que la información procede de un robo ilegal de documentos. El club exige “máximo respeto” para Cristiano Ronaldo. El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, en declaraciones a La Voz de Galicia, evitó juzgar los hechos y dijo: "Sobre eso que se moje la Agencia Tributaria, yo procuro no opinar de lo que no sé".
Doce periódicos europeos reunidos en la nueva red de medios European Investigative Collaborations (EIC) están publicando, desde el 2 de diciembre, la operación Football Leaks, calificada como la fuga de documentos más amplia de la historia del deporte.
Obtenidos por el semanario alemán Der Spiegel, esos 18,6 millones de documentos desvelan los secretos de la pujante industria del fútbol. Fraude y evasión fiscal, redes de prespitación, conexiones mafiosas, explotación de jugadores menores de edad… 60 periodistas, asociados a ocho informáticos, han investigado estos documentos durante más de seis meses.
El proyecto reúne, junto a Der Spiegel, a Mediapart (Francia), The Sunday Times (Reino Unidos), Expresso (Portugal), El Mundo (España), L’Espresso (Italia), Le Soir (Bélgica), NRC Handelsblad (Países Bajos) y The Black Sea, un digital creado por el Centro Rumano por el Periodismo de Investigación.
El escándalo salpica a la élite del fútbol europeo y apunta directamente al agente Jorge Mendes, portugués de 50 años, como centro de operaciones. Los documentos revelan una monumental red de evasión fiscal que ha facilitado la ocultación de, al menos, 188 millones de euros de beneficios de sponsoring, a través de una maraña de sociedades pantalla y de cuentas offshore siutadas en Irlanda, las Islas Vírgenes Británicas, Panamá y Suiza. De este total de ingresos, 150 millones corresponden únicamente a Ronaldo.
Según los medios del EIC, Ronaldo, Mourinho y otras estrellas de la galaxia Mendes llevan años utilizando un sistema masivo y ultra-organizado de evasión de capitales, elaborado por el abogado de Mendes, Carlos Osorio, a través de empresas como Gestifute, Polaris y MIM. "Durante los últimos siete años, la gran figura del Real Madrid ha cobrado, con total discreción, un total de 149,5 millones de euros, fruto de sus beneficios de sponsoring, en paraísos fiscales. De esta fortuna, el delantero sólo ha pagado 5,6 millones de impuestos. Es decir, apenas el 4%. Toda una proeza”, apostilla Mediapart.
La investigación ha permitido saber que, el 20 de diciembre de 2014, Cristiano Ronaldo vendió por 74,7 millones de euros sus derechos de marketing para los años 2015-2020, para continuar beneficiándose de un régimen fiscal ventajoso (la ley del impatriado, o ley Behckam) que iba a desaparecer solo doce días después. De esta manera, eludió 31 millones de euros en impuestos, según el EIC.
La lista de los beneficiarios se completa con otros representados de Mendes: Mourinho, hoy en el Manchester United; Radamel Falcao, el delantero colombiano que jugó en el Atlético de Madrid y hoy milita en el AS Mónaco; tres jugadores portugueses que han pasado también por el Madrid y/o el Mónaco: Ricardo Carvalho, Fabio Coentrao y Pepe; y el colombiano James Rodríguez, comprado por el Real Madrid al Mónaco por 80 millones de euros.
“Entre bastidores, Mendes ayuda a sus clientes más ricos a eludir impuestos en sus países de residencia. Todo con la participación financiera, o bien con la complicidad, del club más grande del mundo, el Real Madrid”, sostiene Mediapart.
El asunto ha generado reacciones de diversa índole. Mientras en Europa la noticia suscitaba amplio interés, algunos grandes medios españoles, como El País, Marca, As o La Sexta, decidían silenciar casi por completo su existencia, y algunos periodistas afines al presidente del Real Madrid, Florentino Pérez, intentaban minimizar el alcance del escándalo situándolo al nivel del caso Messi.
El jugador del Barcelona fue condenado en julio de 2016 a 21 meses de prisión por tres delitos fiscales relacionados con sus derechos de imagen: la suma de la cifra evadida se elevaba a 4,1 millones de euros, incluidos los intereses de demora.
Mediapart cree que, más allá de equipos, la Hacienda española dispensa un “trato de favor” a Cristiano Ronaldo: “Por montajes offshore idénticos, otros empleados del Real Madrid, entre ellos José Mourinho, han sido objeto de una sanción fiscal. Jugadores como Samuel Eto’o y Lionel Messi han sido procesados judicialmente por montantes muy inferiores. Pero Ronaldo es, aparentemente, un contribuyente aparte. Lo que siembra ciertas dudas sobre las protecciones de las que podría beneficiarse”.
Y añade: "El jugador portugués recibió, entre 2009 y 2014, 74,8 millones de euros en diferentes cuentas en Suiza, a través de una sociedad offshore inscrita en las Islas Vírgenes Británicas, sin comunicar esta información al fisco. Por miedo a ser descubierto, Ronaldo terminó por declarar una parte. Se puso en marcha una inspección fiscal. Pero sus abogados consiguieron milagrosamente evitar cualquier tipo de sanción. Según nuestras informaciones, ni siquiera tuvo que pagar intereses de demora por su tardía y parcial declaración de impuestos".
Tres imputados, un juez de lo militar
La respuesta de la Justicia española ante las revelaciones ha sido ambivalente. El 7 de diciembre, la Fiscalía de Madrid denunció a tres exjugadores del Madrid por fraude fiscal: Xavi Alonso, Ángel di María y Ricardo Carvalho, y dijo que investiga a Fabio Coentrao y a Radamel Falcao.
Un día después de la publicación de la noticia sobre el presunto fraude, el 3 de diciembre, El Mundo reveló que el juez Arturo Zamarriego había enviado un requerimiento prohibiéndole la publicación de cualquier información relacionada con el Football Leaks. Dicha decisión no fue respetada por el periódico.
El gabinete Senn Ferrero, fundado y dirigido por Julio Senn y Javier Ferrero, dos abogados que han trabajado para el Real Madrid, sostiene que los documentos usados en la investigación fueron robados en un ataque informático sufrido hace meses. Senn Ferrero denunció esa intrusión y pidió al juez que impidiera la publicación de los documentos, alegando que podría atentar contra ”el honor” y ”la imagen” de sus clientes.
El juez Zamarriego, que procede de la jurisdicción militar, dio la razón a la "boutique especializada al (sic) asesoramiento integral en el sector del deporte y el entretenimiento", según dice la web de la firma, y evoca en su auto la existencia de “informaciones sustraídas de los servidores” de Senn Ferrero, “datos de carácter confidencial, de índole fiscal y legal de sus clientes”. Basándose en esos fundamentos, el magistrado recuerda al director de El Mundo que la difusión de tales documentos puede conllevar, en España, una pena de hasta cinco años de prisión.
Por su parte, la persona que hizo llegar los documentos a Der Spiegel –un joven portugués que habla cinco idiomas, actúa bajo el nombre ficticio de John y está detrás de la plataforma Football Leaks– aseguró a la revista alemana que no se había producido una entrada ilícita en ningún servidor. Todo, sostiene, fue un trabajo de fuentes.
La Federación Europea de Periodistas (FEJ) calificó la decisión del magistrado como un “acto de censura indigno de una democracia”. El secretario general de la FEJ, Ricardo Gutiérrez, dijo que “el juez Zamarriego criminaliza el ejercicio de la libertad de prensa e intimida a los periodistas amenazándoles con una pena de prisión. Es intolerable e indigno”.
La FAPE (Federación de Asociaciones de Periodistas de España) considera que la medida adoptada por el juez es "un ataque a la libertad de prensa, tiene pocos precedentes en la historia democrática e incumple el artículo 20 de la Constitución", que reconoce el derecho “a comunicar o recibir libremente información veraz”, derecho que, según el texto constitucional, “no puede restringirse mediante ningún tipo de censura previa”.
Tras el intento de censurar la información en España, el despacho Senn Ferrero envió el 5 de diciembre un correo al EIC felicitándose por las diligencias abiertas por Zamarriego. La carta, firmada por una abogada de Deloitte que representa a Senn Ferrero, comunica al EIC que Zamarriego había pedido en un segundo auto a las autoridades judiciales de varios países europeos que censuren la publicación de la investigación.
Impunidad y Rajoy
El mismo 5 de diciembre, por la noche, Pedro García Cuartango, director de El Mundo, explicó las consecuencias de la investigación en El Partidazo de la Cope: “Lo importante no es el dedo sino la luna. Y aquí la luna es que un grupo de jugadores, de agentes, de entrenadores, se ha enriquecido de forma ilegal. La sociedad española atravesaba una profunda crisis; y mientras políticos como Rita Barberá eran procesados por blanquear mil euros (...), este grupo de profesionales, de futbolistas, de entrenadores ha defraudado decenas de millones de euros a Hacienda. Es un enorme escándalo que esta gente sea tan insolidaria, tan zascandil. Tiene que intervenir Hacienda".
El Real Madrid ha rechazado responder a las preguntas de los medios del EIC, justificando su reticencia en el hecho de que la información procede de un robo ilegal de documentos. El club exige “máximo respeto” para Cristiano Ronaldo. El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, en declaraciones a La Voz de Galicia, evitó juzgar los hechos y dijo: "Sobre eso que se moje la Agencia Tributaria, yo procuro no opinar de lo que no sé".