catleya
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El fantasma de Brzezinski detrás de la Geopolítica de Washington en Eurasia
VIERNES 01 DE JUNIO DE 2018 20:00
F. William Engdahl*
http://www.elespiadigital.com/index...s-de-la-geopolitica-de-washington-en-eurasia-
Una de las características más claras de la Presidencia de Trump hasta la fecha es cómo los desarrollos de las políticas reales, cuando eliminamos el humo deliberado y los reflejos de los tweets y el escándalo, siguen una estrategia básica de la geopolítica de Washington que se remonta al menos a 1992. Este es el caso en la última decisión unilateral desafortunada y bastante ilegal de abandonar el acuerdo nuclear de Irán. Este es también el caso de la implacable campaña de satanización al estilo de la Guerra Fría contra Rusia y el despliegue de nuevas sanciones insidiosas. Este también es el caso con la inminente guerra comercial que la Administración Trump ha iniciado con la República Popular de China.
Contrariamente a la creencia generalizada de que el presidente Trump actúa solo por impulso o es impredecible, creo que sucede lo contrario. Las geopolíticas estratégicas de la Administración Trump son una respuesta, no del propio Presidente, sino de los poderes fácticos, el establecimiento permanente que realmente controla, lo que a veces se llama el Estado Profundo. La geopolítica determina en gran medida a quién permiten ser presidente.
La primera formulación oficial de la política exterior actual de Washington llegó en 1992, cuando Dick Cheney era el Secretario de Defensa de Bush padre. La Unión Soviética se había derrumbado y Bush declaró triunfalmente a Estados Unidos como única superpotencia. El subsecretario de Cheney, Paul Wolfowitz, fue responsable de desarrollar una Guía de planificación de la defensa, 1994-1999. Fue contundente, y más tarde lo describió el senador Ted Kennedy como imperialista. En parte, la Doctrina Wolfowitz sin editar decía: "Nuestro primer objetivo es evitar el resurgimiento de un nuevo rival, ya sea en el territorio de la antigua Unión Soviética o en otro lugar ... para evitar que cualquier poder hostil domine una región cuyos recursos quedarían bajo control, lo que sería suficiente para generar un poder global". Con George W. Bush, la Doctrina Wolfowitz resurgió como la Doctrina de Bush después de 2002 en el período previo a la guerra de Irak,
Geopolítica básica
Volviendo a mi título, cito el libro de 1997 del fallecido asesor presidencial, Zbigniew Brzezinski, The Grand Chessboard: American Primacy and its Geostrategic Imperatives, para destacar la política exterior y de defensa de EE.UU. bajo Trump en la actualidad. No es nada menos que la aplicación del desafío geopolítico de Brzezinski y la noción de guerra preventiva de la doctrina Bush-Wolfowitz en el contexto de la resistencia emergente de hoy a la dominación única de una superpotencia estadounidense.
Brzezinski, fue por supuesto el arquitecto de la guerra afgana de Jimmy Carter contra el ejército soviético usando terroristas islámicos muyahidines entrenados por la CIA, la inteligencia saudita y el ISI de Pakistán.
En 1997, escribió que era "imperativo que no surja ningún rival eurasiático, capaz de dominar Eurasia y por lo tanto de desafiar a Estados Unidos". Declaró además: "Potencialmente, el escenario más peligroso sería una coalición 'antihegemónica' unida no por ideología sino por agravios... una gran coalición de China, Rusia, quizás Irán ... Evitar esta contingencia ... requerirá la habilidad geoestratégica de EE. UU. en los perímetros occidental, oriental y meridional de Eurasia simultáneamente ".
Cuando agregamos a esto el reciente documento de Estrategia de Defensa Nacional del Pentágono que define a Rusia y China como la mayor amenaza potencial a la hegemonía estadounidense, combine esto con los crecientes vínculos entre Rusia, China e Irán desde el levantamiento de las sanciones en 2015, especialmente en Siria, queda claro lo que Washington está haciendo. Están en un esfuerzo total para romper lo que yo llamo el Desafío Eurasiático para el único hegemón: Rusia, China e Irán.
Como señaló Brzezinski, para los fines estadounidenses de dominación continua, no importa que haya diferencias étnicas, religiosas y de otro tipo entre Rusia, China e Irán. La política exterior de los Estados Unidos desde septiembre de 2001 ha obligado cada vez más a esos tres a cooperar, a pesar de esas diferencias, por lo que consideran una defensa de su soberanía nacional.
Objetivo Rusia ...
Mire los eventos recientes en Eurasia a la luz de la advertencia de Brzezinski de 1997. Washington se mantuvo detrás del Reino Unido en el falso caso de Skripal que fue culpada, sin pruebas, Rusia. Un falso ataque químico fuera de Damasco fue utilizado como pretexto para el bombardeo ilegal de EE. UU., ignorando todos los preceptos de la Carta de la ONU y el derecho internacional. Eso, en retrospectiva, no fue más una prueba de la posible reacción rusa. Independientemente de si los Tomahawk y otros misiles atacaron o no, se sentó el precedente de que Israel y otros aliados de Estados Unidos intensifiquen los ataques contra Irán en Siria.
Luego vienen las diabólicas nuevas sanciones paralizantes contra los "oligarcas de pilinguin" como Deripaski de Rusal, el segundo mayor productor de aluminio del mundo. Washington ni siquiera intenta inventar excusas para nuevas sanciones. Afirman como razón que el gobierno ruso está involucrado en "una variedad de actividades malignas en todo el mundo ".
Las nuevas sanciones castigan a cualquier banco o inversor occidental que posea acciones en compañías rusas sancionadas, incluso si fueron compradas antes de las nuevas sanciones. Es la nueva forma de guerra financiera del Tesoro de los EE. UU., Tan mortal como disparar guerras, si no más. Se desarrolló a raíz del 11-S y desde entonces ha sido refinado como un arma de guerra devastadora, utilizando el hecho de que bajo la globalización económica, el mundo todavía depende en un grado abrumador del dólar estadounidense para el comercio y para las reservas monetarias del banco central.
Por primera vez, con las últimas sanciones de los Estados Unidos contra oligarcas y compañías rusas individuales, no solo se bloquea el futuro acceso a préstamos en los mercados de capitales occidentales. Los inversores no rusos que invirtieron miles de millones en empresas rusas seleccionadas en los últimos años se han visto obligados a liquidar o enfrentar sanciones secundarias por poseer activos rusos. ¿Pero quién comprará? Las dos principales empresas de compensación de valores de la UE, Clearstream y Euroclear, ya se han visto obligadas a rechazar la liberación de valores rusos autorizados. También enfrentan sanciones para retener acciones rusas. Si, por ejemplo, un banco estatal chino está pidiendo prestado de los mercados de dólares, ahora están de facto prohibidos de hacer negocios con empresas rusas sancionadas.
Dirigirse a China ...
Al mismo tiempo que Washington intensifica la presión sobre la Rusia de pilinguin, sobre Siria y Ucrania, lanzan la etapa inicial de lo que claramente será una devastadora guerra económica con China, utilizando el comercio como la palanca inicial. Washington, como señalé en un artículo anterior, tiene el objetivo de obligar a China a desmantelar su estrategia para llevar a la economía de China durante la próxima década a un estatus líder de productor de alta tecnología. La estrategia se llama China 2025 y es el corazón de la agenda estratégica de Xi Jinping y de su Belt Road Initiative o proyecto económico Silk Road.
La primera prueba de lo que Washington planea apuntar al movimiento de China para convertirse en un líder mundial de alta tecnología bajo China 2025 es el tratamiento de los principales fabricantes de telecomunicaciones de China, ZTE y Huawei, principales retadores de Apple. ZTE fue sancionado en abril por Washington por supuestamente vender equipos de telecomunicaciones a Irán. A los proveedores estadounidenses se les ha prohibido suministrar componentes esenciales al grupo tecnológico de China. La compañía ha cerrado temporalmente sus operaciones mientras intenta obtener un indulto de los EE . UU .
Apunte a Irán ...
Ahora, sobre las vehementes protestas de Alemania, Francia y otros estados de la UE, Trump desbarata unilateralmente el acuerdo nuclear de Irán. El objetivo es claramente volver a imponer sanciones paralizantes a Irán, interrumpir el débil progreso que comenzó desde 2015. El hecho de que la UE se niegue a romper su tratado con Irán tendrá, en última instancia, pocas consecuencias ya que las sanciones de Estados Unidos contra Irán también amenazan con sanciones a compañías de la UE que hacen negocios en Irán.
Como parte de la última ruptura de Trump del acuerdo nuclear con Irán, Estados Unidos otorga a otros países como China o Japón o países de la UE 180 días para terminar con cualquier acuerdo de compra de petróleo de Irán. Las compañías europeas como Airbus que tienen pedidos de compra multimillonarios de aviones de Irán se verán obligados a cancelar. El 6 de agosto, se sancionará la compra de dólares estadounidenses, el comercio de oro y algunos otros metales, así como la aviación y la industria del automóvil. Después del 4 de noviembre, las sanciones de EE. UU. se destinarán a las instituciones financieras y petrolíferas de Irán y se restablecerán las sanciones contra personas que anteriormente figuraban en la lista de sanciones del Tesoro de los EE. UU.
El objetivo claro es utilizar las nuevas armas devastadoras de las sanciones de punta del Tesoro de Estados Unidos para hundir la frágil economía de Irán en una crisis. Al mismo tiempo, los informes indican que el asesor del NSC, John Bolton, está abogando por revigorizar a los iraníes de la Mujahedeen Khalq, o la organización terrorista MEK, para lanzar un nuevo intento de una revolución del tonalidad. MEK fue retirada de la lista de terroristas del Departamento de Estado de EE. UU. por la Secretaria de Estado Clinton en 2012 .
CENTCOM
Si damos un paso atrás respecto a los detalles específicos de cada país y las acciones de Washington en contra de cada uno, vemos que los tres poderes eurasiáticos, Rusia, China e Irán, están siendo sistemáticamente atacados y hasta ahora con diversos grados de éxito.
A fines de febrero, el general Votel, comandante del Comando Central de EE. UU. o CENTCOM dio una entrevista a DoD News. Allí, además de enumerar a Rusia y especialmente su participación en Siria y China, y su nueva Iniciativa Belt Road y sus bases militares en Djibouti y en otros lugares, Votel cita los vínculos de ambos con Irán. Votel afirma que "tanto Rusia como China están cultivando lazos multidimensionales con Irán". El levantamiento de las sanciones de la ONU bajo el plan de acción integral conjunto abre el camino para que Irán reanude la solicitud de membresía a la Organización de Cooperación de Shanghai ".
Irónicamente, la apertura simultánea de una guerra de facto de tres frentes, incluso en el nivel de guerra económica en la actualidad, crea un imperativo estratégico para que las tres potencias trabajen aún más de cerca. China es el mayor comprador de petróleo iraní. Rusia proporciona equipamiento militar y está negociando mucho más. Cada una de las tres partes-China, Irán, Rusia-por razones de supervivencia-no tienen mejor opción que colaborar como nunca antes, sin importar la desconfianza o las diferencias, frente a la guerra geopolítica de los tres frentes.
*consultor estratégico y conferenciante de riesgo, es licenciado en política por la Universidad de Princeton
VIERNES 01 DE JUNIO DE 2018 20:00
F. William Engdahl*
http://www.elespiadigital.com/index...s-de-la-geopolitica-de-washington-en-eurasia-
Una de las características más claras de la Presidencia de Trump hasta la fecha es cómo los desarrollos de las políticas reales, cuando eliminamos el humo deliberado y los reflejos de los tweets y el escándalo, siguen una estrategia básica de la geopolítica de Washington que se remonta al menos a 1992. Este es el caso en la última decisión unilateral desafortunada y bastante ilegal de abandonar el acuerdo nuclear de Irán. Este es también el caso de la implacable campaña de satanización al estilo de la Guerra Fría contra Rusia y el despliegue de nuevas sanciones insidiosas. Este también es el caso con la inminente guerra comercial que la Administración Trump ha iniciado con la República Popular de China.
Contrariamente a la creencia generalizada de que el presidente Trump actúa solo por impulso o es impredecible, creo que sucede lo contrario. Las geopolíticas estratégicas de la Administración Trump son una respuesta, no del propio Presidente, sino de los poderes fácticos, el establecimiento permanente que realmente controla, lo que a veces se llama el Estado Profundo. La geopolítica determina en gran medida a quién permiten ser presidente.
La primera formulación oficial de la política exterior actual de Washington llegó en 1992, cuando Dick Cheney era el Secretario de Defensa de Bush padre. La Unión Soviética se había derrumbado y Bush declaró triunfalmente a Estados Unidos como única superpotencia. El subsecretario de Cheney, Paul Wolfowitz, fue responsable de desarrollar una Guía de planificación de la defensa, 1994-1999. Fue contundente, y más tarde lo describió el senador Ted Kennedy como imperialista. En parte, la Doctrina Wolfowitz sin editar decía: "Nuestro primer objetivo es evitar el resurgimiento de un nuevo rival, ya sea en el territorio de la antigua Unión Soviética o en otro lugar ... para evitar que cualquier poder hostil domine una región cuyos recursos quedarían bajo control, lo que sería suficiente para generar un poder global". Con George W. Bush, la Doctrina Wolfowitz resurgió como la Doctrina de Bush después de 2002 en el período previo a la guerra de Irak,
Geopolítica básica
Volviendo a mi título, cito el libro de 1997 del fallecido asesor presidencial, Zbigniew Brzezinski, The Grand Chessboard: American Primacy and its Geostrategic Imperatives, para destacar la política exterior y de defensa de EE.UU. bajo Trump en la actualidad. No es nada menos que la aplicación del desafío geopolítico de Brzezinski y la noción de guerra preventiva de la doctrina Bush-Wolfowitz en el contexto de la resistencia emergente de hoy a la dominación única de una superpotencia estadounidense.
Brzezinski, fue por supuesto el arquitecto de la guerra afgana de Jimmy Carter contra el ejército soviético usando terroristas islámicos muyahidines entrenados por la CIA, la inteligencia saudita y el ISI de Pakistán.
En 1997, escribió que era "imperativo que no surja ningún rival eurasiático, capaz de dominar Eurasia y por lo tanto de desafiar a Estados Unidos". Declaró además: "Potencialmente, el escenario más peligroso sería una coalición 'antihegemónica' unida no por ideología sino por agravios... una gran coalición de China, Rusia, quizás Irán ... Evitar esta contingencia ... requerirá la habilidad geoestratégica de EE. UU. en los perímetros occidental, oriental y meridional de Eurasia simultáneamente ".
Cuando agregamos a esto el reciente documento de Estrategia de Defensa Nacional del Pentágono que define a Rusia y China como la mayor amenaza potencial a la hegemonía estadounidense, combine esto con los crecientes vínculos entre Rusia, China e Irán desde el levantamiento de las sanciones en 2015, especialmente en Siria, queda claro lo que Washington está haciendo. Están en un esfuerzo total para romper lo que yo llamo el Desafío Eurasiático para el único hegemón: Rusia, China e Irán.
Como señaló Brzezinski, para los fines estadounidenses de dominación continua, no importa que haya diferencias étnicas, religiosas y de otro tipo entre Rusia, China e Irán. La política exterior de los Estados Unidos desde septiembre de 2001 ha obligado cada vez más a esos tres a cooperar, a pesar de esas diferencias, por lo que consideran una defensa de su soberanía nacional.
Objetivo Rusia ...
Mire los eventos recientes en Eurasia a la luz de la advertencia de Brzezinski de 1997. Washington se mantuvo detrás del Reino Unido en el falso caso de Skripal que fue culpada, sin pruebas, Rusia. Un falso ataque químico fuera de Damasco fue utilizado como pretexto para el bombardeo ilegal de EE. UU., ignorando todos los preceptos de la Carta de la ONU y el derecho internacional. Eso, en retrospectiva, no fue más una prueba de la posible reacción rusa. Independientemente de si los Tomahawk y otros misiles atacaron o no, se sentó el precedente de que Israel y otros aliados de Estados Unidos intensifiquen los ataques contra Irán en Siria.
Luego vienen las diabólicas nuevas sanciones paralizantes contra los "oligarcas de pilinguin" como Deripaski de Rusal, el segundo mayor productor de aluminio del mundo. Washington ni siquiera intenta inventar excusas para nuevas sanciones. Afirman como razón que el gobierno ruso está involucrado en "una variedad de actividades malignas en todo el mundo ".
Las nuevas sanciones castigan a cualquier banco o inversor occidental que posea acciones en compañías rusas sancionadas, incluso si fueron compradas antes de las nuevas sanciones. Es la nueva forma de guerra financiera del Tesoro de los EE. UU., Tan mortal como disparar guerras, si no más. Se desarrolló a raíz del 11-S y desde entonces ha sido refinado como un arma de guerra devastadora, utilizando el hecho de que bajo la globalización económica, el mundo todavía depende en un grado abrumador del dólar estadounidense para el comercio y para las reservas monetarias del banco central.
Por primera vez, con las últimas sanciones de los Estados Unidos contra oligarcas y compañías rusas individuales, no solo se bloquea el futuro acceso a préstamos en los mercados de capitales occidentales. Los inversores no rusos que invirtieron miles de millones en empresas rusas seleccionadas en los últimos años se han visto obligados a liquidar o enfrentar sanciones secundarias por poseer activos rusos. ¿Pero quién comprará? Las dos principales empresas de compensación de valores de la UE, Clearstream y Euroclear, ya se han visto obligadas a rechazar la liberación de valores rusos autorizados. También enfrentan sanciones para retener acciones rusas. Si, por ejemplo, un banco estatal chino está pidiendo prestado de los mercados de dólares, ahora están de facto prohibidos de hacer negocios con empresas rusas sancionadas.
Dirigirse a China ...
Al mismo tiempo que Washington intensifica la presión sobre la Rusia de pilinguin, sobre Siria y Ucrania, lanzan la etapa inicial de lo que claramente será una devastadora guerra económica con China, utilizando el comercio como la palanca inicial. Washington, como señalé en un artículo anterior, tiene el objetivo de obligar a China a desmantelar su estrategia para llevar a la economía de China durante la próxima década a un estatus líder de productor de alta tecnología. La estrategia se llama China 2025 y es el corazón de la agenda estratégica de Xi Jinping y de su Belt Road Initiative o proyecto económico Silk Road.
La primera prueba de lo que Washington planea apuntar al movimiento de China para convertirse en un líder mundial de alta tecnología bajo China 2025 es el tratamiento de los principales fabricantes de telecomunicaciones de China, ZTE y Huawei, principales retadores de Apple. ZTE fue sancionado en abril por Washington por supuestamente vender equipos de telecomunicaciones a Irán. A los proveedores estadounidenses se les ha prohibido suministrar componentes esenciales al grupo tecnológico de China. La compañía ha cerrado temporalmente sus operaciones mientras intenta obtener un indulto de los EE . UU .
Apunte a Irán ...
Ahora, sobre las vehementes protestas de Alemania, Francia y otros estados de la UE, Trump desbarata unilateralmente el acuerdo nuclear de Irán. El objetivo es claramente volver a imponer sanciones paralizantes a Irán, interrumpir el débil progreso que comenzó desde 2015. El hecho de que la UE se niegue a romper su tratado con Irán tendrá, en última instancia, pocas consecuencias ya que las sanciones de Estados Unidos contra Irán también amenazan con sanciones a compañías de la UE que hacen negocios en Irán.
Como parte de la última ruptura de Trump del acuerdo nuclear con Irán, Estados Unidos otorga a otros países como China o Japón o países de la UE 180 días para terminar con cualquier acuerdo de compra de petróleo de Irán. Las compañías europeas como Airbus que tienen pedidos de compra multimillonarios de aviones de Irán se verán obligados a cancelar. El 6 de agosto, se sancionará la compra de dólares estadounidenses, el comercio de oro y algunos otros metales, así como la aviación y la industria del automóvil. Después del 4 de noviembre, las sanciones de EE. UU. se destinarán a las instituciones financieras y petrolíferas de Irán y se restablecerán las sanciones contra personas que anteriormente figuraban en la lista de sanciones del Tesoro de los EE. UU.
El objetivo claro es utilizar las nuevas armas devastadoras de las sanciones de punta del Tesoro de Estados Unidos para hundir la frágil economía de Irán en una crisis. Al mismo tiempo, los informes indican que el asesor del NSC, John Bolton, está abogando por revigorizar a los iraníes de la Mujahedeen Khalq, o la organización terrorista MEK, para lanzar un nuevo intento de una revolución del tonalidad. MEK fue retirada de la lista de terroristas del Departamento de Estado de EE. UU. por la Secretaria de Estado Clinton en 2012 .
CENTCOM
Si damos un paso atrás respecto a los detalles específicos de cada país y las acciones de Washington en contra de cada uno, vemos que los tres poderes eurasiáticos, Rusia, China e Irán, están siendo sistemáticamente atacados y hasta ahora con diversos grados de éxito.
A fines de febrero, el general Votel, comandante del Comando Central de EE. UU. o CENTCOM dio una entrevista a DoD News. Allí, además de enumerar a Rusia y especialmente su participación en Siria y China, y su nueva Iniciativa Belt Road y sus bases militares en Djibouti y en otros lugares, Votel cita los vínculos de ambos con Irán. Votel afirma que "tanto Rusia como China están cultivando lazos multidimensionales con Irán". El levantamiento de las sanciones de la ONU bajo el plan de acción integral conjunto abre el camino para que Irán reanude la solicitud de membresía a la Organización de Cooperación de Shanghai ".
Irónicamente, la apertura simultánea de una guerra de facto de tres frentes, incluso en el nivel de guerra económica en la actualidad, crea un imperativo estratégico para que las tres potencias trabajen aún más de cerca. China es el mayor comprador de petróleo iraní. Rusia proporciona equipamiento militar y está negociando mucho más. Cada una de las tres partes-China, Irán, Rusia-por razones de supervivencia-no tienen mejor opción que colaborar como nunca antes, sin importar la desconfianza o las diferencias, frente a la guerra geopolítica de los tres frentes.
*consultor estratégico y conferenciante de riesgo, es licenciado en política por la Universidad de Princeton
