Saturnin
Madmaxista
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El 9 de octubre de 1936, Jesse Owens aseguró: «Algunos dicen que Hitler me despreció. Pero yo les digo que no lo hizo». El propio Hitler le estrechó la mano. Sin embargo el presidente norteamericano ni siquiera le felicitó. Mientras en Alemania el atleta podía viajar libremente y hospedarse en cualquier hotel, en los Estados Unidos debía quedarse en los hoteles segregados como los demás afroamericanos y viajar en la parte trasera de los autobuses reservada para los neցros. En Estados Unidos después de Berlín para poder ganarse la vida tuvo que pasar la humillación de correr contra caballos. Un libro escrito por uno de sus compañeros del equipo estadounidense de atletismo y una película que se estrena en España echan abajo esta leyenda de que los nazis odiaban a Jesse Owens y que Hitler le despreció. Todo era propaganda norteamericana para desprestigiar al mandatario alemán.
Los nazis eran unos macho cabríoes, pero en este tema se ha mentido.
Fuentes:
Juegos Olímpicos de Berlín 1936 - Wikipedia, la enciclopedia libre
La historia que desmiente el repruebo nancy contra Jesse Owens, uno de los mejores atletas de los Juegos Olímpicos - laSexta
Jesse Owens - Wikipedia, la enciclopedia libre
Los nazis eran unos macho cabríoes, pero en este tema se ha mentido.
Fuentes:
Juegos Olímpicos de Berlín 1936 - Wikipedia, la enciclopedia libre
La historia que desmiente el repruebo nancy contra Jesse Owens, uno de los mejores atletas de los Juegos Olímpicos - laSexta
Jesse Owens - Wikipedia, la enciclopedia libre
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