Buerb
Abogado Cientificista de Raza
Ucrania utiliza misiles ATACMS para atacar una estación de comunicaciones espacial de la época de la Guerra Fría. – Galaxia Militar
Aire Artículos Misiles Satélites
25 junio, 2024 Redacción 3140 visitas 20 Comments Crimea, Estados Unidos, Fuerzas Aeroespaciales Rusas, Guerra Fria, Misiles ATACMS, Rusia, Ucrania, Yevpatonia
Ucrania atacó el sábado el centro de comunicaciones de espacio profundo NIP-16 en Vitino (Crimea), uno de los dos ataques que llevó a cabo en la península ocupada durante el fin de semana.
Esos ataques se llevaron a cabo con misiles balísticos de corto alcance del Sistema de Misiles Tácticos del Ejército (ATACMS) de fabricación estadounidense, según fuentes rusas y ucranianas.
El primer ataque del fin de semana afectó a una instalación de comunicaciones espaciales en la que había unas 20 antenas de radar, algunas de ellas con ocho antenas combinadas en instalaciones gigantes. Las imágenes de satélite de baja resolución obtenidas por The War Zone muestran que, efectivamente, fue atacada. Sin embargo, la calidad de las imágenes hace difícil determinar el alcance exacto de los daños. Una fue tomada el 22 de junio, antes del ataque, y la otra después, el 24 de junio.
La imagen posterior muestra nuevas marcas de quemaduras en una zona abierta de las instalaciones, así como cerca de un conjunto de ocho antenas parabólicas de radar situadas a poca distancia hacia el este. Al norte y al este de ese conjunto se pueden ver otras marcas de quemaduras. Es difícil saberlo con certeza, pero si se trataba de variantes de ATACMS con munición de racimo, las antenas podrían estar acribilladas de metralla. Por el momento desconocemos el alcance de los daños.
Durante la noche han aparecido vídeos en las redes sociales de un incendio a gran escala en el emplazamiento de seguimiento espacial.
El lugar se conoce ahora oficialmente como Complejo de Mando y Medición Separado 40 y forma parte del Centro Principal de Pruebas y Control de Sistemas Espaciales Titov de las Fuerzas Aeroespaciales rusas, según el medio de comunicación ucraniano Militanaryi.
Se construyó originalmente durante la época de la Guerra Fría para realizar un seguimiento de los lanzamientos espaciales rusos
Hay alrededor de 20 antenas parabólicas, incluidos dos grandes conjuntos de ocho cada uno, en esta instalación rusa de comunicaciones espaciales en Vision, Crimea.
La construcción de la instalación comenzó en marzo de 1960 por 5.000 reclutas de la marina rusa, según Russian Spaceweb.com.
«La instalación desempeñó su verdadero cometido por primera vez en febrero de 1961, apoyando la misión de la nave Venera-1», explica la publicación. «A partir de entonces, el centro desempeñó un papel fundamental de mando y control en todas las misiones planetarias soviéticas a la Luna, Venus y Marte». De 1967 a 1975, el emplazamiento de Yevpatoria sirvió como principal centro de control de misiones de la URSS».
Las operaciones de control de las misiones tripuladas se trasladaron en 1975 a unas instalaciones recién construidas en Podlipki, cerca de Moscú, a pocos metros del campus de NPO Energia, el principal desarrollador de naves espaciales tripuladas de la URSS, según informa Russian Spaceweb.com. Desde entonces, «se convirtió en un centro de reserva para vuelos espaciales tripulados».
Una de las antenas parabólicas del sitio de comunicaciones del espacio profundo NIP-16 en Crimea.
Después de que Rusia se apoderara de él tras la toma de Crimea en 2014, fue entregado a sus Fuerzas Aeroespaciales, que comenzaron la modernización de las instalaciones, informó el medio de noticias Ukrainian Defense Express.
«En 2017, los informes afirmaban que el centro había recibido 10 nuevos sistemas y que la modernización seguía su curso», continuaba la publicación. «El plan inicial era gastar 1.800 millones de rublos en la reconstrucción de un solo radiotelescopio: al tipo de cambio de entonces, costaba unos 28 millones de dólares».
En la actualidad, «Rusia lo utiliza para la alerta temprana de misiles balísticos que miran hacia Oriente Próximo, África y el suroeste de Asia», informó el Kyiv Post.
Sin embargo, Fabian Rene Hoffmann, investigador doctoral de la Universidad de Oslo, sugirió un uso diferente.
«No he encontrado nada que indique que pueda servir de enlace descendente para satélites espaciales de alerta temprana, por lo que supongo que no desempeña ningún papel en la defensa contra misiles balísticos», declaró el lunes.
En su lugar, sugirió que «una explicación plausible parece ser que el sitio se utiliza para mantener y controlar los satélites rusos, incluidos los satélites GLONASS [GLObalnaya NAvigatsionnaya Sputnikovaya Sistema en ruso]», la versión rusa del Sistema de Posicionamiento Global (GPS) estadounidense.
«Esto tiene sentido para mí y también explica por qué sería un objetivo prioritario para Ucrania».
Sea cual sea el uso que se le esté dando, está claro que Ucrania pensó que era lo suficientemente importante para las capacidades de combate de Rusia, o para ellos simplemente como activo estratégico, como para gastar unos valiosos misiles ATACMS intentando dejarlo fuera de combate.
El mes pasado informamos de que Ucrania había atacado un radar estratégico ruso de alerta temprana situado en el extremo suroccidental del país. El ataque ucraniano con drones causó daños considerables. Parecía ser el primer ataque de este tipo contra un emplazamiento vinculado a la defensa estratégica general de Rusia.
«Como tal, apunta a una nueva y preocupante dimensión del conflicto, especialmente en lo que se refiere al uso potencial de armas nucleares», escribimos entonces.
Una imagen de satélite tomada el 23 de mayo que The War Zone obtuvo de Planet Labs de la estación de radar de Armavir, en la región suroccidental rusa de Krasnodar Krai, muestra importantes escombros alrededor de uno de los dos edificios de radar Voronezh-DM del emplazamiento.
Howard Altman
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Ucrania utiliza misiles ATACMS para atacar una estación de comunicaciones espacial de la época de la Guerra Fría.
25 junio, 2024 Redacción 3140 visitas 20 Comments Crimea, Estados Unidos, Fuerzas Aeroespaciales Rusas, Guerra Fria, Misiles ATACMS, Rusia, Ucrania, Yevpatonia
Ucrania atacó el sábado el centro de comunicaciones de espacio profundo NIP-16 en Vitino (Crimea), uno de los dos ataques que llevó a cabo en la península ocupada durante el fin de semana.
Esos ataques se llevaron a cabo con misiles balísticos de corto alcance del Sistema de Misiles Tácticos del Ejército (ATACMS) de fabricación estadounidense, según fuentes rusas y ucranianas.
El primer ataque del fin de semana afectó a una instalación de comunicaciones espaciales en la que había unas 20 antenas de radar, algunas de ellas con ocho antenas combinadas en instalaciones gigantes. Las imágenes de satélite de baja resolución obtenidas por The War Zone muestran que, efectivamente, fue atacada. Sin embargo, la calidad de las imágenes hace difícil determinar el alcance exacto de los daños. Una fue tomada el 22 de junio, antes del ataque, y la otra después, el 24 de junio.
La imagen posterior muestra nuevas marcas de quemaduras en una zona abierta de las instalaciones, así como cerca de un conjunto de ocho antenas parabólicas de radar situadas a poca distancia hacia el este. Al norte y al este de ese conjunto se pueden ver otras marcas de quemaduras. Es difícil saberlo con certeza, pero si se trataba de variantes de ATACMS con munición de racimo, las antenas podrían estar acribilladas de metralla. Por el momento desconocemos el alcance de los daños.
Durante la noche han aparecido vídeos en las redes sociales de un incendio a gran escala en el emplazamiento de seguimiento espacial.
El lugar se conoce ahora oficialmente como Complejo de Mando y Medición Separado 40 y forma parte del Centro Principal de Pruebas y Control de Sistemas Espaciales Titov de las Fuerzas Aeroespaciales rusas, según el medio de comunicación ucraniano Militanaryi.
Se construyó originalmente durante la época de la Guerra Fría para realizar un seguimiento de los lanzamientos espaciales rusos
Hay alrededor de 20 antenas parabólicas, incluidos dos grandes conjuntos de ocho cada uno, en esta instalación rusa de comunicaciones espaciales en Vision, Crimea.La construcción de la instalación comenzó en marzo de 1960 por 5.000 reclutas de la marina rusa, según Russian Spaceweb.com.
«La instalación desempeñó su verdadero cometido por primera vez en febrero de 1961, apoyando la misión de la nave Venera-1», explica la publicación. «A partir de entonces, el centro desempeñó un papel fundamental de mando y control en todas las misiones planetarias soviéticas a la Luna, Venus y Marte». De 1967 a 1975, el emplazamiento de Yevpatoria sirvió como principal centro de control de misiones de la URSS».
Las operaciones de control de las misiones tripuladas se trasladaron en 1975 a unas instalaciones recién construidas en Podlipki, cerca de Moscú, a pocos metros del campus de NPO Energia, el principal desarrollador de naves espaciales tripuladas de la URSS, según informa Russian Spaceweb.com. Desde entonces, «se convirtió en un centro de reserva para vuelos espaciales tripulados».
Una de las antenas parabólicas del sitio de comunicaciones del espacio profundo NIP-16 en Crimea.Después de que Rusia se apoderara de él tras la toma de Crimea en 2014, fue entregado a sus Fuerzas Aeroespaciales, que comenzaron la modernización de las instalaciones, informó el medio de noticias Ukrainian Defense Express.
«En 2017, los informes afirmaban que el centro había recibido 10 nuevos sistemas y que la modernización seguía su curso», continuaba la publicación. «El plan inicial era gastar 1.800 millones de rublos en la reconstrucción de un solo radiotelescopio: al tipo de cambio de entonces, costaba unos 28 millones de dólares».
En la actualidad, «Rusia lo utiliza para la alerta temprana de misiles balísticos que miran hacia Oriente Próximo, África y el suroeste de Asia», informó el Kyiv Post.
Sin embargo, Fabian Rene Hoffmann, investigador doctoral de la Universidad de Oslo, sugirió un uso diferente.
«No he encontrado nada que indique que pueda servir de enlace descendente para satélites espaciales de alerta temprana, por lo que supongo que no desempeña ningún papel en la defensa contra misiles balísticos», declaró el lunes.
En su lugar, sugirió que «una explicación plausible parece ser que el sitio se utiliza para mantener y controlar los satélites rusos, incluidos los satélites GLONASS [GLObalnaya NAvigatsionnaya Sputnikovaya Sistema en ruso]», la versión rusa del Sistema de Posicionamiento Global (GPS) estadounidense.
«Esto tiene sentido para mí y también explica por qué sería un objetivo prioritario para Ucrania».
Sea cual sea el uso que se le esté dando, está claro que Ucrania pensó que era lo suficientemente importante para las capacidades de combate de Rusia, o para ellos simplemente como activo estratégico, como para gastar unos valiosos misiles ATACMS intentando dejarlo fuera de combate.
El mes pasado informamos de que Ucrania había atacado un radar estratégico ruso de alerta temprana situado en el extremo suroccidental del país. El ataque ucraniano con drones causó daños considerables. Parecía ser el primer ataque de este tipo contra un emplazamiento vinculado a la defensa estratégica general de Rusia.
«Como tal, apunta a una nueva y preocupante dimensión del conflicto, especialmente en lo que se refiere al uso potencial de armas nucleares», escribimos entonces.
Una imagen de satélite tomada el 23 de mayo que The War Zone obtuvo de Planet Labs de la estación de radar de Armavir, en la región suroccidental rusa de Krasnodar Krai, muestra importantes escombros alrededor de uno de los dos edificios de radar Voronezh-DM del emplazamiento.
Howard Altman
