Dos minutos de conexión total

Clavisto

Será en Octubre
Desde
10 Sep 2013
Mensajes
33.029
Reputación
76.697
Esa tarde pillé una de aquellas borracheras.

Desperté a eso de las tres de la mañana, empapado en sudor, con el pecho en modo "aquí pasa algo raro"; me levanté disparado de la cama, fui al salón y me comí dos ibuprofenos; asustado me puse a andar por el pasillo, a mirar por la ventana; tenía la sensación de que si me quedaba quieto iba a pasarme algo malo; encendí todas las luces, puse el televisor, arriba y abajo, arriba y abajo, arriba y abajo...Diez minutos después intenté sentarme, calmarme, pero no pude hacerlo a pesar de que la cosa iba pasando. Otra vez arriba, otra vez abajo, la ventana, los árboles, la luna, el gato sobre el tejado de enfrente y ese espantoso calor del mes de julio, sudando como un pollo en su jaula, nervioso, atacado...Finalmente pasó y me senté a ver la tele como podría haberlo hecho mirando la pared.

Era el verano del 2009, el infierno del 2009.

Por aquel entonces bebía prácticamente a diario, es decir, me emborrachaba como un loco, bebía hasta que no podía más y me iba a casa de alguna manera que a la mañana siguiente no podía recordar; bastante tenía con no coger una sierra y abrirme la cabeza para expulsar a los enanitos que la aporreaban con indecible saña, así que me desayunaba un par de aspirinas, me duchaba, y bajaba a la cochera. A veces el coche estaba ahí, otras en la calle y algunas simplemente no estaba. Y me iba a trabajar.

Pero aquella noche todavía tenía unas cuantas horas para mí. Y eso es lo peor que puede pasarte en ese estado: no ves la hora en la que llegue el amanecer. Se te caen las paredes encima.

Me senté mirando a la tele, agarré el teléfono y marqué su número. Sin llamar, me quedé mirándolo un buen rato; sabía lo que venía después si lo hacía, "este número tiene las llamadas restringidas". Así estuve un rato. Al final llamé, siempre lo hacía: "le informamos que este número tiene las llamadas restringidas..."

Era imposible dormir; pensé en salir a pasear, quizá afuera corriera un poco el aire, estaba cociéndome vivo, pero la "bajada" me había dejado tronchao, casi ni podía mover las piernas, las sentía pesadas, con calambres, como si un puñetero chino estuviera practicando la acupuntura en ellas, un chino de los de antes, de los de Fumanchú, de los de Rambo, un chino cabrón, un chino torturador...Así que me quedé en casa.

Poco a poco fui dándome cuenta de lo que estaba viendo en el televisor: un programa de ésos donde una tipa no para de gritar que la llames para llevarte no sé cuantos miles de euros mientras una música machacona, demoníaca, destroza tus oídos.

Si yo hubiera estado normal no habría tardado ni cero coma en cambiar de canal. Si hubiera estado medio normal le habría quitado el volumen. Pero como estaba iluso no hice ninguna de esas dos cosas; así que, paulatinamente, empecé a prestarle atención.

La cosa era sencilla en apariencia, como todas las trilirerías: sobre un recuadro en la margen izquierda de la pantalla podían verse unos números y unos símbolos matemáticos, nada del otro mundo, sumar, restar, multiplicar, dividir...¡shishi, si ya lo hacen hasta los monos!. "Vamos a ver...73"

El personal comenzó a llamar.

- ¡¡¡HOLA!!!
- ¿hola?...¿soy yo?
- ¡¡¡SÍ, ERESTÚ. DIMETUNOMBRE!!!
- ¿hola?
- ¡¡¡SÍSÍ...ESTÁSENATENA!!!...¿TUNOMBRE?
- Sara Jessica
- ¡¡¡MUYBIEN, BENITA. DIME EL RESULTADO!!!
- ¿15?
- NOOOOOOOOO...OHHHHHHHHHH...¡¡¡QUÉ PENA!!! ¡¡¡SIGUIENTE LLAMADA, CONTROL!!!

Y así una tras otra; tíos y tías, voces viejas, maduras, hasta de alguna criatura, "¿CUANTOSAÑOSTIENES?", "11"...Nadie acertaba; agarré el paquete de Marlboro, encendí uno que me duraría dos horas...

"Vamos a ver...voy a hacerlo con lápiz y papel, no sea que me haya equivocao...sumas 9, restas tres, multiplicas 23 por...73"

Más llamadas, la cinta que vomitaba billetes echaba humo, "¡¡¡YAHORADOSDE500EUROS!!!", el bote para arriba, cinco dígitos, "¡shishi!".

Comencé a ponerme nervioso.

No acertaba ni Dios. "¿Pero qué huevones pasa aquí? ¿están tós iluso?".

Al móvil, opción calculadora, "15 dividido entre 5, menos 7, mas 24...73"

- ¡¡¡CONTROL, CONTROL...PORFAVOR!!!...DOS MI-NU-TOS DE CONEXIÓN-TOTAL...¡¡¡AAAAAAAAAAHORA!!!

Pegué un salto, fui a la mesa del ordenador, al fijo, 90..., "¡¡¡UMMM...QUÉ CERCA...PRUEBA A INTERTALO OTRA VEZ!!!".

Lo intenté todas las veces que pude mientras duró la conexión-total. Sonó otro bocinazo en el televisor...

- ¡¡¡HOLA!!!
- ¡¡¡HOLA!!!
- ¡¡¡TUNOMBREPORFAVOR!!!
- ¡¡¡MANOLO!!!
- ¡¡¡MUYBIENBENITO!!!...Y AHORA CALMA...HAY 39.800 EUROS EN JUE...
- ¡¡¡125!!!
- ¡¡¡¡¡¡¡¡NOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOO!!!!!!!!!!!!!!

Otra vez el pandemonium musical, la cámara en plan headbanging, sirenazos, bocinazos, colorazos, la hijaputa bramando por más llamadas, las cinco y pico de la mañana...

"¡¡¡me acuerdo de MI fruta VIDA!!!"

90..."UMMM...¡¡¡CASI...ESTA VEZ HAS ESTADO MUY CERCA...SIGUE INTENTÁNDOLO!!!"

Y lo intenté, y lo intenté, ya me daba igual, sin control, pavo y medio la llamada, ¿qué más da?, ¡¡¡HAY 45000 NEUROS EN EL BOTE Y SÓLO YO SÉ LA RESPUESTA, me acuerdo de LA progenitora QUE PARIÓ AL COPÓN...VOY A IRME A LAS VEGAS, AL CASINO MÁS GRANDE CON LA fruta MÁS CARA Y VOY A explotar LA BANCA, jorobaR, YA...!!!


Entonces, en un momento de lucidez, cuando me dí cuenta de lo que estaba haciendo, colgué para no levantarlo más, apagué el televisor y me fui a la cama convencido de que no podría dormir.


Pero me dormí.


Al despertar dos horas más tarde pensé que todo había sido un sueño.


Y me fui andando al bar.
 
Volver